Como esta noche te amo... / A Rafel
Publicado: Mié, 12 Jun 2019 4:02
Como esta noche Te amo.
Como esta noche te amo, más que las luces de esos barcos
húmeda niebla de mujer herida por los besos lejanos.
Como esta noche te amo
mi amor está en tus ojos del infinito cielo.
Hoy las serpientes vuelan como los pájaros
inmune y salvaje hembra mía y hembra del otoño raro.
Luces que se encienden, países que no duermen
doncella de lagarto sombrío de pétalos azules.
Como esta noche te amo, y siento tu piel en el cielo las estrellas
y siento como me amas y odias al olvidar el abismo sideral.
Una vez fuiste niña y eso lo recojo en el lejano tren que corre al infierno
donde están tus manos para tocar piedras sagradas.
Como esta noche te amo, y no no te amare nunca más.
Porque el grito de los santos están, porque eres lamina de risa.
Como esta noche no te amo, no te amo porque eres piel, dulzura, hiel
no nací para ser hombre, solo poeta que admira tu rubia cabellera
Tú me señalas, tú eres la maldita, tú eres la hechicera
adiós, y no huyas más que mi cuerpo
para morir, para morir en ti allá en el lejano horizonte de sur…
Como esta noche te amo, más que las luces de esos barcos
húmeda niebla de mujer herida por los besos lejanos.
Como esta noche te amo
mi amor está en tus ojos del infinito cielo.
Hoy las serpientes vuelan como los pájaros
inmune y salvaje hembra mía y hembra del otoño raro.
Luces que se encienden, países que no duermen
doncella de lagarto sombrío de pétalos azules.
Como esta noche te amo, y siento tu piel en el cielo las estrellas
y siento como me amas y odias al olvidar el abismo sideral.
Una vez fuiste niña y eso lo recojo en el lejano tren que corre al infierno
donde están tus manos para tocar piedras sagradas.
Como esta noche te amo, y no no te amare nunca más.
Porque el grito de los santos están, porque eres lamina de risa.
Como esta noche no te amo, no te amo porque eres piel, dulzura, hiel
no nací para ser hombre, solo poeta que admira tu rubia cabellera
Tú me señalas, tú eres la maldita, tú eres la hechicera
adiós, y no huyas más que mi cuerpo
para morir, para morir en ti allá en el lejano horizonte de sur…