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Nada
Publicado: Mié, 19 Sep 2018 16:50
por jose manuel saiz
NADA
Es tan intrascendente este momento,
tan vano, insustancial, tan anodino,
que logra, por sí solo, estremecerme.
Estoy sentado en una piedra,
en el campo,
bajo un árbol,
y nada ocurre.
El día es gris
y desabrido.
Sin pájaros, sin nubes; ni una estela
de avión que me entretenga.
No hace calor ni frío.
No sopla el viento.
No tengo hambre.
No tengo sed.
Ninguna somnolencia elemental
que me atenace.
Mansedumbre, quietud…
Apenas eso.
Todo transcurre en una calma
liviana como un hilo.
No se oyen aves en el cielo
ni zumbidos,
ni un simple canto estridulado
de cigarra.
No hay nada, nadie.
Ningún sonido es más crucial
que mis latidos.
No hay insectos, no hay vida.
No hay rastro de huellas de animales.
Tan solo están el árbol,
la piedra y la raíz donde me siento;
y donde pasa el tiempo
ligero como el aire.
No pienso en nada, y nada,
tampoco, me perturba.
No añoro, no deseo,
no quiero nada.
A nadie evoco, a nadie espero.
No necesito nada.
El mundo gira en ese fuero.
Pero es tan grande este momento.
Tan denso es el vacío
que me invade.
Es tan fútil, tan huero
y tan extraño…
Del todo tan trivial y tan inane
(me cuesta tanto
librarme de mi mismo),
que, en esa nada,
descanso, al fin, al encontrarme.
--oOo--
Re: Nada
Publicado: Mié, 19 Sep 2018 17:04
por Mirta Elena Tessio
jose manuel saiz escribió:NADA
Es tan intrascendente este momento,
tan vano, insustancial, tan anodino,
tan árido,
que logra, por sí solo, estremecerme.
Estoy sentado en una piedra,
en el campo,
bajo un árbol.
Y nada ocurre.
El día es claro y placentero.
Sin pájaros ni nubes; ni una estela
de avión que me entretenga.
No hace calor ni frío.
No sopla el viento.
No tengo hambre.
No tengo sed.
Ni un sueño elemental
que me atenace.
Mansedumbre, quietud…
Apenas eso.
Todo transcurre en una calma
liviana como un hilo.
No se oyen aves en el cielo,
ni un zumbido,
ni el canto estridular de una cigarra.
No hay nada, nadie.
Ningún sonido es más crucial
que mis latidos.
No hay insectos, no hay vida.
No hay rastros de animales.
Tan solo están el árbol y la piedra
que no veo.
Donde me apoyo,
donde me siento.
Por donde pasa un tiempo
ligero como el aire.
No pienso en nada y nada
me perturba.
No añoro, no deseo,
no quiero nada.
A nadie evoco, a nadie espero.
No necesito
hacer
ya nada.
El mundo gira en ese fuero.
Pero es tan grande este momento.
Tan denso es el vacío
que me invade.
Es tan fútil, tan huero
y tan extraño…
Del todo tan trivial y tan inane
(me cuesta tanto
librarme de su influjo),
que en esa nada
me asombro al encontrarme.
--oOo--
Superar la densidad de la nada que de pronto es intrascendente y luego es tan grande.
El encontrarte es conocerte en los reversos de la vida, y aceptar lo que eres, como eres ya es un milagro.
Me ha gustado cómo defines ese estado indefinido en el desarrollo para luego decir con asombro que te encuentras.
Transitamos en donde quiera que estemos esa densidad de la realidad hasta superar nuestros estado de conciencia, es lo que
siento Juan Manuel, gracias por compartir tu Nada, que en definitiva es el todo, según lo queramos mirar. Un abrazo.-
Re: Nada
Publicado: Mié, 19 Sep 2018 20:17
por E. R. Aristy
jose manuel saiz escribió:NADA
Es tan intrascendente este momento,
tan vano, insustancial, tan anodino,
tan árido,
que logra, por sí solo, estremecerme.
Estoy sentado en una piedra,
en el campo,
bajo un árbol.
Y nada ocurre.
El día es claro y placentero.
Sin pájaros ni nubes; ni una estela
de avión que me entretenga.
No hace calor ni frío.
No sopla el viento.
No tengo hambre.
No tengo sed.
Ni un sueño elemental
que me atenace.
Mansedumbre, quietud…
Apenas eso.
Todo transcurre en una calma
liviana como un hilo.
No se oyen aves en el cielo,
ni un zumbido,
ni el canto estridular de una cigarra.
No hay nada, nadie.
Ningún sonido es más crucial
que mis latidos.
No hay insectos, no hay vida.
No hay rastros de animales.
Tan solo están el árbol y la piedra
que no veo.
Donde me apoyo,
donde me siento.
Por donde pasa un tiempo
ligero como el aire.
No pienso en nada y nada
me perturba.
No añoro, no deseo,
no quiero nada.
A nadie evoco, a nadie espero.
No necesito
hacer
ya nada.
El mundo gira en ese fuero.
Pero es tan grande este momento.
Tan denso es el vacío
que me invade.
Es tan fútil, tan huero
y tan extraño…
Del todo tan trivial y tan inane
(me cuesta tanto
librarme de su influjo),
que en esa nada
me asombro al encontrarme.
--oOo--
Logras desaparecer y aparecer, eso no es fácil. Logras, en la meditación, hablar de cosas imposibles. Un poema con presencia y esencia. ERA
Re: Nada
Publicado: Mié, 19 Sep 2018 20:20
por Salud Arenas
Sentir en la nada, es descubrir tu esencia. Felicidades
Salud
Re: Nada
Publicado: Mié, 19 Sep 2018 20:35
por Marimar González
A veces me sucede y me pregunto si esa nada abisal que nos abraza no es el todo que ha girado sobre sí mismo en un eclupse universal.
Profundo y sugerente, proclive a la meditación.
Saludos, José
Re: Nada
Publicado: Jue, 20 Sep 2018 9:10
por Lunamar Solano
Bello instante querido amigo... nítido y vibrante entre tus versos...
Gracias por compartirlo...te abrazo con todo mi cariño...
Nancy
Re: Nada
Publicado: Jue, 20 Sep 2018 11:35
por Marisa Peral
jose manuel saiz escribió:
NADA
Pero es tan grande este momento.
Tan denso es el vacío
que me invade.
Es tan fútil, tan huero
y tan extraño…
Del todo tan trivial y tan inane
(me cuesta tanto
librarme de su influjo),
que en esa nada
me asombro al encontrarme.
--oOo--
Lo que es asombroso es cómo lo explicas y me parece imposible conseguir abstraerse hasta ese punto de no existir.
Siempre me gustan tus letras José Manuel, un gusto leerte y descubrir el asombro.
Un abrazo fuerte.
Re: Nada
Publicado: Jue, 20 Sep 2018 17:56
por jose manuel saiz
Mirta Elena Tessio escribió:jose manuel saiz escribió:NADA
Es tan intrascendente este momento,
tan vano, insustancial, tan anodino,
tan árido,
que logra, por sí solo, estremecerme.
Estoy sentado en una piedra,
en el campo,
bajo un árbol.
Y nada ocurre.
El día es claro y placentero.
Sin pájaros ni nubes; ni una estela
de avión que me entretenga.
No hace calor ni frío.
No sopla el viento.
No tengo hambre.
No tengo sed.
Ni un sueño elemental
que me atenace.
Mansedumbre, quietud…
Apenas eso.
Todo transcurre en una calma
liviana como un hilo.
No se oyen aves en el cielo,
ni un zumbido,
ni el canto estridular de una cigarra.
No hay nada, nadie.
Ningún sonido es más crucial
que mis latidos.
No hay insectos, no hay vida.
No hay rastros de animales.
Tan solo están el árbol y la piedra
que no veo.
Donde me apoyo,
donde me siento.
Por donde pasa un tiempo
ligero como el aire.
No pienso en nada y nada
me perturba.
No añoro, no deseo,
no quiero nada.
A nadie evoco, a nadie espero.
No necesito
hacer
ya nada.
El mundo gira en ese fuero.
Pero es tan grande este momento.
Tan denso es el vacío
que me invade.
Es tan fútil, tan huero
y tan extraño…
Del todo tan trivial y tan inane
(me cuesta tanto
librarme de su influjo),
que en esa nada
me asombro al encontrarme.
--oOo--
Superar la densidad de la nada que de pronto es intrascendente y luego es tan grande.
El encontrarte es conocerte en los reversos de la vida, y aceptar lo que eres, como eres ya es un milagro.
Me ha gustado cómo defines ese estado indefinido en el desarrollo para luego decir con asombro que te encuentras.
Transitamos en donde quiera que estemos esa densidad de la realidad hasta superar nuestros estado de conciencia, es lo que
siento Juan Manuel, gracias por compartir tu Nada, que en definitiva es el todo, según lo queramos mirar. Un abrazo.-
Muchas gracias Mirta por tu comentario.
Abrazos
J. manuel
Re: Nada
Publicado: Jue, 20 Sep 2018 17:57
por jose manuel saiz
E. R. Aristy escribió:jose manuel saiz escribió:NADA
Es tan intrascendente este momento,
tan vano, insustancial, tan anodino,
tan árido,
que logra, por sí solo, estremecerme.
Estoy sentado en una piedra,
en el campo,
bajo un árbol.
Y nada ocurre.
El día es claro y placentero.
Sin pájaros ni nubes; ni una estela
de avión que me entretenga.
No hace calor ni frío.
No sopla el viento.
No tengo hambre.
No tengo sed.
Ni un sueño elemental
que me atenace.
Mansedumbre, quietud…
Apenas eso.
Todo transcurre en una calma
liviana como un hilo.
No se oyen aves en el cielo,
ni un zumbido,
ni el canto estridular de una cigarra.
No hay nada, nadie.
Ningún sonido es más crucial
que mis latidos.
No hay insectos, no hay vida.
No hay rastros de animales.
Tan solo están el árbol y la piedra
que no veo.
Donde me apoyo,
donde me siento.
Por donde pasa un tiempo
ligero como el aire.
No pienso en nada y nada
me perturba.
No añoro, no deseo,
no quiero nada.
A nadie evoco, a nadie espero.
No necesito
hacer
ya nada.
El mundo gira en ese fuero.
Pero es tan grande este momento.
Tan denso es el vacío
que me invade.
Es tan fútil, tan huero
y tan extraño…
Del todo tan trivial y tan inane
(me cuesta tanto
librarme de su influjo),
que en esa nada
me asombro al encontrarme.
--oOo--
Logras desaparecer y aparecer, eso no es fácil. Logras, en la meditación, hablar de cosas imposibles. Un poema con presencia y esencia. ERA
Un abrazo ERA, gracias por comentar.
J. manuel
Re: Nada
Publicado: Jue, 20 Sep 2018 18:04
por Pilar Morte
Has vivido un momento mágico, de esos que llenan la nada. Un gusto leerte.
Besos
Pilar
Re: Nada
Publicado: Jue, 20 Sep 2018 19:06
por Carmen Parra
Pues José Manuel, pues---con ese tiempo tan vacío, tan huero y tan intrascendente, has gestado
unos versos que me han dejado atrapàda a ellos
Me han gustado poeta
Un abrazo
Carmen
Re: Nada
Publicado: Sab, 22 Sep 2018 9:38
por Rafel Calle
Hermoso trabajo, amigo José Manuel, fiel a tu estilo salpicado de momentos muy evocadores.
Abrazos.