Editorial Alaire

Buscaba un fuego en el consumirse,
un bisturí de espuma con el que seccionar los abismos
de su desvencijada existencia,
y embarcó en una galera de tinieblas con destino
a su propia sombra menguante.

Creyó ver a la luna hundiéndose en un vaso de whisky.

Cada día, a la hora fatídica,
anudaba las cortinas del silencio
para no despertar a los cuervos
que presagian la ira.

Pero los cuervos emigraron hacia el sur un martes de invierno,
y el reloj siguió golpeando las horas con saetas de plomo.

Buscaba un fuego: un desnortado faro, una brújula ebria,
un bisturí de viento que borrara las heces de sus pasos erráticos.

Creyó ver a las aves picoteando el rostro del miedo
y a los peces oscuros del silencio flotar entre las nubes.

Por un instante vislumbró su casa,
malherida por los rayos del crepúsculo.

Quiso enterrar, al fin, los huesos de su memoria rota
y, embarcado en el humo del último cigarro,
tomo rumbo a la creciente lumbre
de su sombra.

Rosa Marzal escribió:
Quiso enterrar, al fin, los huesos de su memoria rota
y, embarcado en el humo del último cigarro,
tomo rumbo a la creciente lumbre
de su sombra.

Fabuloso poema, Rosa, cada estrofa es un poema pleno de aciertos.
Dejo el final pero volveré para disfrutar cAda detalle de esta obra.
Felicidades y un abrazo.

Muchas gracias por tu generoso comentario, Marisa.

Un fuerte abrazo, compañera.

Cuanto significado en ese retrato del naufragio, se respiran las ruinas en el descalabro de la noche, que va abriéndose para dejar una ventana latiendo con rumbo al desencanto. Siempre esa riqueza y esa elegante pluma que es capaz de atravesar los abismos.
Besos Rosa, un gusto leerte

El recuerdo forma parte de ti y de tu poética poesía, amiga. Te felicito y animo .


Un abrazo

Querida amiga, impresionante poema, casi apocalíptico. Siempre admiro tu poética, el lenguaje cuidadosamente pulido hasta que se convierta en un diamante de múltiples brillos, y las metáforas, que se enredan entre sí como hiedras, un lenguaje culto e innovador, diría que sabes domar símbolos también, todo lo tiene. Mis abrazos y felicitaciones sinceras, Rosa.

Me recordó el poema a la puesta del Sol. Transmite una decadencia inevitable y a la vez hermosa. Gracias por compartirlo.

Un abrazo

La excelencia, querida Rosa, la excelencia te sigue a todas partes. Es una perseguidora que te sabe gemela.

Madre mía, no hay palabras que hagan debida justicia a Pareidolia.

Abrazo de los grandes y felicitaciones sinceras.

Rosa,

me gusta mucho el poema, amiga. Con ese idioma tuyo tan personal, afinado y ambicioso, preciso y bello en los detalles. Creo que tu lirismo es muy moderno, muy auténtico.

Un abrazo.

Muy hermoso poema, Rosa. Muy bien construido (algo absolutamente normal en tu poesía) y con toques de modernidad que, personalmente, considero imprescindibles en la poesía de hoy para mi gusto. Mis felicitaciones, querida amiga. Un gran abrazo.

Rosa Marzal escribió:Buscaba un fuego en el consumirse,
un bisturí de espuma con el que seccionar los abismos
de su desvencijada existencia,
y embarcó en una galera de tinieblas con destino
a su propia sombra menguante.

Creyó ver a la luna hundiéndose en un vaso de whisky.

Cada día, a la hora fatídica,
anudaba las cortinas del silencio
para no despertar a los cuervos
que presagian la ira.

Pero los cuervos emigraron hacia el sur un martes de invierno,
y el reloj siguió golpeando las horas con saetas de plomo.

Buscaba un fuego: un desnortado faro, una brújula ebria,
un bisturí de viento que borrara las heces de sus pasos erráticos.

Creyó ver a las aves picoteando el rostro del miedo
y a los peces oscuros del silencio flotar entre las nubes.

Por un instante vislumbró su casa,
malherida por los rayos del crepúsculo.

Quiso enterrar, al fin, los huesos de su memoria rota
y, embarcado en el humo del último cigarro,
tomo rumbo a la creciente lumbre
de su sombra.

Es un diciente poema. Es bello porque lo pinta los ojos del poeta, pero es doloroso. Es una odisea entre sombras y luces, fogonazos de a realidad. Me ha gustado mucho, Rosa. Te felicito por tu buen hacer. ERA

Bella y sensible profundidad que halla su recorrido de vibrante desahogo...
Un gusto siempre querida amiga...te abrazo con todo mi cariño...
Nancy

Me ha encantado este poema. Enhorabuena, Rosa. Un abrazo.

Muy bello trabajo, amiga Rosa.
Abrazos.

Otro poema en tu línea de gran creación imaginativa.

Todo un placer de lectura, querida amiga.

Un bico desde Viveiro.