Editorial Alaire

Tu ocaso extrasensorial

A Sofi.

Todos los días los ídolos de la isla fugan ese amor…
Cada día, se muere una paz, y el huerto olvidado.
Fenecen los dioses y Heráclito surge de tu río.

A veces, un pájaro entreteje las huestes de las nubes.

Te amo, y el recorrido de los Idolatras pasa,
Juegan a los cuentos en verbos ígneos.

La palabra es como un ajedrez ignoto,
Más allá de la eternidad y huesos de España,
Junto a un gato de negro verdor, tu luna, tu eclipse.

Las calandrias humean en la mítica ciudad,
Tus rostros me atraen, en la muerte, en la vida.

Tu numen, tus luces, emancipan la fe de una hormiga.

Las banderas rugen, las latencias de Borges en el Tango,
Tu ruego de serpiente humea, llamea, hiere y sangra la vida.

Nunca me esperes
Poeta que es el carcelero de las mismas gotas de sangre
De los mismos días y fronteras
De esa soledad
Tus rostros no son la ceguera de un pez, ni de un ser.
Dioses
En Grecia se tienden a rumiar la verdad
Tuya
Tuya
Hasta el regreso de un día más por tus mieles de besos.

Javier Dicenzo escribió:Tu ocaso extrasensorial

A Sofi.

Todos los días los ídolos de la isla fugan ese amor…
Cada día, se muere una paz, y el huerto olvidado.
Fenecen los dioses y Heráclito surge de tu río.

A veces, un pájaro entreteje las huestes de las nubes.

Te amo, y el recorrido de los Idolatras pasa,
Juegan a los cuentos en verbos ígneos.

La palabra es como un ajedrez ignoto,
Más allá de la eternidad y huesos de España,
Junto a un gato de negro verdor, tu luna, tu eclipse.

Las calandrias humean en la mítica ciudad,
Tus rostros me atraen, en la muerte, en la vida.

Tu numen, tus luces, emancipan la fe de una hormiga.

Las banderas rugen, las latencias de Borges en el Tango,
Tu ruego de serpiente humea, llamea, hiere y sangra la vida.

Nunca me esperes
Poeta que es el carcelero de las mismas gotas de sangre
De los mismos días y fronteras
De esa soledad
Tus rostros no son la ceguera de un pez, ni de un ser.
Dioses
En Grecia se tienden a rumiar la verdad
Tuya
Tuya
Hasta el regreso de un día más por tus mieles de besos.

A veces suele suceder esto en los foros.

El poema me parece que está bien desarrollado,
que huele a poesía y que merece más lecturas.

Me ha gustado.

Un abrazo.

Esta bien Ronald el escritor hace lo que puede eso lo dice Abelardo Castillo uno de los mejores que tuvo mi pais, el escritor hace lo que puede no lo que debe o lo que quiere, hace lo que su capacidad ignora.

Javier Dicenzo escribió:Tu ocaso extrasensorial

A Sofi.

Todos los días los ídolos de la isla fugan ese amor…
Cada día, se muere una paz, y el huerto olvidado.
Fenecen los dioses y Heráclito surge de tu río.

A veces, un pájaro entreteje las huestes de las nubes.

Te amo, y el recorrido de los Idolatras pasa,
Juegan a los cuentos en verbos ígneos.

La palabra es como un ajedrez ignoto,
Más allá de la eternidad y huesos de España,
Junto a un gato de negro verdor, tu luna, tu eclipse.

Las calandrias humean en la mítica ciudad,
Tus rostros me atraen, en la muerte, en la vida.

Tu numen, tus luces, emancipan la fe de una hormiga.

Las banderas rugen, las latencias de Borges en el Tango,
Tu ruego de serpiente humea, llamea, hiere y sangra la vida.

Nunca me esperes
Poeta que es el carcelero de las mismas gotas de sangre
De los mismos días y fronteras
De esa soledad
Tus rostros no son la ceguera de un pez, ni de un ser.
Dioses
En Grecia se tienden a rumiar la verdad
Tuya
Tuya
Hasta el regreso de un día más por tus mieles de besos.

Extraordinarias imágenes tejen la red y abren los ojos de peces espirituales, Dicenzo. Los dioses aquí son animales,
los dioses son más parecidos al hombre y la mujer común quienes cargan lo más grande en su hormigueo, el amor. En lo personal me parece que la magia de éste poema consiste precisamente en esas pequeñas incongruencias del lenguaje. Me parece que porque tu poema es altamente poético es en si un lenguaje. Te felicito, poeta. ERA

Mi lucha es esta palabra, y doy todo Aristi, como hombre y como poeta, agradezco el apoyo de todos lo que me leen.

Alejandro gracias por tu comentario.

subo para su lectura.