Editorial Alaire

Buena noticia,
he vuelto a sonreír,
he prestado mandíbulas de luciérnaga de la noche
como si hubiera descubierto con mis binoculares de cerveza
un establo para domar tu recuerdo.
Me interesa saber
si tus pezones han cambiado con el tiempo,
los imagino más negros,
dime si aún rezas sin sujetador
y si la araña cruenta
que los martes cazaba la sombra de tus pezones
mientras te quedabas distraída en un rincón
dándome la espalda, una de tus múltiples espaldas,
todavía se marea cuando le echas humo de cigarro
y baila y baila en su tela con todas las cascaras
de luciérnaga
que el tiempo ha arrojado allí,
donde no existimos.
Tus pezones de bruja
y esos bares
donde a los hombres les entra ganas de hablar con dios
son prueba de que la noche es un terremoto
y creamos la oscuridad por el miedo a no consumir nuestras sonrisas.
A veces, y hoy es a veces, me despierto
con espinas de sombra clavadas
en mi alma de hipopótamo,
quisiera llorar y no me explico por qué hay lágrimas que no lloran.

Se percibe una luz al final del túnel de los recuerdos, una luz capaz de despertarte en medio de una noche de luciérnagas, encender el alma y dar pie a un poema sembrado de muy bellas imágenes.

Siempre es un placer detenerse en tu poesía, querido amigo. Me ha gustado mucho.

Abrazos.

El tiempo parece que disipó las sombras y una luz se adentra en la noche.
Me encanta leerte, es una fiesta aunque entristezcas los versos.
Abrazos
Pilar

De los pezones de bruja sale el alma viva a poner razón y tiempo-.Yo te animo y te aplaudo para que todo salga tu gusto y perseverancia..Un abrazo que anima y siente.

Rosa, Pilar, Guillermo, muchas gracias por hacer sentida vuestra presencia y por las más que generosas palabras. Ando sin inspiración, me pareció tener una chispa, una idea que diera para un poema, los resultados fueron evidentes. He intentado darle vueltas para de alguna manera estar a la altura de vuestros comentarios, no sé si lo he conseguido, creo que no. Este va a ser el ultimo poema mío publicado, por un largo tiempo, así lo intuyo, escribir sin inspiración es demasiado dolor de cabeza, y mucho trabajo. Os agradezco de corazón haberme leído. Mis abrazos, querid@s amiga@s.

Marius, si todo lo que escribimos fuera la ostia no seríamos humanos, seríamos extraterrestres . Yo, como tú, también ando falto de inspiración, pero no me preocupa, daría palmas porque un poema que escribo de cada diez fueran buenos.
Y sí, escribir sin inspiración es jodido, pero a veces también merece la pena escribir para uno mismo, guste más o menos a los demás.
Por cierto, tus últimos cambios en este poema me gustan mucho. Un abrazo, querido amigo.

Luis, muchos abrazos y gracias por hacer sentida tu presencia, querido amigo.

Marius Gabureanu escribió:Buena noticia,
he vuelto a sonreír,
he prestado mandíbulas de luciérnaga de la noche
como si hubiera descubierto con mis binoculares de cerveza
un establo para domar tu recuerdo.
Me interesa saber
si tus pezones han cambiado con el tiempo,
los imagino más negros,
dime si aún rezas sin sujetador
y si la araña cruenta
que los martes cazaba la sombra de tus pezones
mientras te quedabas distraída en un rincón
dándome la espalda, una de tus múltiples espaldas,
todavía se marea cuando le echas humo de cigarro
y baila y baila en su tela con todas las cascaras
de luciérnaga
que el tiempo ha arrojado allí,
donde no existimos.
Tus pezones de bruja
y esos bares
donde a los hombres les entra ganas de hablar con dios
son prueba de que la noche es un terremoto
y creamos la oscuridad por el miedo a no consumir nuestras sonrisas.
A veces, y hoy es a veces, me despierto
con espinas de sombra clavadas
en mi alma de hipopótamo,
quisiera llorar y no me explico por qué hay lágrimas que no lloran.

El poema en sí me parece interesante y por momentos fascinante.

Pero tengo que remarcar dos versos que me parecen de una altura poética excepcional, y que me han encantado:

"y creamos la oscuridad por el miedo a no consumir nuestras sonrisas"

"no me explico por qué hay lágrimas que no lloran"

Genial.

Un abrazo.

Marius Gabureanu escribió:Buena noticia,
he vuelto a sonreír,
he prestado mandíbulas de luciérnaga de la noche
como si hubiera descubierto con mis binoculares de cerveza
un establo para domar tu recuerdo.
Me interesa saber
si tus pezones han cambiado con el tiempo,
los imagino más negros,
dime si aún rezas sin sujetador
y si la araña cruenta
que los martes cazaba la sombra de tus pezones
mientras te quedabas distraída en un rincón
dándome la espalda, una de tus múltiples espaldas,
todavía se marea cuando le echas humo de cigarro
y baila y baila en su tela con todas las cascaras
de luciérnaga
que el tiempo ha arrojado allí,
donde no existimos.
Tus pezones de bruja
y esos bares
donde a los hombres les entra ganas de hablar con dios
son prueba de que la noche es un terremoto
y creamos la oscuridad por el miedo a no consumir nuestras sonrisas.
A veces, y hoy es a veces, me despierto
con espinas de sombra clavadas
en mi alma de hipopótamo,
quisiera llorar y no me explico por qué hay lágrimas que no lloran.

Me gusta mucho tu desparpajo creativo, Marius. Me gusta esa genialidad expresiva que se mezcla con todas las realidades y las emociones serán humanamente las mismas, pero tu estilo provoca nuevas formas de sonreir y de llorar y de abordar la poesía. Abrazos, ERA

Marius Gabureanu escribió:Rosa, Pilar, Guillermo, muchas gracias por hacer sentida vuestra presencia y por las más que generosas palabras. Ando sin inspiración, me pareció tener una chispa, una idea que diera para un poema, los resultados fueron evidentes. He intentado darle vueltas para de alguna manera estar a la altura de vuestros comentarios, no sé si lo he conseguido, creo que no. Este va a ser el ultimo poema mío publicado, por un largo tiempo, así lo intuyo, escribir sin inspiración es demasiado dolor de cabeza, y mucho trabajo. Os agradezco de corazón haberme leído. Mis abrazos, querid@s amiga@s.

Hola, Marius. Lamento que vayas a interrumpir tu labor creadora. Me gusta tu poesía y disfruto cada entrega. No debe de ser nada fácil trabajar con los elementos con los que tú sueles componer: crear continuamente de la nada tiene que ser agotador. En otro hilo has dicho recientemente que muchas palabras de la lengua castellana están fuera de tu alcance porque no despiertan recuerdos en ti. Es interesante. Pero estoy seguro de que serás capaz de encontrar otra fuente de inspiración —sea lo que sea la inspiración esa—.

Saludos.

Si tienes que tomarte unas vacaciones literarias que sean pequeñas, por favor.
Qué bellos versos:

como si hubiera descubierto con mis binoculares de cerveza
un establo para domar tu recuerdo.

y creamos la oscuridad por el miedo a no consumir nuestras sonrisas

Un abrazo.

Hermoso trabajo, amigo Marius.
Veo que estás inmerso en una de las crisis que suelen afectar a todos los creadores. La superarás.
Te animo a escribir y publicar sin pararte mucho en los resultados. Al final, contaremos (cuando no estemos, que digan lo que quieran de nuestro legado, en el que inevitablemente tendrá que haber de todo).
Abrazos, fuertes y muchos.

Marius,

yo creo que es un buen poema. Tienes talento y lo normal es que lo que escribas tenga, al menos, interés. Yo te animaría a seguir escribiendo aunque notes que tu inspiración no está en forma. Nunca se sabe cuando va a volver y, como decía Picasso: la inspiración existe, pero tiene que pillarte trabajando.

Un abrazo.

Tus pezones de bruja
y esos bares
donde a los hombres les entra ganas de hablar con dios
son prueba de que la noche es un terremoto

... por destacar algo de este más que genial poema.

Tu imaginación explosiona y descienden una marea de palabras que nos arrastran sin remedio alguno a donde tú quieras.

Un fuerte abrazo, POETA.

Disfrutando con tus imágenes deseando que se me pegue algo de tu imaginación jajajaj
Un abrazo amigo