Adónde irán las palomas
Publicado: Dom, 12 Ene 2020 12:29
<<Adónde irán las palomas,
cuando ya no son hermosas…
Adónde ha ido María,
que mi alma no la llora…>>
EL AMOR Y LAS PALOMAS. Facundo Cabral
ADÓNDE IRÁN LAS PALOMAS
Las palomas…
cuando mueren,
¿adónde irán?
Yo conocí a María
(María, la mujer paloma,
la que volaba muy bajito
para verse en su sombra).
Ella decía
que al morir se despiden de sus parques,
glorietas y jardines,
donde ancianos y niños les echaban
miguitas de pan de los bolsillos.
María... la paloma… Aseguraba
que cuando están cansadas de la vida
se posan en su estatua preferida
y le dicen, bajito, que no vuelven;
y que, luego,
planean y descienden hasta el hombro
de algún mendigo amigo
y se duermen un rato en su solapa.
Cuando despiertan
sobrevuelan las calles más angostas
rozando con sus alas
las caras asombradas de los niños
(sabiendo que se les escapa
la vida en ese vuelo).
Después, van a su alero preferido
y se acurrucan
con un ojo cerrado y otro abierto,
como si oyeran a Cabral
cantar en las cornisas.
Y así, de esa manera, poco a poco
desaparecen.
(¿Adónde irán los pájaros que mueren?
¿Alguien los vio en alguna parte?
¿Será que se transforman en las manos
de todos los que quieres?
¿Serán estrellas?
¿Será verdad?
¿Tendrá razón María?
¿Tendrá razón Cabral?
¿Serán la misma cosa el amor y las palomas?)
--oOo--
cuando ya no son hermosas…
Adónde ha ido María,
que mi alma no la llora…>>
EL AMOR Y LAS PALOMAS. Facundo Cabral
ADÓNDE IRÁN LAS PALOMAS
Las palomas…
cuando mueren,
¿adónde irán?
Yo conocí a María
(María, la mujer paloma,
la que volaba muy bajito
para verse en su sombra).
Ella decía
que al morir se despiden de sus parques,
glorietas y jardines,
donde ancianos y niños les echaban
miguitas de pan de los bolsillos.
María... la paloma… Aseguraba
que cuando están cansadas de la vida
se posan en su estatua preferida
y le dicen, bajito, que no vuelven;
y que, luego,
planean y descienden hasta el hombro
de algún mendigo amigo
y se duermen un rato en su solapa.
Cuando despiertan
sobrevuelan las calles más angostas
rozando con sus alas
las caras asombradas de los niños
(sabiendo que se les escapa
la vida en ese vuelo).
Después, van a su alero preferido
y se acurrucan
con un ojo cerrado y otro abierto,
como si oyeran a Cabral
cantar en las cornisas.
Y así, de esa manera, poco a poco
desaparecen.
(¿Adónde irán los pájaros que mueren?
¿Alguien los vio en alguna parte?
¿Será que se transforman en las manos
de todos los que quieres?
¿Serán estrellas?
¿Será verdad?
¿Tendrá razón María?
¿Tendrá razón Cabral?
¿Serán la misma cosa el amor y las palomas?)
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