Editorial Alaire

Ignacio Mincholed escribió:Esas paredes mutantes y esos bares de los de antes… Felicidades Luis, impecable.

Un fuerte abrazo.
Ignacio

Óscar Distéfano escribió:Felicitaciones por el reconocimiento. El poema es excelente. Me parece la exhumación de una vida intensamente vivida. No pude estar antes por algunos problemas personales. Mis disculpas por ello.

Un abrazo fraterno.
Óscar

Luis M. escribió: ↑Jue, 14 Feb 2019 18:03 `
Ayer marzo y las paredes mutantes
del piso apretaban más de lo normal.
Estaba anocheciendo. Como un zombie
salí a la calle con dirección al fondo
a la derecha de ningún sitio.

A mi paso
las gárgolas entrenaban sus artrosis de memoria
y religiosa urbanidad. Acabé tirando piedras
al río que abraza la ciudad.

Lanzaba piedras afiladas y mudas
como rayos -o lágrimas- perforantes.
Algunas por aquellos que ya no están
pero siguen estando.

Otras por todos mis errores insubsanables,
por la luz que pelea
en inferioridad militar contra el tiempo.
También por la puta dinámica de este mundo
o, de algún modo, para salpicar a Dios;
y otras solo porque sí.

En la otra orilla, alguien lanzaba piedras al mismo río,
(vi piedras más grandes, ásperas
y mudas que las mías)

Nos miramos durante aproximadamente un minuto
parecido a media vida.

Crucé el puente. Le dije
que a veces escribo poemas raros
aptos para microondas.
Ella me contestó que conocía
un bar de los de antes,
(en el aire sonaban los 091)

Y juro que anoche las estrellas incursionaron
por unas horas
en el lado suroeste de la M-30.

... En verdad, era un bar de los de antes.

______________

Hallie Hernández Alfaro escribió: ↑Dom, 13 Jun 2021 15:29

Luis M. escribió: ↑Jue, 14 Feb 2019 18:03 `
Ayer marzo y las paredes mutantes
del piso apretaban más de lo normal.
Estaba anocheciendo. Como un zombie
salí a la calle con dirección al fondo
a la derecha de ningún sitio.

A mi paso
las gárgolas entrenaban sus artrosis de memoria
y religiosa urbanidad. Acabé tirando piedras
al río que abraza la ciudad.

Lanzaba piedras afiladas y mudas
como rayos -o lágrimas- perforantes.
Algunas por aquellos que ya no están
pero siguen estando.

Otras por todos mis errores insubsanables,
por la luz que pelea
en inferioridad militar contra el tiempo.
También por la puta dinámica de este mundo
o, de algún modo, para salpicar a Dios;
y otras solo porque sí.

En la otra orilla, alguien lanzaba piedras al mismo río,
(vi piedras más grandes, ásperas
y mudas que las mías)

Nos miramos durante aproximadamente un minuto
parecido a media vida.

Crucé el puente. Le dije
que a veces escribo poemas raros
aptos para microondas.
Ella me contestó que conocía
un bar de los de antes,
(en el aire sonaban los 091)

Y juro que anoche las estrellas incursionaron
por unas horas
en el lado suroeste de la M-30.

... En verdad, era un bar de los de antes.

______________

Sube este hermoso poema para deleite de todos.

Hoy me ha dado nostalgia de tu Avenida del Manzanares, Luis.


PS: estoy buscando un texto tuyo que publicaste hace tiempo en Prosa. Iba de las maneras de morir. No puedo encontrarlo, quizá tengas alguna copia porque me temo que puede haberse extraviado cuando ocurrió el problema técnico con la antigua página.
Ya me dirás.

Jorge Salvador escribió: ↑Mar, 15 Jun 2021 14:28 Sin duda, bajo mi punto de vista, este es uno de tus mejores poemas, Luis. Y mira que tienes muchos muy buenos, pero este tiene un punto especial. Debe ser por ese sabor de los bares de antes. Ha sido un placer volver a leerlo. Gracias a Hallie por sacarlo a flote

Pilar Morte escribió: ↑Mar, 15 Jun 2021 21:58 Me alegra el rescate ya que no tuve la oportunidad de leerlo. Me gustó mucho
Y disfruté del encuentro y del bar de siempre. Felicidades.
Abrazos

Ana García escribió: ↑Mié, 16 Jun 2021 18:48 Que nostalgia me invade con este poema que he vuelto a leer debido a ese acertado rescate. Me gustó mucho en su día y no entiendo el porqué no lo comenté.
Es de esos poemas que abrigan el alma a pesar de la nostalgia. Me recuerda mucho al tema de los Celtas Cortos: 20 de abril. Un recuerdo a los que están sin estar.
Un fuerte abrazo con los ojos vidriosos.

Luis M. escribió: ↑Jue, 14 Feb 2019 18:03 `
Ayer, marzo y las paredes mutantes
del piso apretaban más de lo normal.
Estaba anocheciendo. Como un zombie
salí a la calle con dirección al fondo
a la derecha de ningún sitio.

A mi paso
las gárgolas entrenaban sus artrosis de memoria
y religiosa urbanidad. Acabé tirando piedras
al río que abraza la ciudad.

Lanzaba piedras afiladas y mudas
como rayos -o lágrimas- perforantes.
Algunas por aquellos que ya no están
pero siguen estando.

Otras por todos mis errores insubsanables,
por la luz que pelea
en inferioridad militar contra el tiempo.
También por la puta dinámica de este mundo
o, de algún modo, para salpicar a Dios;
y otras solo porque sí.

En la otra orilla, alguien lanzaba piedras al mismo río,
(vi piedras más grandes, ásperas
y mudas que las mías)

Nos miramos durante aproximadamente un minuto
parecido a media vida.

Crucé el puente. Le dije
que a veces escribo poemas raros
aptos para microondas.
Ella me contestó que conocía
un bar de los de antes,
(en el aire sonaban los 091)

Y juro que anoche las estrellas incursionaron
por unas horas
en el lado suroeste de la M-30.

... En verdad, era un bar de los de antes.

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xaime oroza carballo escribió: ↑Jue, 17 Jun 2021 0:39
Honda hermosura. ¿Qué más quieres que te diga?. Para mi un gran hallazgo: Gracias!
Un abrazo, amigo Luis.