Editorial Alaire

He acotado la savia de mis venas,
he arrastrado el devenir de los días,
aturdido del transitar que ansías
cuando un pañuelo no alivia las penas.

He sentido esas manos yacer llenas,
y agonizar estas venas vacías,
con sangre infectada y con fuego ardías,
como el pecho calcina sus cadenas.

Quiéreme si el infierno no te aflige
el fuego de tu aliento en sementera,
de atisbo frágil, de voz abatida,

deséame, si la carne no exige
la voz que llama, vestida en madera,
para arrancarte de mí, de la vida.

De mi poemario: "Sonetos de bruno desamparo"

Interesante propuesta estimado Alejandro. Formalmente es un soneto bastante peculiar donde destaca el tema de la muerte, metaforizada en distintas imágenes, que centra mi atención en la mayor parte de las estrofas.
Un abrazo y salud

Hermoso trabajo, amigo Alejandro.
Abrazos.

He disfrutado con la lectura de tan pulido e interesante soneto. Un abrazo.

Armilo Brotón escribió:Interesante propuesta estimado Alejandro. Formalmente es un soneto bastante peculiar donde destaca el tema de la muerte, metaforizada en distintas imágenes, que centra mi atención en la mayor parte de las estrofas.
Un abrazo y salud

Pues si te ha llamado la atención, algo, aunque sea mínimo ha salido bien.

Gracias, compañero.

Espero te encuentres bien.

Cuídate.

Un abrazo.

Rafel Calle escribió:Hermoso trabajo, amigo Alejandro.
Abrazos.

Gracias, Rafel.

Un abrazo.

Ramón Carballal escribió:He disfrutado con la lectura de tan pulido e interesante soneto. Un abrazo.

Me alegra, Ramón.

Un fuerte abrazo.

Espero que te encuentres bien.

Alejandro Costa escribió:He acotado la savia de mis venas,
he arrastrado el devenir de los días,
aturdido del transitar que ansías
cuando un pañuelo no alivia las penas.

He sentido esas manos yacer llenas,
y agonizar estas venas vacías,
con sangre infectada y con fuego ardías,
como el pecho calcina sus cadenas.

Quiéreme si el infierno no te aflige
el fuego de tu aliento en sementera,
de atisbo frágil, de voz abatida,

deséame, si la carne no exige
la voz que llama, vestida en madera,
para arrancarte de mí, de la vida.

De mi poemario: "Sonetos de bruno desamparo"

Es un poemas que llora por todas las cosas que se clavan en nuestros corazones y se convierten en las zonas de nuestra vulnerabilidad. Me conmueve la belleza única con que te expresas, Alejandro Costa. Un abrazo grande, RA

E. R. Aristy escribió:

Alejandro Costa escribió:He acotado la savia de mis venas,
he arrastrado el devenir de los días,
aturdido del transitar que ansías
cuando un pañuelo no alivia las penas.

He sentido esas manos yacer llenas,
y agonizar estas venas vacías,
con sangre infectada y con fuego ardías,
como el pecho calcina sus cadenas.

Quiéreme si el infierno no te aflige
el fuego de tu aliento en sementera,
de atisbo frágil, de voz abatida,

deséame, si la carne no exige
la voz que llama, vestida en madera,
para arrancarte de mí, de la vida.

De mi poemario: "Sonetos de bruno desamparo"

Es un poemas que llora por todas las cosas que se clavan en nuestros corazones y se convierten en las zonas de nuestra vulnerabilidad. Me conmueve la belleza única con que te expresas, Alejandro Costa. Un abrazo grande, RA

A mi me conmueve la elegancia que tienes.

Me alegra mucho saber que eso piensas.

Millones de gracias.

Un beso.