Editorial Alaire

En el asombro del ocaso, mientras el trigo mece
los campos de ocres rojizos, en las manos del labrador
la tierra se escapa entre los dedos y los pasos se quedan
en bocetos, en gestos alzados de buches hinchados para picar
como migas de pan, los instantes sublimes del tiempo caído.

Suena la soledad, la de negra capa y rostro blanco,
la que asusta a las copas de los cipreses y suena pulsada
por las manos del pianista en precioso pero frío marfil blanco:
redonda nota de pieles rosadas en su acorde de estremecimiento
o ligero temblor de las amapolas al paso de los carros.

Bucle de amor; por allá, al norte de los sauces, subiendo el río
se va al lugar donde dicen que, al sur de los sauces, bajando el río
se llega a esta misma sonrisa de las brisas entre tus labios.

Bucle de amor; no me abandones junto a las ondas de la orilla
donde se ven los peces desconcertados
cruzarse, con prisa, entre el fango.

En el asombro del ocaso la he sentido
en los huesos encallados, como punzada de clavo y luna.
Cierro los ojos, no miro la llanura sembrada de azules y malvas,
un grupo de niños juegan con un perro -reflejo bermellón-,
y escucho a la lumbre de tus ojos el martilleo del piano en mi pensamiento.

Juan Delgado Martín-Prat

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Maravillosa sinfonía y extraordinario poema, suave, delicado , con metáforas exquisitas
que me ha gustado muchísimo, te felicito Juan
Un abrazo
Carmen

Un poema hermoso, finísimo en detalles, con unas imágenes extraordinarias.
El vídeo suma y suma a tan lograda obra.

De pie para los aplausos, querido amigo; mis felicitaciones sinceras con un abrazo.

Carnmen y Hallie, muchas gracias por vuestras palabras. Para escribir un poema necesito escuchar una música que me inspire y en este ha sido esta pavana de Faure.

Intenso e interesante poema nos dejas Juan. Me gustó y disfruté leyendo

saludos

rafael

Precioso poema para releer sus delicadas imágenes. Me gustó mucho.
Besos
Pilar

Un poema muy bello. La imágenes son precisas y evocadoras. Un abrazo.

Rafael, Pilar y Ramón, muy agradecido. Me alegro que sea de vuestro agrado el poema. Un abrazo.

Muy hermoso poema, repleto de certeras e impactantes imágenes. Un placer de lectura.
Mi aplauso por tan inspiradas letras.

Un abrazo.

Muchas gracias Ramón. Cuando brotan las palabras, una alegría; cuando gustan las palabras, mil alegrías.
Un abrazo.

Intensa la melancolía que desprenden tus versos amigo... emocionante...
Un gusto leerte...te abrazo con todo mi cariño...
Nancy

Lunamar Solano escribió:Intensa la melancolía que desprenden tus versos amigo... emocionante...
Un gusto leerte...te abrazo con todo mi cariño...
Nancy

Gracias, Nancy. Me doy cuenta cuando un poema ha cobrado vida como ser autónomo, ya separado de las intenciones de mi pensamiento, cuando me emociono al volver a su lectura. Ahora me ha vuelto a suceder, aunque , es verdad, la música ayuda.
Un abrazo.

juan delgado escribió:En el asombro del ocaso, mientras el trigo mece
los campos de ocres rojizos, en las manos del labrador
la tierra se escapa entre los dedos y los pasos se quedan
en bocetos, en gestos alzados de buches hinchados para picar
como migas de pan, los instantes sublimes del tiempo caído.

Suena la soledad, la de negra capa y rostro blanco,
la que asusta a las copas de los cipreses y suena pulsada
por las manos del pianista en precioso pero frío marfil blanco:
redonda nota de pieles rosadas en su acorde de estremecimiento
o ligero temblor de las amapolas al paso de los carros.

Bucle de amor; por allá, al norte de los sauces, subiendo el río
se va al lugar donde dicen que, al sur de los sauces, bajando el río
se llega a esta misma sonrisa de las brisas entre tus labios.

Bucle de amor; no me abandones junto a las ondas de la orilla
donde se ven los peces desconcertados
cruzarse, con prisa, entre el fango.

En el asombro del ocaso la he sentido
en los huesos encallados, como punzada de clavo y luna.
Cierro los ojos, no miro la llanura sembrada de azules y malvas,
un grupo de niños juegan con un perro -reflejo bermellón-,
y escucho a la lumbre de tus ojos el martilleo del piano en mi pensamiento.

Juan Delgado Martín-Prat

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Un poema evocador, sublime. Se levanta en notas que también conocen el sizeo entre la hierba. Exquisito lenguaje, francamente, yo también siento el asombro de tu Poesía. Te felicito, Juan.
ERA

E. R. Aristy escribió: Un poema evocador, sublime. Se levanta en notas que también conocen el sizeo entre la hierba. Exquisito lenguaje, francamente, yo también siento el asombro de tu Poesía. Te felicito, Juan.
ERA

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Muchísimas gracias.

Muy bello trabajo, amigo Juan, escrito con una gran pulcritud.
Abrazos.