Editorial Alaire

¿Puede un cobarde despedirse, abrir sus venas y empapar con sangre la cabeza de la serpiente?


El cobarde recoge los cascotes del armazón dorado,
barre el polvo de las ilusiones
y espera que llegue la noche.
Como un murmullo perdido en la oscuridad
el viento se escuda en frases huecas,
para no decir nada,
pretende anular los meses, las semanas...

... y el cobarde se imagina cobarde,
descubre que el espejo es un dios olvidado
que ríe con los dientes podridos,
después destruye las ilusiones
sin el más mínimo interés por el semejante,
y se siente bien.

Cobarde es quien se esconde,
quien se oculta tras las sombras,
inquieto...

Descuidando el oleaje,
piensa que un adiós es necesario,
y revienta las teclas del portátil buscando
la fórmula ideal,
la forma correcta de frenar la caída,
la forma perfecta para informar al oponente
de su mínimo interés por el juego.

El cobarde dibuja mentiras con esperma,
y sostiene las imágenes fugaces entre sus dedos,
nunca las pidió,
nunca quiso ser el secundario
de una película de Richard Curtis,
pero el cobarde huye,
¿verdad, mirada triste?,
el cobarde escapa de la realidad y soporta
el silencio avergonzado.

Cobarde es quien se esconde,
quien se oculta tras las sombras,
inquieto...

Nunca supo el cobarde de su cobardía,
siempre confundió la prudencia con la arrogancia,
la falta de horizontes con el aburrimiento.

Siempre supo que frente a la nada
elegiría el frío antes que el vuelo.

Oh, has escrito un poemazo, querido amigo.

El cobarde, el frío destruyendo la noción de alas, el pulso de piedra, los portátiles desangrados.

Espero que los aplausos se escuche en Madrid.

Beso grande y felicitaciones sinceras.

Un poemazo, Israel:

Las palabras precisas, la emoción justa, la descripción certera de todos los procesos.

Alucinante

Aplausos, compañero
Un beso
Ana

Buen poema, Israel, con versos certeros y llegadores. Felicidades.
Abrazos
Pilar

Hallie Hernández Alfaro escribió:Oh, has escrito un poemazo, querido amigo.

El cobarde, el frío destruyendo la noción de alas, el pulso de piedra, los portátiles desangrados.

Espero que los aplausos se escuche en Madrid.

Beso grande y felicitaciones sinceras.

Hallie, muchas gracias por tu generosidad y por estar siempre ahí.

Un beso enorme, compañera.

Ana Muela Sopeña escribió:Un poemazo, Israel:

Las palabras precisas, la emoción justa, la descripción certera de todos los procesos.

Alucinante

Aplausos, compañero
Un beso
Ana

Ana, muchas gracias por tus palabras.

Un beso, compañera.

F. Enrique escribió:

Me ha gustado mucho tu poema, Israel, quizás sea que yo también sé mucho de cobardía y me he sentido cerca de algunas cosas que dices; uno no elige ser cobarde.

Un abrazo.

No, no lo elige, aunque creo que en ocasiones se confunde el concepto de cobardía. Los valientes no lo son tanto

Un abrazo, compañero.

Pilar Morte escribió:Buen poema, Israel, con versos certeros y llegadores. Felicidades.
Abrazos
Pilar

Gracias Pilar, siempre es un placer saber que leíste el poema.

Un abrazo, compañera.

Definitivamente, tienes una manera de escribir muy particular, genial y que, hasta la fecha, me sigue atrapando.

¡Qué poemazo te has lanzado!

Israel,

me gusta mucho, amigo. Un poema que redunda en la manera auténtica y sensible que tienes de hacer poesía. Ajeno a toda impostura, a toda provocación fácil, a todo pelotilleo al lector y tu propio autor. Todo lo contrario: respeto por tu autor y por el lector, verdad, necesidad de expresarse, necesidad de exorcizar fantasmas, afán por encontrar palabras adecuadas. Y luego tu gran capacidad para fijar el cuadro, para definir la escena y los personajes.

A mí me gusta mucho.
Abrazos.

Ara López escribió:Definitivamente, tienes una manera de escribir muy particular, genial y que, hasta la fecha, me sigue atrapando.

¡Qué poemazo te has lanzado!

Gracias Ara, sabes que pienso lo mismo de tu manera de escribir, no me pierdo ningún poema tuyo.

Un abrazo.

Pablo Ibáñez escribió:Israel,

me gusta mucho, amigo. Un poema que redunda en la manera auténtica y sensible que tienes de hacer poesía. Ajeno a toda impostura, a toda provocación fácil, a todo pelotilleo al lector y tu propio autor. Todo lo contrario: respeto por tu autor y por el lector, verdad, necesidad de expresarse, necesidad de exorcizar fantasmas, afán por encontrar palabras adecuadas. Y luego tu gran capacidad para fijar el cuadro, para definir la escena y los personajes.

A mí me gusta mucho.
Abrazos.

Gracia por tus palabras, Pablo, y gracias por el tiempo dedicado a la lectura del poema.

Un abrazo, compañero.

Profundo e intenso este recorrido que desahoga un emotivo retrato querido amigo...
Un gusto leerte...te abrazo con todo mi cariño...
Nancy

Me ha encantado tu poema Israel, me gusta tu estilo.
Un abrazo, amigo.
J. Manuel