Editorial Alaire

De pequeña
te gustaba imitar a mamá
de pie
sobre sus zapatos de tacón
y la sonrisa embadurnada
por el carmín de su pintalabios.

Disfrutabas
haciendo girar el hula hoop
sobre tu cintura
para recibir el aplauso y el cariño
de los tuyos
en el escenario improvisado
de nuestros corazones.

A veces,
le prestabas tu alma a tus peluches
y transformabas la vida real
en guiones con un final feliz
con ellos como protagonistas.

A menudo,
corrías por la casa tratando de huir
de monstruos imaginarios,
nosotros, tus hermanos,
que entre sonrisas,
pretendíamos atraparte
para obligarte a confesar
alguna mentira inocente
o robarte un te quiero
mucho, mucho, mucho...

Han pasado los años,
y aún sigues conservando
esa forma tan especial que tienes
de decir lo que sientes con la mirada
o ese brillo en los ojos
que alumbró mi infancia.

Miguel Ángel Martínez Góm escribió:De pequeña
te gustaba imitar a mamá
de pie
sobre sus zapatos de tacón
y la sonrisa embadurnada
por el carmín de su pintalabios.

Disfrutabas
haciendo girar el hula hoop
sobre tu cintura
para recibir el aplauso y el cariño
de los tuyos
en el escenario improvisado
de nuestros corazones.

A veces,
le prestabas tu alma a tus peluches
y transformabas la vida real
en guiones con un final feliz
con ellos como protagonistas.

A menudo,
corrías por la casa tratando de huir
de monstruos imaginarios,
nosotros, tus hermanos,
que entre sonrisas,
pretendíamos atraparte
para obligarte a confesar
alguna mentira inocente
o robarte un te quiero
mucho, mucho, mucho...

Han pasado los años,
y aún sigues conservando
esa forma tan especial que tienes
de decir lo que sientes con la mirada
o ese brillo en los ojos
que alumbró mi infancia.

Enternece el poema, llega y transmite. Un gusto saludos

Muy hermoso y emotivo poema, resulta realmente entrañable.
Enhorabuena.

Un abrazo.

Me ha gustado mucho leer estos versos a tu hermana, los he disfrutado
Un abrazo
Carmen

Entrañable poema. Qué contenta estará tu hermana de que la mires así. Me gustó leerte.
Besos
Pilar

[quote="Miguel Ángel Martínez Góm"]

Precioso poema Miguel Ángel, tierno, evocador y lleno de cariño.
Felicidades y un abrazo.

Miguel Ángel Martínez Góm escribió:De pequeña
te gustaba imitar a mamá
de pie
sobre sus zapatos de tacón
y la sonrisa embadurnada
por el carmín de su pintalabios.

Disfrutabas
haciendo girar el hula hoop
sobre tu cintura
para recibir el aplauso y el cariño
de los tuyos
en el escenario improvisado
de nuestros corazones.

A veces,
le prestabas tu alma a tus peluches
y transformabas la vida real
en guiones con un final feliz
con ellos como protagonistas.

A menudo,
corrías por la casa tratando de huir
de monstruos imaginarios,
nosotros, tus hermanos,
que entre sonrisas,
pretendíamos atraparte
para obligarte a confesar
alguna mentira inocente
o robarte un te quiero
mucho, mucho, mucho...

Han pasado los años,
y aún sigues conservando
esa forma tan especial que tienes
de decir lo que sientes con la mirada
o ese brillo en los ojos
que alumbró mi infancia.

Maravilloso poema Miguel Ángel. Llenó de añoranzas, tu poema celebra la eternidad del amor fraternal, todo cuanto atesora el virgen corazón. ERA

Muchas gracias por la amable visita y comentario, Joan.
Un abrazo.

Gracias por la amable visita y comentario, Ramón.
Un abrazo.

Gracias por la amable visita y comentario, Carmen.
Un abrazo.

Gracias por la amable visita y comentario, Pilar.
La verdad es que tengo mucha suerte de tener una hermana como la que tengo.
Un abrazo.

Gracias por la amble visita y comentario, Marisa.
Un abrazo.

Gracias por la amable visita y comentario, Era.
Hay recuerdos que se mantienen con toda su pureza vivida.
Un abrazo.

Hermoso trabajo, amigo Miguel Ángel.
Abrazos.

A tu hermana le encantará conocer estos versos y los entrañables recuerdos que anidan. A mí me ha producido nostalgia de la infancia y la vida de los hermanos. Enhorabuena. Salud.