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Las 24 flores - XVI - Corbain y los perros en la noche

Publicado: Mié, 01 Abr 2020 12:05
por J. J. Martínez Ferreiro
Corbain
escuchaba los perros en la noche
entre el fulgor y el tintinar distante de las piedras preciosas.

Como se requiere la ausencia en la laguna imaginada,
sentía la repetición de sus lirios,
de su sabor inevitable.
Más allá del rojo, en el extremo del color,
florecían sus pasos hacia la aldea solitaria.
Alguien siempre irrumpía
en su carne recién inaugurada.

Su cuerpo estaba en el cuerpo del campo;
pero era una masa sombría porque su luz aún no llegaba.
sin embargo, de vez en cuando, se le calentaban las manos,
y su mirada humedecía
en el trapo de todas las miradas.

Pero he aquí la más inesperada de las sangres,
el chillido más fiero como un puñal en los corazones,
la sangre que inyectaba sus colores más viejos
en una lágrima astral del dolor.
Qué inquietante martirio dispersaban los hombres!!

Miraba a través de los vidrios
acribillados por las luciérnagas que no lograban penetrarlos.
Qué podía importarle
si mantenía renovadas llamas para sus ojos.

Re: Las 24 flores de los cerezos - Los perros en la noche

Publicado: Mié, 01 Abr 2020 12:32
por Antonio Arjona
Excelente aporte que he leído con interés y aplaudido con fuerza.
Un placer quitarle el inmerecido cero.

Re: Las 24 flores de los cerezos - Los perros en la noche

Publicado: Mié, 01 Abr 2020 12:40
por Pilar Morte
Siempre digo que un verso tuyo es un poema y me ratifico. Me gustó mucho el poema con esas imágenes que tan bien manejas. Felicidades.
Abrazos
PIlar

Re: Las 24 flores de los cerezos - Los perros en la noche

Publicado: Mié, 01 Abr 2020 13:27
por Ricardo López Castro.
Aprovechas al máximo cada palabra para una construcción impecable.
Abrazos y felicidad, querido amigo.

Re: Las 24 flores de los cerezos - Los perros en la noche

Publicado: Mié, 01 Abr 2020 19:37
por Simon Abadia
J. J. Martínez Ferreiro escribió:Su cuerpo estaba en el cuerpo del campo;
pero era una masa sombría porque su luz aún no llegaba.

Tiritaba delante de los ancianos.
Era un ladrón a oscuras.

Escuchaba los perros en la noche
entre el fulgor y el tintinar distante de las piedras preciosas.

No era como los otros,
sin embargo, de vez en cuando, se le calentaban las manos,
y su mirada se limpiaba en el trapo de las miradas.
Alguien siempre iniciaba su carne recién muerta.

Como se requiere la ausencia en la laguna imaginada,
sentía la repetición de sus lirios, de su sabor inevitable.
Más allá del rojo, en el extremo del color,
florecían sus pasos hacia la aldea solitaria.

He aquí la más inesperada de las sangres,
el chillido más fiero como un puñal en los corazones,
la pena que inyectaba sus colores más viejos
en una lágrima espacial del dolor.
Qué inquietante martirio dispersaban los hombres!!

Miraba a través del cristal
acribillado por las luciérnagas que no lograban penetrar.
Qué podía importarle si mantenía llamas para sus ojos
ahítos de esperanza.

Bello poema con imágenes acordes. Lo he disfrutado
Abrazos

Simon

Re: Las 24 flores de los cerezos - Los perros en la noche

Publicado: Jue, 02 Abr 2020 13:02
por J. J. Martínez Ferreiro
Antonio Arjona escribió:Excelente aporte que he leído con interés y aplaudido con fuerza.
Un placer quitarle el inmerecido cero.
Gracias, amigo Antonio, por abrir este tema de tan generosas maneras.

Un abrazo y salud más que nunca.

Re: Las 24 flores de los cerezos - Los perros en la noche

Publicado: Jue, 02 Abr 2020 20:12
por Alejandro Costa
Comparto plenamente el comentario de Pilar,
cualquier verso tuyo en sí es un verdadero poema.

Una obra magnífica.

Un abrazo, compañero.

Re: Las 24 flores de los cerezos - Los perros en la noche

Publicado: Vie, 03 Abr 2020 9:29
por Ramón Castro Méndez
Me ha gustado mucho el poema, amigo Ferreiro. La fuerza y la vitalidad de las imágenes van creando un clima de suspense que nos adentra paso a paso en el poema para explosionar contundentemente con un final espectacular.
Todo un placer de lectura.
Te envío mis aplausos.

Un fuerte abrazo.

Re: Las 24 flores de los cerezos - Los perros en la noche

Publicado: Sab, 04 Abr 2020 19:54
por J. J. Martínez Ferreiro
Pilar Morte escribió:Siempre digo que un verso tuyo es un poema y me ratifico. Me gustó mucho el poema con esas imágenes que tan bien manejas. Felicidades.
Abrazos
PIlar
Gracias, Pilariña, por dejar tu huella en estos versos.

Un bico desde las trincheras de Viveiro, y salud más que nunca.

Re: Las 24 flores de los cerezos - XVI - Los perros en la no

Publicado: Sab, 04 Abr 2020 20:25
por Ramón Carballal
Un lujo de poema. Parabéns e unha aperta.

Re: Las 24 flores de los cerezos - Los perros en la noche

Publicado: Dom, 05 Abr 2020 13:24
por J. J. Martínez Ferreiro
Ricardo López Castro escribió:Aprovechas al máximo cada palabra para una construcción impecable.
Abrazos y felicidad, querido amigo.
Gracias, Ricardo, por tu paso y generosos comentarios. Celebro que hayas disfrutado de estos versos.

Un abrazo y salud más que nunca.

Re: Las 24 flores de los cerezos - XVI - Los perros en la no

Publicado: Dom, 05 Abr 2020 13:57
por Ventura Morón
Precioso poema amigo. Un lenguaje rico que construye imágenes muy bellas.
Un gusto leerte, abrazo grande

Re: Las 24 flores de los cerezos - XVI - Los perros en la no

Publicado: Dom, 05 Abr 2020 22:25
por Óscar Distéfano
Un derroche de imágenes para crear una atmósfera casi onírica. Tiene sus enigmas, pero el poema no se cierra; invita a otras lecturas, para ir descubriendo más al personaje. No sé si debería yo leer toda la serie para tener una idea más acabada de esta obra. Enhorabuena.

Un saludo fraterno.
Óscar

Re: Las 24 flores de los cerezos - XVI - Los perros en la no

Publicado: Dom, 12 Abr 2020 7:40
por Rafel Calle
Tan bello como interesante trabajo, amigo Ferreiro. Estás en vena, en esta ocasión abundando con tu personaje favorito: Corbain.
Felicidades.
Abrazos.

Re: Las 24 flores de los cerezos - XVI - Los perros en la no

Publicado: Dom, 12 Abr 2020 17:45
por Julio Gonzalez Alonso
J. J. Martínez Ferreiro escribió:


Corbain no era como los otros,
sin embargo, de vez en cuando, se le calentaban las manos,
y su mirada se limpiaba
en el trapo de las miradas.
Alguien siempre irrumpía en su carne recién muerta.

**

Miraba a través de los vidrios
acribillados por las luciérnagas que no lograban penetrarlos.
Qué podía importarle
si mantenía renovadas llamas para sus ojos.

Es difícil narrar en poesía sin perder las referencias de la poesía, y tú lo haces de manera brillante y, yo diría, natural. Tu estilo consolidado es un bello referente, amigo Ferreiro. Mi abrazo desde estas costas cantábricas.
Salud.