Editorial Alaire

Si me da por arrancar la luna
y pervertirla en un bar de carreteras,
¿que coño vais a mirar los enamorados?
Yo le recitaré guarradas al oido mientras la jodo
y los poetas románticos a contar estrellas.
Actrices secundarias del firmamento.

Y si secuestro todas las rosas de los parques
y las ahorco del balcón de mi casa,
¿a que os olerá el amor?

Lo mismo rompo las farolas
que guián los besos paso a paso,
para que tropiecen las caricias,
para desorientar los abrazos,
para eclipsar el deseo
y confundir vuestro roce.

O cojo al sol de los cojones
y le inverno el orgullo y la autoestima,
le pinto una nube en cada ojo
y trastoco su sonrisa amarillenta
por un negro que le duela a la mirada,
haber si también vale el cuerpo a cuerpo
cuando el corazón se os llene de humedades.

Quizás invente hoy un mar de vodka
y me tire de cabeza desde el filo
de la copa del amor que se rompió
y me olvido de los amores ajenos
y me encargo en exclusiva del mío propio,
que este jugar a Dios solo me sirve
de orgasmo y desahogo literario.

Parece que estás enfadado con el romanticismo, Ernesto, debe ser bueno tener la luna en exclusiva para ti y mandar a todo el mundo a...contar estrellas, jeje.
Me ha gustado especialmente la idea de la segunda estrofa, otra punzada a la forma clásica de entender el romanticismo y seguramente tan alejada de la realidad del amor y sobre todo de sus olores...
Un placer leerte.
Abrazos

Sara

Ya te lo había dicho antes, me parece, Ernesto... me gusta tu estilo Bukowskiano (si es que así se dice)...

Este poema me encantó, como algunos otros que te he leído...

Es un placer.

Un abrazo.

Gio.

Me place la fuerza de la obra.

A veces la indignación mueve aspas o badajos tremendos y le sacude la peluca a la señorona poesía para que no se aburguese.

Esto de arrancar la luna y llevarla a un bar me parece inaugural, lo mismo que el secuestro y ahorcamiento de las rosas del parque ( la última imágen tal vez las más visceral y redonda del poema ), el mar de vodka, la batalla contra las farolas, o la toma del sol por los cojones.

El enojo es sano. La obra sucede como un golpe. ¿Hay que hacer concesiones gestuales o litúrgicas cuando se da una patada? ¿Y si pegas sin ninguna molécula de culpa o del supuesto buen tino civil?

Me ha gustado.


Un saludo amable desde Argentina


Rafael

Ernesto perez,

Se siente calidad en tus versos, compañero

me encantó tu poema


te felicito

Un abrazo fuerte

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Me ha encantado, Ernesto. También me gusta esta forma de expresar.
Quizá una visión más real de lo que pueda ser el amor, con menos estrellas, menos rosas, menos farolas....y más vodka, o whisky, o....

Felicitaciones.

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