Editorial Alaire

Guillermo Cumar escribió:Como si renacer fácil me fuera,
renazco cada día. Voy pendiente
de la regenerada y transparente
silueta que me ampara. Si tuviera

el ánimo de ayer, me mantuviera
firme desde los pies hasta la frente.
No quiero yo de mí estar ausente
ni figurar marchoso tan siquiera.

Quisiera mantenerme como digo
para salvar mi honra. Soy tan raro
que voy de ladrador como un mal perro,
pues si conmigo voy no me fustigo.
Que quien de mí se fíe tenga claro
que quiero ser badajo, no el cencerro

Yo sé que en esto yerro,
pues parezco tan dócil y sensato
que estoy en el umbral de ser pazguato.

Alonso Vicent escribió:

Guillermo Cumar escribió:Como si renacer fácil me fuera,
renazco cada día. Voy pendiente
de la regenerada y transparente
silueta que me ampara. Si tuviera

el ánimo de ayer, me mantuviera
firme desde los pies hasta la frente.
No quiero yo de mí estar ausente
ni figurar marchoso tan siquiera.

Quisiera mantenerme como digo
para salvar mi honra. Soy tan raro
que voy de ladrador como un mal perro,
pues si conmigo voy no me fustigo.
Que quien de mí se fíe tenga claro
que quiero ser badajo, no el cencerro

Yo sé que en esto yerro,
pues parezco tan dócil y sensato
que estoy en el umbral de ser pazguato.

Me gustan esos encabalgamientos que enlazan la idea para completar este estupendo soneto con estrambote.
Qué bueno tener el poder de renacer, con el ánimo de ayer o el de hoy, pero presente.
Nada de autofustigarse; eso sí que sería un yerro.
Un abrazote con reverencia Maese Guillermo.

Marius Gabureanu escribió:Me ha encantado, Guillermo, estupendo poema, tu silueta se mantiene firme y encuentra respuestas vitales a la existencia. Mis abrazos sinceros, estimado amigo.

Pilar Morte escribió:Me ha gustado el poema. Está escrito con ingenio. Un placer leerte.
Besos
Pilar

Guillermo Cumar escribió:Como si renacer fácil me fuera,
renazco cada día. Voy pendiente
de la regenerada y transparente
silueta que me ampara. Si tuviera

el ánimo de ayer, me mantuviera
firme desde los pies hasta la frente.
No quiero yo de mí estar ausente
ni figurar marchoso tan siquiera.

Quisiera mantenerme como digo
para salvar mi honra. Soy tan raro
que voy de ladrador como un mal perro,
pues si conmigo voy no me fustigo.
Que quien de mí se fíe tenga claro
que quiero ser badajo, no el cencerro

Yo sé que en esto yerro,
pues parezco tan dócil y sensato
que estoy en el umbral de ser pazguato.

E. R. Aristy escribió:

Guillermo Cumar escribió:Como si renacer fácil me fuera,
renazco cada día. Voy pendiente
de la regenerada y transparente
silueta que me ampara. Si tuviera

el ánimo de ayer, me mantuviera
firme desde los pies hasta la frente.
No quiero yo de mí estar ausente
ni figurar marchoso tan siquiera.

Quisiera mantenerme como digo
para salvar mi honra. Soy tan raro
que voy de ladrador como un mal perro,
pues si conmigo voy no me fustigo.
Que quien de mí se fíe tenga claro
que quiero ser badajo, no el cencerro.

Yo sé que en esto yerro,
pues parezco tan dócil y sensato
que estoy en el umbral de ser pazguato.

Muy bello, poeta! Me gusta el balance que consigues, la dignidad que resplandece en su centro. Abrazos, Guillermo. ERA