Naturaleza
Publicado: Dom, 22 Mar 2020 20:12
Naturaleza, muerta o no,
siempre encima
llevamos en la muñeca
en los móviles, en la cabeza
un tiempo que creemos
para nuestra desgracia
un metal precioso
y no paramos de dar vueltas
y más vueltas a la cabeza
y las manos, hasta conseguirlo
transformamos demasiado
hacemos demasiado ruido
navegamos demasiado
disponemos de los recursos necesarios
o eso creíamos
naturaleza, muerta o no
transformista, generosa, hermosa,
pero no imbécil, reaccionas a tiempo
y el tiempo no es oro
el patrón oro, el dinero fiduciario
es nada, una nada opcional
para el bien común
debería
lo sabemos algunos
humanos, gregarios
señores de letras
pero nos ciega el oro de las Indias,
el petróleo de Venezuela
el gas de Rusia,
el niobio, el litio,
el rodio, el coltán del Congo,
la bolsa de Vall Street
te transformamos,
explotamos demasiado,
te damos de lado
te echamos de más
cubiertas las primarias y las demás,
nos sobran necesidades, inmersos en la publicidad,
dependencia, engaño y plusvalía
el agua es corriente
el mar plástico
los bosques brasas
la nieve brea
especies extinguidas
el sol no sale
no se atreve a salir a la calle
no hay cuerpos en las playas
para presumir de noche
las ventanas, las terrazas, aplauden
a las 20 horas, el cielo es el techo
la casa la cárcel
la mujer, el amor
el padre, el marido
los niños sin colegio
el perro, la vida
el kiosco, la vida
los sanitarios y otros muchos, la vida
hasta Zara, la vida
la vacuna del covid 19
el mundo, un respirador,
una bata, una mascarilla, una cama de la UVI
una sábana que cubre un cadáver
una caravana de coches fúnebres
un féretro sin coronas
un tanatorio vacío
un crematorio de bichos
un cementerio sin flores, sin cemento
naturaleza, viva o muerta,
danos otra oportunidad por favor
¿la merecemos?
por Dios, por tí, madre naturaleza
queremos salir a la calle
sacar a nuestros hijos
salir a tomar el aire
volver a nuestros trabajos
aguantar a nuestros jefes
entrar en los bares, las discotecas
los estadios, los garajes, las facultades,
las residencias, las segundas, los centros de ocio,
respirar la libertad sin mascarillas.
siempre encima
llevamos en la muñeca
en los móviles, en la cabeza
un tiempo que creemos
para nuestra desgracia
un metal precioso
y no paramos de dar vueltas
y más vueltas a la cabeza
y las manos, hasta conseguirlo
transformamos demasiado
hacemos demasiado ruido
navegamos demasiado
disponemos de los recursos necesarios
o eso creíamos
naturaleza, muerta o no
transformista, generosa, hermosa,
pero no imbécil, reaccionas a tiempo
y el tiempo no es oro
el patrón oro, el dinero fiduciario
es nada, una nada opcional
para el bien común
debería
lo sabemos algunos
humanos, gregarios
señores de letras
pero nos ciega el oro de las Indias,
el petróleo de Venezuela
el gas de Rusia,
el niobio, el litio,
el rodio, el coltán del Congo,
la bolsa de Vall Street
te transformamos,
explotamos demasiado,
te damos de lado
te echamos de más
cubiertas las primarias y las demás,
nos sobran necesidades, inmersos en la publicidad,
dependencia, engaño y plusvalía
el agua es corriente
el mar plástico
los bosques brasas
la nieve brea
especies extinguidas
el sol no sale
no se atreve a salir a la calle
no hay cuerpos en las playas
para presumir de noche
las ventanas, las terrazas, aplauden
a las 20 horas, el cielo es el techo
la casa la cárcel
la mujer, el amor
el padre, el marido
los niños sin colegio
el perro, la vida
el kiosco, la vida
los sanitarios y otros muchos, la vida
hasta Zara, la vida
la vacuna del covid 19
el mundo, un respirador,
una bata, una mascarilla, una cama de la UVI
una sábana que cubre un cadáver
una caravana de coches fúnebres
un féretro sin coronas
un tanatorio vacío
un crematorio de bichos
un cementerio sin flores, sin cemento
naturaleza, viva o muerta,
danos otra oportunidad por favor
¿la merecemos?
por Dios, por tí, madre naturaleza
queremos salir a la calle
sacar a nuestros hijos
salir a tomar el aire
volver a nuestros trabajos
aguantar a nuestros jefes
entrar en los bares, las discotecas
los estadios, los garajes, las facultades,
las residencias, las segundas, los centros de ocio,
respirar la libertad sin mascarillas.