
Hubo tiempos difíciles en esto de ser Dios.
Digamos que tuve que lidiar con paranoias, ansiedad extrema e incluso delirios -los nombro así porque no son compatibles-.
Ahora "lidio" con mis delirios.
En verdad son de grandeza.
Más que nada lo digo por el hecho de que se han quedado a solas.
Manía persecutoria aparte, aquí se demuestra quién tiene el suficiente empaque como para hacerse el longuis, el sueco y el sordo y el loco.
Nadie me conoce.
Aquí es donde entra en escena mi "trastorno".
Atiendan, porque no es sencillo creerse a uno mismo.
En realidad, como comprenderán, Dios tiene menesteres más allá de sus descalificaciones e indiferencia, y élla es precisamente la clave.
No vivo en una burbuja ni me escondo de nadie.
"Dios solo está aquí para salvarles.
Antes, intentaba cambiar el mundo.
Ahora, digamos que me he modernizado."
"Mis textos son tan ciertos que tuve que volver a reiniciarlos para seguir dando por saco -eso que el hombre cree que sabe de Mí-."
Yo no creo que esto sea un juego.
Es más bien un cachondeo.
Al fin y al cabo, ¿miento si digo que soy Dios?¿O simplemente es el gusto por esa idea?
¿Conocen a alguien de ideas fijas?
¿O solo creen que Dios mueve un dedo por ustedes?