Editorial Alaire

Insurgida



Aquí estoy,
como el monstruo que nadie quiso ser,
mordiendo enfurecida las ásperas esquinas del miedo.
Amerizando
en las olas crujientes de la noche.

No sé cómo he venido a este silencio,
a esta calma dolosa
que me lacera con su hueco herido.

Soy carne de flagelo,
muro
horadado de innumerables brechas
por donde fluyen densos manantiales de sombras.

Quiero colgar del labio caliente del vacío
este dolor extraño
que me habita la orilla de los dedos.

Cegar el párpado inmenso de la sangre.
Coser, como si nunca acaeciera,
los bordes harapientos del pasado,
el frío inabarcable de los huesos,
el límite infinito del futuro.

Dormir como la niña que seré.



Pepa

Estremece el dolor tan humano que transmiten estos versos. El verso final es un gran cierre de este logrado poema. Felicidades y un abrazo.

Precioso poema Josefa, muy de tu bello estilo, muy hermoso y profundo.
Un abrazo
J. manuel

Pepa,

un precioso poema, amiga. Me ha gustado muchísimo. Siempre me ha gustado mucho tu poesía. Consigues completar el tema de manera brillante, cohesionadamente. Me han encandilado varios inventos de verdadero talento:

las olas crujientes de la noche.

Así, como final de estrofa, con una adjetivación "impropia", como dice Felipe, es decir: propia del hecho poético.

Soy carne de flagelo
colgar del labio caliente del vacío

Y luego ese verso final, de antología.

A mí me encanta.
Un abrazo, amiga.

Bellísimo poema Nieves, lleno de hallazgos poéticos. Poco te prodigas, supongo que tus motivos tendrás, así que ver algo tuyo se ha convertido en un premio maravilloso. También es cierto que lo bueno se aprecia mejor con cuentagotas.
En cualquier caso todo un honor leerte, estimada amiga, y enviarte un abrazo muy grande

Creo y deseo que este dolor tan profundo no sea actual sino de las sombras del pasado. Sea como fuere, es un poema que llega y se queda en el sentimiento, unos versos muy logrados. Felicidades.
Abrazos
Pilar

Desembarcados en estas orillas, nos quedan los bagajes que la marea trae y ese no saber cómo hemos llegado.
Elucubraciones mías... y me gusta dejarme llevar por las imágenes que llegan.
Un abrazote, Pepa, a la espera de la próxima niñez.

Josefa A. Sánchez escribió:
Aquí estoy,
como el monstruo que nadie quiso ser,

Este verso me pareció genial, enormemente inspirado e inspirador. Saludos cordiales, compañera,

Un abrazo, Pepa, para que esta sublevación tan vívida y expuesta, no altere ni el ánimo ni la fuerza vital que representas.

Víctor

Un poema de gran intensidad y fuerza transmisora, y de enorme belleza.

Leerte es siempre un lujo, Pepa. Me alegra tu regreso.

Un abrazo.

Enorme el significado de este poema, que me ha encantado en su totalidad. Mis abrazos, Pepa.

Emocionante y emocionado poema, amiga Pepa. Me ha causado un estremecimiento la lucidez de tus versos. Mi abrazo.

Aunque estremece por el dolor que transmite, qué bello es este poema y cuánto lirismo contiene. Enhorabuena, amiga Pepa, por esta obra tan perfecta.
Saludos afectuosos, admirada poetisa.

Pepa, querida amiga, releo y más me impacta ese dolor tan profundo. Es un poema de poeta consagrada.
Aplausos miles. Además creo, como te dije, que ese dolor es antiguo. Así sea.
Abrazos
Pilar