Editorial Alaire

aunque puedo aún poblar la tierra
con el vigoroso fruto
un bolsillo agujereado soy
que no cabeza
incapaz de conservar los residuos del día anterior
y es por eso que la noche
-lo más cercano a la muerte-
ya no se olvida de mí
cuando bate sus alas de cristales rotos
para reventarme el sueño
que ya sin raíces a nada se adhiere
y antes de que despunte el alba
me uno al rencor de ser oscuro
y transformado en ave de presa
emprendo la búsqueda de algo más viejo y gastado que yo
con el fin de afligirle el ácido castigo de mi vejiga
pues así es cómo la paz torna a mi corazón
generalmente baldío
que hasta el caótico universo cobra algún sentido
mágico momento que aprovecho
para consultarle al sol la hora y ponerme en marcha
pisando fuerte el pavimento porque aun sin cabeza
sigo teniendo acomodo en este puerco mundo

Me gustó el poema, está muy bien escrito y acepta el paso del tiempo con sus consecuencias. Un placer leerte.
Abrazos
Pilar

Hondo, intenso y contundente...
Un gusto leerte querido amigo
Te abrazo con todo mi cariño...
Nancy

[quote="Pilar Morte"]Me gustó el poema, está muy bien escrito y acepta el paso del tiempo con sus consecuencias. Un placer leerte.
Abrazos
Pilar[/quo

Gracias, amiga, por tu amable comentario.
Saludos afectuosos.

Lunamar Solano escribió:Hondo, intenso y contundente...
Un gusto leerte querido amigo
Te abrazo con todo mi cariño...
Nancy

Gracias, amiga, por estar siempre llenando mi humilde rincón poético de bellos y elogiosos comentarios.
Saludos afectuosos, admirada poetisa.

John,

me gusta el poema, amigo. Lo interpreto en clave de canalla nocturno que, a pesar de las penalidades y confusiones que trae la noche, persiste con orgullo en su empeño y en su ser, porque no puede ser de otra forma. Aun sin cabeza, tiene acomodo en este mundo. Me gustan los detalles duros y bellos, la coherencia del texto.

Un abrazo.