Editorial Alaire

​
Las pantallas inundan las ciudades
con su publicidad de colores y píxeles.
Autómatas robots limpian en nuestras casas.
Las huellas dactilares son las claves de acceso
a diminutas máquinas con conexión global.

Puedo comprar cerveza desde el pc
con tarjeta de crédito,
pagar dentro de tres meses y beber hoy.
En internet, a los pocos segundos,
leen las necedades que escribo bajo sus efectos.

El mundo a un solo clic,
pero me da lo mismo,

yo sigo enamorado de un culo y una sombra
como un hombre de Cro-Magnon cualquiera.

La tecnología va a toda leche, ahora uno se queda cro-magnon en solo un par de lustros, pero hay cosas que toda la vida y en todas las pocas seguirán enamorando. Y es que aunque los humanos lleguemos mañana a Marte, aún seguimos siendo un poco monos (salidos, asustados y además masocas ). Un placer de lectura, amigo. Un abrazo.

Cuanta verdad en tus versos. Un final que no falla en la vida, ja, ja.
Abrazos
Pilar

Luis.

Esa era la intención, mostrar que por mucha tecnología el impulso primario se va a mantener siempre.

Un abrazo.

Pilar

Es que los Cromañón física y psicológicamente eran el mismo hombre que nosotros, así que es normal que tengamos los mismos intereses.

Un abrazo.

Original y cotidiana propuesta poética. Me ha gustado.
Un abrazo.
J. manuel

Hola, Sergio:

Muy interesante tu poema. Espero que no perdamos el instinto a pesar de que parece que nos quieren convertir en robots.

Un poema muy bueno para reflexionar sobre el estado actual de las cosas.

Un abrazo
Felicidades
Ana

Hola Sergio, al final nuestros instintos más básicos y a la vez más satisfactorios son los que prevalecen, o por lo menos eso espero.
Me encantan tus poemas.
Un abrazo.

jose manuel saiz escribió:Original y cotidiana propuesta poética. Me ha gustado.
Un abrazo.
J. manuel

Gracias, José Manuel. Muy agradable tu visita. Un abrazo.

Ana Muela Sopeña escribió:Hola, Sergio:

Muy interesante tu poema. Espero que no perdamos el instinto a pesar de que parece que nos quieren convertir en robots.

Un poema muy bueno para reflexionar sobre el estado actual de las cosas.

Un abrazo
Felicidades
Ana

Es complicado que nos cambien y dominen de tal modo que se nos olviden los instintos primarios.

Un abrazo, gracias.
Sergio.

Ángeles Hernández escribió:Hola Sergio, al final nuestros instintos más básicos y a la vez más satisfactorios son los que prevalecen, o por lo menos eso espero.
Me encantan tus poemas.
Un abrazo.

Yo también, aunque a veces no estaría mal que el cromañón se desenamorase y siguiera con su cómoda y tecnológica vida.

Un abrazo.

Hermoso trabajo, amigo Valle.
Abrazos.

Gracias, Rafel. Un abrazo.

Ahí andamos; pero sin tarjetas de crédito, ni redes sociales, ni Alexas, ni roombas, ni accesos a donde no nos abran las puertas al llamar al timbre o la aldaba, je je.
Le gustó el poema a este otro cromagnon.
Un abrazote Oncina.

Pero con conexión a internet, Alonso, jejeje, un abrazo.