La increíble transformación de J. Herodes Rodríguez
Publicado: Vie, 14 Ago 2020 14:41
`
Un frente de calor africano que nunca acaba.
Leerse las últimas noticias del mundo.
La trágica muerte de tu querido loro.
Tener que mandar a tomar por culo
a un hermano, a la exmujer de tus sueños
y a tu exmejor colega el mismo día.
-Y para colmo la vecinita del quinto con el puto reguetón
a todo volumen a la hora de la siesta-
¿Qué...
qué puede causar más indignación
y desasosiego existencial que eso?
J. H. Rodríguez tiene la mente echando humo,
el corazón al 99,8 por ciento
y las cervezas aún calientes.
Abre internet.
Al principio no da crédito.
Luego dice un yo flipo, suspira,
un te cagas y hasta se ríe. También
se le pasan virus letales, superbombas de hidrógeno
y meteoritos asesinos por su recién
hiper-inspirada imaginación.
¡Qué panda de alucinados
que esnifan polvo de ala de mariposa
pueden pensar un lunes de agosto
en pleno siglo XXI que el coñazo de Neruda
es el mejor poeta de la Historia,
y al mismo tiempo poner a Buky
y a la Szymborska en el número 190
y 406 respectivamente!
(votado casi simultáneamente
por unos 2000 individuos
en una patética página web)
Otros 700 rumiantes paleolíticos
(en otra página) dan un like a algún post
que dice cosas como que
los inmigrantes que buscan sus costas
en patera deberían ser obligados
a donar sus órganos a los tiburones,
y los homosexuales y feministas
a repoblar el Sahara.
Entretanto
los millonarios se hacen plaga con la crisis,
los okupas se sindicalizan,
mientras millones de familias
acumulan cartas de desamor de su banco.
En el Sudeste asiático confeccionan
abrigos con la piel del mejor amigo
del hombre y secan el hígado de osos
enjaulados de por vida
para que a los machitos orientales
se les ponga dura.
... Y el resto del mundo no se entera o no se quiere enterar.
Entonces, al anochecer,
a J.H. se le funden los últimos cables,
escribe una mierda de poema
renegando de Dios y su creación favorita.
Acto seguido sale a la calle -coincidiendo
con el inicio del plenilunio-
convertido en vampiro demoniaco.
Se ajusta sus Ray-ban visión nocturna.
Entra en un bar cutre de Malasaña.
Se liga a la primera mujer lobo que encuentra.
Y hambrientos, sin prejuicios
ni contemplaciones, se dirigen
a la planta de maternidad
del primer hospital que ven abierto.
(Por el camino, entre besitos,
arrumacos y alguna S de borracho,
van mordiendo los huevos
a todo varón que se cruzan...)
__________
Un frente de calor africano que nunca acaba.
Leerse las últimas noticias del mundo.
La trágica muerte de tu querido loro.
Tener que mandar a tomar por culo
a un hermano, a la exmujer de tus sueños
y a tu exmejor colega el mismo día.
-Y para colmo la vecinita del quinto con el puto reguetón
a todo volumen a la hora de la siesta-
¿Qué...
qué puede causar más indignación
y desasosiego existencial que eso?
J. H. Rodríguez tiene la mente echando humo,
el corazón al 99,8 por ciento
y las cervezas aún calientes.
Abre internet.
Al principio no da crédito.
Luego dice un yo flipo, suspira,
un te cagas y hasta se ríe. También
se le pasan virus letales, superbombas de hidrógeno
y meteoritos asesinos por su recién
hiper-inspirada imaginación.
¡Qué panda de alucinados
que esnifan polvo de ala de mariposa
pueden pensar un lunes de agosto
en pleno siglo XXI que el coñazo de Neruda
es el mejor poeta de la Historia,
y al mismo tiempo poner a Buky
y a la Szymborska en el número 190
y 406 respectivamente!
(votado casi simultáneamente
por unos 2000 individuos
en una patética página web)
Otros 700 rumiantes paleolíticos
(en otra página) dan un like a algún post
que dice cosas como que
los inmigrantes que buscan sus costas
en patera deberían ser obligados
a donar sus órganos a los tiburones,
y los homosexuales y feministas
a repoblar el Sahara.
Entretanto
los millonarios se hacen plaga con la crisis,
los okupas se sindicalizan,
mientras millones de familias
acumulan cartas de desamor de su banco.
En el Sudeste asiático confeccionan
abrigos con la piel del mejor amigo
del hombre y secan el hígado de osos
enjaulados de por vida
para que a los machitos orientales
se les ponga dura.
... Y el resto del mundo no se entera o no se quiere enterar.
Entonces, al anochecer,
a J.H. se le funden los últimos cables,
escribe una mierda de poema
renegando de Dios y su creación favorita.
Acto seguido sale a la calle -coincidiendo
con el inicio del plenilunio-
convertido en vampiro demoniaco.
Se ajusta sus Ray-ban visión nocturna.
Entra en un bar cutre de Malasaña.
Se liga a la primera mujer lobo que encuentra.
Y hambrientos, sin prejuicios
ni contemplaciones, se dirigen
a la planta de maternidad
del primer hospital que ven abierto.
(Por el camino, entre besitos,
arrumacos y alguna S de borracho,
van mordiendo los huevos
a todo varón que se cruzan...)
__________