Histriónico y déspota
Publicado: Mié, 15 May 2019 19:09
Entre su mundo y el mío,
sólo comparaciones impertinentes.
Porque hablar con ustedes en términos metafísicos es lo mismo que intentar entablar conversación con una silla.
No pasa nada.
En realidad nunca ha pasado nada.
No abuso del ego, sino que me adulo.
Sus escasas nociones de lo que yo pongo a su disposición es lo que me mortifica.
Demasiado sentido empleo en mis versos.
Debería hacer autocrítica de lo que ustedes llaman crítica.
Lo digo más que nada porque yo induzco su palabrería barata.
No quiero oportunidades de ningún tipo.
Tampoco contemplaciones.
Me exaspera su falta de cultura.
Me contrista.
Pero no les compadezco, no.
Yo padezco y adolezco de su falta de fe.
Entre su mundo y el mío sólo idealizaciones.
Pero entiendo que no me idolatren.
También comprendo que no crean en el ideal de perfección.
Ahora bien, sean conscientes de sus defectos, lo van a necesitar.
Alguien les ha lavado el cerebro con Dios y todo tipo de aberraciones.
Y ello, por desgracia no tiene solución.
No hay herejes ni creyentes.
Sólo interrogantes y necios.
Necesidades.
Entre su mundo y el mío, otro mundo más:
La distancia abismal entre ustedes y yo.
Entre su mundo y el mío, ¿cuál es el auténtico?
Esto ya no depende de Dios, Él va por libre.
Entre su mundo y el mío, un inciso:
"Sin mis cinco sentidos."
"Mi mundo es el único que existe.
He trascendido lo que he querido, y más.
Nadie me importa más que electrocutarme en la bañera."
sólo comparaciones impertinentes.
Porque hablar con ustedes en términos metafísicos es lo mismo que intentar entablar conversación con una silla.
No pasa nada.
En realidad nunca ha pasado nada.
No abuso del ego, sino que me adulo.
Sus escasas nociones de lo que yo pongo a su disposición es lo que me mortifica.
Demasiado sentido empleo en mis versos.
Debería hacer autocrítica de lo que ustedes llaman crítica.
Lo digo más que nada porque yo induzco su palabrería barata.
No quiero oportunidades de ningún tipo.
Tampoco contemplaciones.
Me exaspera su falta de cultura.
Me contrista.
Pero no les compadezco, no.
Yo padezco y adolezco de su falta de fe.
Entre su mundo y el mío sólo idealizaciones.
Pero entiendo que no me idolatren.
También comprendo que no crean en el ideal de perfección.
Ahora bien, sean conscientes de sus defectos, lo van a necesitar.
Alguien les ha lavado el cerebro con Dios y todo tipo de aberraciones.
Y ello, por desgracia no tiene solución.
No hay herejes ni creyentes.
Sólo interrogantes y necios.
Necesidades.
Entre su mundo y el mío, otro mundo más:
La distancia abismal entre ustedes y yo.
Entre su mundo y el mío, ¿cuál es el auténtico?
Esto ya no depende de Dios, Él va por libre.
Entre su mundo y el mío, un inciso:
"Sin mis cinco sentidos."
"Mi mundo es el único que existe.
He trascendido lo que he querido, y más.
Nadie me importa más que electrocutarme en la bañera."