Dio(s)do(s) [Otro plano]
Publicado: Mar, 01 Ene 2019 13:08
Dio(s)do(s) V
¿Por qué Dios se inmiscuye en asuntos humanos?
¿Por qué el hombre lo hace en asuntos divinos?
Son éstos tiempos duros para los asesinos.
Imposible es el trato entre iguales, hermanos.
Dos formas de morir, solamente dos sinos,
y ya pronto veremos qué se traen entre manos.
Son creyentes y ateos, ¿o sólo son gusanos?
¿Llevo a Dios en el pecho o entre los intestinos?
Qué duda existencial. Tamaño atrevimiento.
Me habitan tantos yos como humanos la Tierra.
Haya paz entre ellos, o iremos a la guerra.
“No juego en ningún bando, el hombre al hombre entierra,
mis letras han dejado de lado el Testamento
que a todos nos separa, que me cuelguen si miento.
Ha llegado el momento,
es hora de limpiar todas sus porquerías.
Y de matar a Dios solo con teorías”.
Dio(s)do(s) VI
Quién maneja los hilos, quién manda en mi escritura,
quiero saber si todo está predestinado,
de qué forma me atrapa, me anula -¿será el hado?-
Desafío a los hombres, a Dios, y a mi locura.
Me embriaga y me embelesa todo lo que he pensado,
si quisiera destruirme o darme sepultura,
¿qué rumbo tomaría? ¿Es esto una diablura?
¿Quién controla mi mente, quién está equivocado?
Si no hay nada ahí arriba, o aquí al lado,
¿Qué retorcida fuerza me invade y me censura?
¿Creo en Dios como otro, o como un yo ilustrado?
Todo esto me pregunto, antes de mi ruptura
con la realidad, lo que Dios me ha negado.
“Toda realidad ante Mí es oscura”.
A la crítica dura,
mi propio pensamiento, lúcido y asolado:
“Si soy Dios es por algo: Me han malinterpretado”.
Dio(s)do(s)VII
Dios no es ningún showman, tampoco un celibato,
Dios se oculta en mis letras, se embosca, se agazapa.
Le aclaman o difaman, pero se les escapa.
-Me afano en encontrar la horma de mi zapato.
En llegar a un acuerdo, poder cerrar un trato,
¿Es pensar demasiado? ¿Mis sesos tienen tapa?
Si su realidad a la mía solapa,
¿Debo tergiversarla? ¿Pasar otro mal rato?
¿Son autodestructivas, mis letras, o deicidas?
Tengo la sensación de pelear conmigo.
Una lucha sin tregua, con caras conocidas.
¿Mi intelecto es mi aliado? ¿O tal vez mi enemigo?
¿Qué busco cuando escribo ideas homicidas?
¿Es Dios una teoría, o mirarme al ombligo?
No sé lo que persigo.
Mataría por un concepto radical.
Borro a Dios de un soplido, por un mundo ideal.-.
Dio(s)do(s) VIII
Ya estoy en la cima de mis letras, la nada
era otro mito unido a dios. Soy diferente.
Vacié mi cabeza de pájaros. Mi mente
está en plena forma, la forma deseada.
Es a partir de aquí donde ya no disiente,
ni engaña, ni se engaña. Solamente se apiada.
Porque negando a Dios, lo llevo en la mirada.
Habiéndolo sufrido, me es indiferente.
Se forjaron de mí una idea obsoleta,
aquí ya no hay rival, tampoco contrincante.
¿Qué podrían hacer ante este poeta?
Siempre estoy por encima, siempre voy por delante.
Soy divina entelequia, arte que se completa,
infinitud de ideas que sientan como un guante.
Sentir reconfortante.
Como arrojar monedas en un pozo vacío,
mi plano es intangible y sabe a escalofrío.
¿Por qué Dios se inmiscuye en asuntos humanos?
¿Por qué el hombre lo hace en asuntos divinos?
Son éstos tiempos duros para los asesinos.
Imposible es el trato entre iguales, hermanos.
Dos formas de morir, solamente dos sinos,
y ya pronto veremos qué se traen entre manos.
Son creyentes y ateos, ¿o sólo son gusanos?
¿Llevo a Dios en el pecho o entre los intestinos?
Qué duda existencial. Tamaño atrevimiento.
Me habitan tantos yos como humanos la Tierra.
Haya paz entre ellos, o iremos a la guerra.
“No juego en ningún bando, el hombre al hombre entierra,
mis letras han dejado de lado el Testamento
que a todos nos separa, que me cuelguen si miento.
Ha llegado el momento,
es hora de limpiar todas sus porquerías.
Y de matar a Dios solo con teorías”.
Dio(s)do(s) VI
Quién maneja los hilos, quién manda en mi escritura,
quiero saber si todo está predestinado,
de qué forma me atrapa, me anula -¿será el hado?-
Desafío a los hombres, a Dios, y a mi locura.
Me embriaga y me embelesa todo lo que he pensado,
si quisiera destruirme o darme sepultura,
¿qué rumbo tomaría? ¿Es esto una diablura?
¿Quién controla mi mente, quién está equivocado?
Si no hay nada ahí arriba, o aquí al lado,
¿Qué retorcida fuerza me invade y me censura?
¿Creo en Dios como otro, o como un yo ilustrado?
Todo esto me pregunto, antes de mi ruptura
con la realidad, lo que Dios me ha negado.
“Toda realidad ante Mí es oscura”.
A la crítica dura,
mi propio pensamiento, lúcido y asolado:
“Si soy Dios es por algo: Me han malinterpretado”.
Dio(s)do(s)VII
Dios no es ningún showman, tampoco un celibato,
Dios se oculta en mis letras, se embosca, se agazapa.
Le aclaman o difaman, pero se les escapa.
-Me afano en encontrar la horma de mi zapato.
En llegar a un acuerdo, poder cerrar un trato,
¿Es pensar demasiado? ¿Mis sesos tienen tapa?
Si su realidad a la mía solapa,
¿Debo tergiversarla? ¿Pasar otro mal rato?
¿Son autodestructivas, mis letras, o deicidas?
Tengo la sensación de pelear conmigo.
Una lucha sin tregua, con caras conocidas.
¿Mi intelecto es mi aliado? ¿O tal vez mi enemigo?
¿Qué busco cuando escribo ideas homicidas?
¿Es Dios una teoría, o mirarme al ombligo?
No sé lo que persigo.
Mataría por un concepto radical.
Borro a Dios de un soplido, por un mundo ideal.-.
Dio(s)do(s) VIII
Ya estoy en la cima de mis letras, la nada
era otro mito unido a dios. Soy diferente.
Vacié mi cabeza de pájaros. Mi mente
está en plena forma, la forma deseada.
Es a partir de aquí donde ya no disiente,
ni engaña, ni se engaña. Solamente se apiada.
Porque negando a Dios, lo llevo en la mirada.
Habiéndolo sufrido, me es indiferente.
Se forjaron de mí una idea obsoleta,
aquí ya no hay rival, tampoco contrincante.
¿Qué podrían hacer ante este poeta?
Siempre estoy por encima, siempre voy por delante.
Soy divina entelequia, arte que se completa,
infinitud de ideas que sientan como un guante.
Sentir reconfortante.
Como arrojar monedas en un pozo vacío,
mi plano es intangible y sabe a escalofrío.