Editorial Alaire

Interesantes reflexiones, Ricardo, entiendo que existenciales y reivindicativas con un cierto toque dylaniano en las ansias. Me gusta cuando alguien va un poco más allá´ de lo admitido, demuestra que está vivo y tiene unas ideas aunque no esté de moda en nuestro país que cada vez es más de los otros. Te felicito por esa valentía.

Un abrazo.

Me ha gustado mucho este poema, Ricardo, que es un desgarro interior y un grito.

Te felicito.

Un fuerte abrazo.

Ricardo López Castro escribió:

Acorralado, fuera del trapecio moral,
sobrevivo con garbo, acicalado y manso,
complacientes, las voces que profiero y que acuerdan
un pacto entre mi yo y mi ego polvoriento.

Entre el humo se ven árboles de sirenas
talados por el grito eventual que difiere
de mi propia garganta, de mis propias nociones
del tiempo, del amor, la justicia, o los ritos

tan acondicionados a mi propia figura
-ese mar de intereses en aguas bajo cero-
que la pasividad me embriaga hasta la lívido

en un delirium tremens con capa y con sombrero,
capaz de elaborar conceptos sensitivos
y de paralizar todas mis ilusiones.

Un soneto en alejandrinos que describe el estado social del hombre presionado por las normas. Tiene buen ritmo gracias a los imparisílabos bien acentuados, y el desarrollo no pierde el hilo argumental en ningún momento. Me ha gustado. Todo se lee sin obstáculos. Salud.

Un abrazo.
Óscar