Editorial Alaire

J. J. Martínez Ferreiro escribió:
En el balcón de la terraza
inclinado sobre los mimbres del otoño
mirando los embarcaderos
las boyas emergiendo
en el azul entre las chalanas de colores
sin apenas los reflejos
de una chillona bandada de gaviotas

hacia dónde van
en el vacío suspendidas
alta vista más alto cielo aguas más altas

No es nada
pero también es la infinita posibilidad
de sentir apenas los alambres del corazón
todo el mar en un cántaro
y esas luminarias casi frías
que destila la calma
la paralela veloz
de los cormoranes a ras de agua

y dentro la guitarra en la pared
apoyada contra la cortina
y a través del cristal también sobre el mar
de ahí el salitre de sabores visibles
que desprende su música callada

Magnífica visión, estado contemplativo, viaje interior. Subrayo algunos versos. Un abrazo, amigo Ferreiro.
Salud.

Me ha encantado tu poema lleno de vida y de magníficos versos. Aplaudo ese mirar y sentir, como una instantánea reflejada con maestría.
Abrazos
Pilar

Tu poema, J.J. Martinez, me aporta tranquilidad y me transporta a ver esa manada de gaviotas sobre el mar y una guitarra que de sus cuerdas, sale una música silenciosa que solo en el interior de uno, se puede oír.
Un placer pasar por tu arte poético.
Un abrazo con mi respeto.

Nada más fructífero para la inspiración del poeta, que el hecho de observar y tú en ello, eres un maestro. Mi enhorabuena.

Estoy viendo lo mismo que tú, me lo gritas en cada verso de un poema singular, pleno de excelentes figuras, ya comentadas por el amigo, Julio González Alonso. Mis felicitaciones sinceras. Aunque no haga de tu poema un granero de palabras, creo que las señaladas por el amigo y poeta citado, dicen demasiado de tu gran pluma en la poesía.

Desde la soledad de mi isla, amigo Ferreiro, un fuerte abrazo.

José Manuel F. Febles

Julio Gonzalez Alonso escribió:

J. J. Martínez Ferreiro escribió:
En el balcón de la terraza
inclinado sobre los mimbres del otoño
mirando los embarcaderos
las boyas emergiendo
en el azul entre las chalanas de colores
sin apenas los reflejos
de una chillona bandada de gaviotas

hacia dónde van
en el vacío suspendidas
alta vista más alto cielo aguas más altas

No es nada
pero también es la infinita posibilidad
de sentir apenas los alambres del corazón
todo el mar en un cántaro
y esas luminarias casi frías
que destila la calma
la paralela veloz
de los cormoranes a ras de agua

y dentro la guitarra en la pared
apoyada contra la cortina
y a través del cristal también sobre el mar
de ahí el salitre de sabores visibles
que desprende su música callada

Magnífica visión, estado contemplativo, viaje interior. Subrayo algunos versos. Un abrazo, amigo Ferreiro.
Salud.

Gracias, colega, por acompañarme es esta visión. A ver si algún día la hacemos realidad, con dos copas de godello en la mano, apoyados en la barandilla de este mirador a la ría de Ferrol.

Abrazos y salud.

De este poema, me quedo con tu imagen, J.J., con la imagen del poeta con los codos apoyados en la baranda, inclinado hacia el mar, proyectado hacia el mar para recibir dentro las esencias de la mirada.

Compone bien tu figura contra el mar.

Un fuerte abrazo.
Ignacio

Palabra grave la de Ferreiro, un placer pasar por tus visiones.

Pilar Morte escribió:Me ha encantado tu poema lleno de vida y de magníficos versos. Aplaudo ese mirar y sentir, como una instantánea reflejada con maestría.
Abrazos
Pilar

Gracias, Pilariña, celebro que te acerques a este balcón a disfrutar de las vistas.

Bicos e saúde.

Ricardo Linares escribió:Tu poema, J.J. Martinez, me aporta tranquilidad y me transporta a ver esa manada de gaviotas sobre el mar y una guitarra que de sus cuerdas, sale una música silenciosa que solo en el interior de uno, se puede oír.
Un placer pasar por tu arte poético.
Un abrazo con mi respeto.

Gracias, Ricardo, por tan generoso comentario.
Celebro que hayas disfrutado de estos versos.

Abrazos y saldu

J. J. Martínez Ferreiro escribió:Estoy en el balcón de la terraza
inclinado sobre la urdimbre de otoño
mirando los embarcaderos
las boyas emergiendo en el azul
entre las chalanas de colores
sin apenas los reflejos
de una chillona bandada de gaviotas

hacia dónde van
en el vacío suspendidas
alta vista más alto cielo aguas más altas

No es nada
pero también es la infinita posibilidad
de sentir apenas los alambres del corazón
todo el mar en un plato
y esas luminarias casi frías
que destila la calma
la paralela veloz
de los cormoranes a ras de agua

y dentro la guitarra en la pared
apoyada en la cortina
y a través del cristal también sobre el mar
de ahí el salitre de los sabores visibles
que desprende su música callada

Un poema ante fenómenos reales que se transporta a contemplar la gran sinfonia del silencio. Todos tus versos desprenden gran simbolismo, Ferreiro. Un abrazo grande, ERA

Antonio Arjona escribió:Nada más fructífero para la inspiración del poeta, que el hecho de observar y tú en ello, eres un maestro. Mi enhorabuena.

Gracias, Antonio, por tu paso y generosos comentarios. Celebro que hayas disfrutado de estos versos.

Abrazos y salud.

Tan bello como interesante trabajo, amigo Ferreiro.
Abrazos.

José Manuel F. Febles escribió:Estoy viendo lo mismo que tú, me lo gritas en cada verso de un poema singular, pleno de excelentes figuras, ya comentadas por el amigo, Julio González Alonso. Mis felicitaciones sinceras. Aunque no haga de tu poema un granero de palabras, creo que las señaladas por el amigo y poeta citado, dicen demasiado de tu gran pluma en la poesía.

Desde la soledad de mi isla, amigo Ferreiro, un fuerte abrazo.

José Manuel F. Febles

Gracias, Febles, celebro la generosidad de tus comentarios.

Abrazos y salud, querido amigo.