Editorial Alaire

Dada la situación de los agricultores y demás obrero del campo y como quiera que todos estén movilizándose para conseguir un acuerdo justo y acorde a sus respectivos trabajos, he querido editar este poema como muestra de mi apoyo. Con ello quiero también, seguir la estela del gran poeta Miguel Hernández.

***
Vida que cabe en un puño.
Aunque el orgullo te sobre,
atado estás al terruño
y llevas contigo el cuño
de joven quemado y pobre.
***
Mi pluma viste de duelo,
se desangra de dolor
al ver como el mismo cielo
te deniega hasta el pañuelo
para enjugarte el sudor.
***
Si volvieras a nacer,
mil consejos te daría.
Mas un vientre de mujer
te concibió sin saber
al mundo que te traía.
***
Tu sueño vive en un verso,
sudores y más sudores,
en la idea estás inmerso
de que todo el universo
se reduce a tus labores.
***
Obedeces los antojos
del señor terrateniente.
Son las sales de tus ojos
rocío para rastrojos
donde muere tu simiente.
***
Cortos serán tus viajes,
tus ayes, palabras meras,
tus hombros para atalajes
y las heridas, los gajes
hasta el día en que te mueras.

Intensidad sensible y emotiva para una de tantas realidades de injusticia querido amigo...gracias por compartir...
Un gusto leerte...te abrazo con todo mi cariño...
Nancy

Gracias Luna Mar, un abrazo.

Tan bello como interesante trabajo, amigo Antonio.
Felicidades.
Abrazos.

Un universo de dolor y sufrimiento, Antonio.
Queda muy bien reflejado tu sentir.
A mí me ha hecho confraternizar.
Abrazos y felicidad, amigo mío.

Una situación que requiere solución urgente, aunque difícil de encontrarla; son demasiados años de olvido.
Me gusto el poema, la forma y el fondo.
Un placer leerte.
Abrazos
Pilar

Hola, Antonio. Te subo este poema de máxima actualidad. No sé si hoy el problema está entre terratenientes y agricultores: en la zona donde yo vivo, Andalucía oriental, casi todas las familias del medio rural que se dedican a la agricultura tienen acceso a la propiedad de la tierra y, sin embargo, sufren este grave problema, lo mismo que los socios de las cooperativas. Seguramente hoy el enemigo de los agricultores no es el clásico señor de la tierra, sino el mercado despiadadamente globalizado. Gracias por tu aportación a la causa.

Muy bueno, compañero. Soy amante de este tipo de poesía cuando está bien escrito. En el tuyo resalta la pulcritud y la eufonía, además del contenido de fuerte denuncia social. Albricias.

Un abrazo fuerte.
Óscar

Hola Antonio,

Un poema de actualidad que has resuelto con un lenguaje nada pyeril ni rimbombante. Me han gustàdo estos versos de arte menor mayormente en octosilabos.

Saludos

Javier