Editorial Alaire

Escribir un soneto es tan inútil,
mirando el recorrido de los dedos.
La rima consonante es como un pedo
tan hedorosa, tan tronante, fútil.

No harán jamás justicia a su belleza,
once sílabas a tus dos pezones
de aureolas de mimbre de abazones
que calman más mi sed que la cerveza.

¡E hicieron aprendérmelo en la escuela!
y yo como un idiota ¡las countadas!
y ahora otra vez así aunque me la pela.

Y nadie me enseñó que tus zarpadas
que me dejaron como una acuarela
dolían más y no estaban contadas.

Ignacio García,

Arriba, amigo

Volveré


Un abrazo fuerte

muy bueno !! la rima es un corse , segun como adorna pero,entorpece y molesta

El soneto, como soneto, está mal hecho, mal medido, Ignacio. La idea que planteas me parece válida, aunque ya muy discutida, pues muchos no son capaces de hacer un soneto que tenga algo más que un simple conteo silábico, y ahí se pierde la poesía, el lenguaje, el fondo y muchas otras cosas. Persisto en la idea de que ser artista requiere un trabajo, y que no todos lo son, sobre todo cuando se trata de hacer un soneto que resulte interesante, pero da gusto ver cuando alguien usando la forma vence todas sus barreras y da a luz un poema brillante.

Un saludo fraterno, Benjamín.

Gracias Ricardo, Gracias Antonio.

Y gracias Benjamín. No me importa que el soneto esté mal medido, solo pretende parecerlo. Muchas de mis imágenes preferidas están dentro de sonetos. Supongo que aquí solo hay ganas de llamar la atención y de entretenerme un rato. Buscaba que sonara tan inocuo como tantas y tantas composiciones líricas que lo son defendiéndose a si mismas sin decir nada, aquí por lo menos ni se dice nada ni se pretende, para bien o para mal. Un abrazo

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Tu poesía me divierte, que ya es mucho hoy día. Y es un motivo fuerte para acercarme siempre y aprender.

El soneto, el soneto, pues eso, ...el soneto. Cuestión de cálculos aritméticos.
Saludos.



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