Editorial Alaire

Gritan los muros en trazos de graffitis
y la calle abre boca de lujuria

Entre muros, paredes y escaleras
un torso abierto, sacrificio de un invierno
es derramado en sangre y silencio
en el altar de una ciudad deshabitada

Callejones hambrientos, pulsión desesperada
surco abierto más allá de la locura

En el margen del hades y el silencio
la noche exhala el último suspiro
en la ciudad donde los ángeles no cantan

Dejo mi huella en tus versos, ha sido un placer
leerlos.
Abrazos

Cualquier tipo de violencia, angustia; al menos a mí. El enfrentamiento entre unos, o varios, o muchos -y de eso nosotros sabemos bastante: mucho, mucho más de lo deseable-, duele y asusta y angustia. Y el tipo de violencia que tan bien describes en tu poema y que aún, por suerte, no conocemos bien, angustia mucho. Mucho.

No diré que me ha gustado tu poema: desearía que no hubieras tenido que escribirlo. Si bien, es un problema que nos afecta a todos. Por lo tanto, tuyo y mío: nuestro.

Blanca

Eduardo Díaz escribió:Gritan los muros en trazos de graffitis
y la calle abre boca de lujuria

Entre muros, paredes y escaleras
un torso abierto, sacrificio de un invierno
es derramado en sangre y silencio
en el altar de una ciudad desabitada

Callejones hambrientos, pulsión desesperada
surco abierto más allá de la locura

En el margen del hades y el silencio
la noche exhala el último suspiro
en la ciudad donde los ángeles no cantan

Lila Manrique escribió:Dejo mi huella en tus versos, ha sido un placer
leerlos.
Abrazos

Gracias Lila por tus palabras. Un abrazo

[quote="Blanca Sandino"]Cualquier tipo de violencia, angustia; al menos a mí. El enfrentamiento entre unos, o varios, o muchos -y de eso nosotros sabemos bastante: mucho, mucho más de lo deseable-, duele y asusta y angustia. Y el tipo de violencia que tan bien describes en tu poema y que aún, por suerte, no conocemos bien, angustia mucho. Mucho.

No diré que me ha gustado tu poema: desearía que no hubieras tenido que escribirlo. Si bien, es un problema que nos afecta a todos. Por lo tanto, tuyo y mío: nuestro.

Blanca



Blanca, gracias por tus sinceras palabras. Puede ser que la violencia te angustie y que no es un hecho agradable. Desgraciadamente existe ciudades violentas y la poesía no es solamente para escribir lo bonito de la vida. Por eso no comparto contigo que seria mejor no escribir sobre la violencia. Como poeta deberías tener en claro este aspecto.
Eduardo

Impactante poema Eduardo. No cabe duda, que todos tenemos ciudades, países, calles, en donde los ángeles no cantan, más bien lloran y están sin alas. Doloroso, real.
Usas imágenes que no podían faltar en este poema para ser urbano: grafitti, lujuria, violencia, la falta de miradas que cobijen. Bello poema, que me deja pensando en mi propia ciudad. No hay país en donde no exista un lugar como este. Un abrazo.

Eduardo Díaz escribió:Gritan los muros en trazos de graffitis
y la calle abre boca de lujuria

Entre muros, paredes y escaleras
un torso abierto, sacrificio de un invierno
es derramado en sangre y silencio
en el altar de una ciudad desabitada

Callejones hambrientos, pulsión desesperada
surco abierto más allá de la locura

En el margen del hades y el silencio
la noche exhala el último suspiro
en la ciudad donde los ángeles no cantan

Buen poema donde la imagen de la urbe se erige como un monstruo gigante. Queda latente en sus versos la soledad de la multitud, la desesperanza que camina a nuestro lado mientras nosotros volvemos la vista. Es un tema que me encanta. Un saludo y te seguiré leyendo.

elisa.

Alejandra Goerne escribió:Impactante poema Eduardo. No cabe duda, que todos tenemos ciudades, países, calles, en donde los ángeles no cantan, más bien lloran y están sin alas. Doloroso, real.
Usas imágenes que no podían faltar en este poema para ser urbano: grafitti, lujuria, violencia, la falta de miradas que cobijen. Bello poema, que me deja pensando en mi propia ciudad. No hay país en donde no exista un lugar como este. Un abrazo.

Gracias Alejandra por tu comentario. Aprecio mucho que estés presente en estos versos urbanos. Un fuerte abrazo, Eduardo

Elisa Berna Martínez escribió:

Eduardo Díaz escribió:Gritan los muros en trazos de graffitis
y la calle abre boca de lujuria

Entre muros, paredes y escaleras
un torso abierto, sacrificio de un invierno
es derramado en sangre y silencio
en el altar de una ciudad desabitada

Callejones hambrientos, pulsión desesperada
surco abierto más allá de la locura

En el margen del hades y el silencio
la noche exhala el último suspiro
en la ciudad donde los ángeles no cantan

Buen poema donde la imagen de la urbe se erige como un monstruo gigante. Queda latente en sus versos la soledad de la multitud, la desesperanza que camina a nuestro lado mientras nosotros volvemos la vista. Es un tema que me encanta. Un saludo y te seguiré leyendo.

elisa.

Gracias Elisa por estar presente con tu generoso comentario. La urbanidad es un tema inacabable y actual. Es un monstruo de mil rostros. Un abrazo y nos leemos. Eduardo

Eduardo Díaz escribió:

Blanca Sandino escribió:Cualquier tipo de violencia, angustia; al menos a mí. El enfrentamiento entre unos, o varios, o muchos -y de eso nosotros sabemos bastante: mucho, mucho más de lo deseable-, duele y asusta y angustia. Y el tipo de violencia que tan bien describes en tu poema y que aún, por suerte, no conocemos bien, angustia mucho. Mucho.

No diré que me ha gustado tu poema: desearía que no hubieras tenido que escribirlo. Si bien, es un problema que nos afecta a todos. Por lo tanto, tuyo y mío: nuestro.

Blanca



Blanca, gracias por tus sinceras palabras. Puede ser que la violencia te angustie y que no es un hecho agradable. Desgraciadamente existe ciudades violentas y la poesía no es solamente para escribir lo bonito de la vida. Por eso no comparto contigo que seria mejor no escribir sobre la violencia. Como poeta deberías tener en claro este aspecto.
Eduardo

Hola : ) Gracias por la respuesta, Eduardo, y por el consejo: me lo quedo, desde luego que sí. Siento que he debido expresarme mal. Lo que te comentaba es que desearía que no hubieras tenido que escribirlo. Y lo sigo deseando.

A veces nos traiciona el lenguaje, y el lugar donde nacimos; yo conservo -no sé si éste es el caso- muchos 'giros' asturianos.

Gracias. Muchas.


Blanca

Muy buenos estos versos. Algunas veces he sentido algo así recorriendo ciertas ciudades... pero tú lo has sabido plasmar con precisión y concreción. Un poema realmente bueno.
Un abrazo Eduardo.
J. manuel

Eduardo Díaz,

Realidad que se nos enfrenta
en los versos y en la vida...

Calidad en tu poesía, querido amigo

Un abrazo fuerte

Eduardo Díaz escribió:Gritan los muros en trazos de graffitis
y la calle abre boca de lujuria

Entre muros, paredes y escaleras
un torso abierto, sacrificio de un invierno
es derramado en sangre y silencio
en el altar de una ciudad deshabitada

Callejones hambrientos, pulsión desesperada
surco abierto más allá de la locura

En el margen del hades y el silencio
la noche exhala el último suspiro
en la ciudad donde los ángeles no cantan

Buena descripción de la ciudad deshumanizada en su representación humana, compartiendo pasiones, locura, violencia y hambre. No hay ángeles. Tal vez en los sueños o en algunas pesadillas; pero, aún siendo prescindibles para nuestra común existencia, su presencia en el último verso acentúa el ambiente decadente de la ciudad habitada.

Salud.

Es un cuadro que se repite todos los dias amigo Eduardo. Es poema que llega.

Placer leerte en esta mañana

Abrazos

los graffitis, pintadas en castellano,
no solo expresan angustia o malestar social como
está célebre pintada que quedó inconclusa ocurrida en agosto del año 1976:
"Pan trabajo y lib" y que costó la vida al entonces joven estudiante Javier Verdejo;


en el mayo francés del 68 se hicieron célebres frases como estas
escrita en una pared:

"Seamos realistas.... pidamos imposibles"

"Prohibido prohibir"

"Imaginación al poder"

"Olvídense de todo lo que han aprendido. Comiencen a soñar"

En España, en la época del Felipismo, recuerdo un graffiti que
parafraseaba el lema de campaña del PSOE (por las cosas bien hechas)
y que fue respondida con un graffiti que corrió como la polvora por muchas ciudades:
"Estamos hasta los cojones de las cosas bien hechas"

hoy algunos graffitis son galardonados por instituciones porque de alguna manera no deja
de ser un arte actual, un medio de expresión urbana, muchas veces original y creativo; tambien es cierto que algunos que se dicen graffiteros son unos desalmados que joden fachadas y monumentos.

tu poema me trajo estos recuerdos


Un gusto la lectura

te mando un abrazo