A ustedes
Publicado: Vie, 23 Nov 2018 1:17
A ustedes,
que se han quitado la piel, jirón a jirón,
y contemplan sus propios dolores
exponerse e inmortalizarse, sin poder evitarlo.
Viajeros, muchas veces sin nombre,
que llevan el corazón por fuera
y no pueden impedir que se los destrocen.
Porque no siempre el amor es noble,
porque la verdadera belleza es escurridiza
y la noche no puede ocultar todas las penas.
Una sensibilidad amplificada o maldita,
con un nervio siempre expuesto
inclusive a la fiebre repentina del viento,
al desconsuelo callado de la flor,
al lamento imperceptible de la lluvia.
A ustedes, que padecen la necesidad de sentir,
de amarlo todo.
Encontrando en la tristeza una oportunidad,
en el sabor amargo de un adiós, un motivo.
A cada caricia un paisaje por retratar
y en cada desamor la necesidad incontrolable
de volver a intentarlo, una y otra vez.
Amarguras que justificarán su razón
tras la sentencia de unas letras certeras
que rectificarán cada beso despiadado.
A ustedes,
que desnudan el mundo,
desmenuzando con delicadeza
el lenguaje de la piel.
Traduciendo con paciencia
el significado oculto de una caricia
y el gemido nativo del deseo.
Dejando un testimonio
del recorrido que hace el amor
antes de destruirlo todo.
Forjadores de una fotografía escrita
que retrata las bellezas enmascaradas,
que inmortaliza las penas con sonrisas.
A los poetas,
que han dejado la piel y el alma
con sus respectivos acentos y comas,
que nos han entregado sin recelo
la carga de sus sentires más profundos.
Para ustedes.
que se han quitado la piel, jirón a jirón,
y contemplan sus propios dolores
exponerse e inmortalizarse, sin poder evitarlo.
Viajeros, muchas veces sin nombre,
que llevan el corazón por fuera
y no pueden impedir que se los destrocen.
Porque no siempre el amor es noble,
porque la verdadera belleza es escurridiza
y la noche no puede ocultar todas las penas.
Una sensibilidad amplificada o maldita,
con un nervio siempre expuesto
inclusive a la fiebre repentina del viento,
al desconsuelo callado de la flor,
al lamento imperceptible de la lluvia.
A ustedes, que padecen la necesidad de sentir,
de amarlo todo.
Encontrando en la tristeza una oportunidad,
en el sabor amargo de un adiós, un motivo.
A cada caricia un paisaje por retratar
y en cada desamor la necesidad incontrolable
de volver a intentarlo, una y otra vez.
Amarguras que justificarán su razón
tras la sentencia de unas letras certeras
que rectificarán cada beso despiadado.
A ustedes,
que desnudan el mundo,
desmenuzando con delicadeza
el lenguaje de la piel.
Traduciendo con paciencia
el significado oculto de una caricia
y el gemido nativo del deseo.
Dejando un testimonio
del recorrido que hace el amor
antes de destruirlo todo.
Forjadores de una fotografía escrita
que retrata las bellezas enmascaradas,
que inmortaliza las penas con sonrisas.
A los poetas,
que han dejado la piel y el alma
con sus respectivos acentos y comas,
que nos han entregado sin recelo
la carga de sus sentires más profundos.
Para ustedes.