Editorial Alaire

No estoy curada,
pero renuncio
al psiquiatra de mi mente.
Él, que abrió carpetas de voces ahogadas
y la sombra de los ojos
atrapados por la vida.

Le digo adiós. He quebrado
los prólogos de letra adolescente
y cerrado el capítulo donde ardía la sed.

Él decía:
No es necesario ser siempre bueno,
llevar el vestido recién planchado,
ni que recuerdes, incesante, palabras
que sangran
en el cuerpo oprimido.
No serás libre si comes con miedo,
si regresas a casa con los brazos cruzados,
si no aprendes el idioma de las aves,
y olvidas bailar sobre las olas.
Pero las serpientes siempre regresaban
mordiendo con su lengua gris
los paisajes de las vísceras.

Ha sido una renuncia inesperada.

Los versos no hurgarán mi nombre.
Ahora la musa despierta con el bautismo
de la mirada tardía
que trenza belleza con gacelas y bosques,
que recoge cascotes para hacer ciudades nuevas
y acoge la mendicidad
que humedece las aceras.

Ya no deseo mirarme como si fuera las cenizas de una estrella.

Pilar Morte escribió:No estoy curada,
pero renuncio
al psiquiatra de mi mente.
Él, que abrió carpetas de voces ahogadas
y la sombra de los ojos
atrapados por la vida.

Le digo adiós. He quebrado
los prólogos de letra adolescente
y cerrado el capítulo donde ardía la sed.

Él decía:
No es necesario ser siempre bueno,
llevar el vestido recién planchado,
ni que recuerdes, incesante, palabras
que sangran
en el cuerpo oprimido.
No serás libre si comes con miedo,
si regresas a casa con los brazos cruzados,
si no aprendes el idioma de las aves,
y olvidas bailar sobre las olas.
Pero las serpientes siempre regresaban
mordiendo con su lengua gris
los paisajes de las vísceras.

Ha sido una renuncia inesperada.

Los versos no hurgarán mi nombre.
Ahora la musa despierta con el bautismo
de la mirada tardía
que trenza belleza con gacelas y bosques,
que recoge cascotes para hacer ciudades nuevas
y acoge la mendicidad
que humedece las aceras.

Ya no deseo mirarme como si fuera las cenizas de una estrella.

Un poema muy profundo, compañera,hay imágenes impactantes...
Ya volveré con más luz, Pilar, un abrazo grande.

Rosario Martín escribió:

Pilar Morte escribió:No estoy curada,
pero renuncio
al psiquiatra de mi mente.
Él, que abrió carpetas de voces ahogadas
y la sombra de los ojos
atrapados por la vida.

Le digo adiós. He quebrado
los prólogos de letra adolescente
y cerrado el capítulo donde ardía la sed.

Él decía:
No es necesario ser siempre bueno,
llevar el vestido recién planchado,
ni que recuerdes, incesante, palabras
que sangran
en el cuerpo oprimido.
No serás libre si comes con miedo,
si regresas a casa con los brazos cruzados,
si no aprendes el idioma de las aves,
y olvidas bailar sobre las olas.
Pero las serpientes siempre regresaban
mordiendo con su lengua gris
los paisajes de las vísceras.

Ha sido una renuncia inesperada.

Los versos no hurgarán mi nombre.
Ahora la musa despierta con el bautismo
de la mirada tardía
que trenza belleza con gacelas y bosques,
que recoge cascotes para hacer ciudades nuevas
y acoge la mendicidad
que humedece las aceras.

Ya no deseo mirarme como si fuera las cenizas de una estrella.

Un poema muy profundo, compañera,hay imágenes impactantes...
Ya volveré con más luz, Pilar, un abrazo grande.

Gracias, querida amiga, me alegra verte cerca con tu amable palabra
Besos
Pilar

Muy bello trabajo, amiga Pilar; diría que de lo mejor que te he leído últimamente.
Me alegro mucho de que escribas sobre la liberación... Siempre es conveniente mandar a paseo ciertas costumbres que dan vueltas y vueltas para no moverse del mismo sitio. Un buen mareo es lo único a lo que podemos aspirar en semejantes e indigestas norias.
Ha sido un placer leerte. Felicidades, compañera.
Abrazos.

Pilar Morte escribió:No estoy curada,
pero renuncio
al psiquiatra de mi mente.
Él, que abrió carpetas de voces ahogadas
y la sombra de los ojos
atrapados por la vida.

Le digo adiós. He quebrado
los prólogos de letra adolescente
y cerrado el capítulo donde ardía la sed.

Él decía:
No es necesario ser siempre bueno,
llevar el vestido recién planchado,
ni que recuerdes, incesante, palabras
que sangran
en el cuerpo oprimido.
No serás libre si comes con miedo,
si regresas a casa con los brazos cruzados,
si no aprendes el idioma de las aves,
y olvidas bailar sobre las olas.
Pero las serpientes siempre regresaban
mordiendo con su lengua gris
los paisajes de las vísceras.

Ha sido una renuncia inesperada.

Los versos no hurgarán mi nombre.
Ahora la musa despierta con el bautismo
de la mirada tardía
que trenza belleza con gacelas y bosques,
que recoge cascotes para hacer ciudades nuevas
y acoge la mendicidad
que humedece las aceras.

Ya no deseo mirarme como si fuera las cenizas de una estrella.

Es buenísimo Pilar. La tercera estrofa es magistral.

Soy de esas que lee varias veces seguidas cuando algo me gusta mucho. Va la tercera y cuando acabe de escribir esto seguiré leyendo, con detenimiento, para degustarlo como merece.

Un saludo.

Muy hermoso y valiente este trabajo Pilar. Bien trabados los versos desde el inicio y plagado de aciertos literarios.
Un abrazo

Rafel Calle escribió:Muy bello trabajo, amiga Pilar; diría que de lo mejor que te he leído últimamente.
Me alegro mucho de que escribas sobre la liberación... Siempre es conveniente mandar a paseo ciertas costumbres que dan vueltas y vueltas para no moverse del mismo sitio. Un buen mareo es lo único a lo que podemos aspirar en semejantes e indigestas norias.
Ha sido un placer leerte. Felicidades, compañera.
Abrazos.

Gracias,querido amigo, por tu compañía y apoyo. Me alegran mucho tus palabras y te las agradezco de corazón.
Abrazo grande

Belleza y sensibilidad que desnuda el sentir del alma... siempre grato leerte querida amiga...
Te abrazo con todo mi cariño...
Nancy

Felicidades Pilar.
Desde la naturalidad desprendes de forma impecable un complejo decir.

Un abrazo.
Ignacio

Antonia Mauro escribió:

Pilar Morte escribió:No estoy curada,
pero renuncio
al psiquiatra de mi mente.
Él, que abrió carpetas de voces ahogadas
y la sombra de los ojos
atrapados por la vida.

Le digo adiós. He quebrado
los prólogos de letra adolescente
y cerrado el capítulo donde ardía la sed.

Él decía:
No es necesario ser siempre bueno,
llevar el vestido recién planchado,
ni que recuerdes, incesante, palabras
que sangran
en el cuerpo oprimido.
No serás libre si comes con miedo,
si regresas a casa con los brazos cruzados,
si no aprendes el idioma de las aves,
y olvidas bailar sobre las olas.
Pero las serpientes siempre regresaban
mordiendo con su lengua gris
los paisajes de las vísceras.

Ha sido una renuncia inesperada.

Los versos no hurgarán mi nombre.
Ahora la musa despierta con el bautismo
de la mirada tardía
que trenza belleza con gacelas y bosques,
que recoge cascotes para hacer ciudades nuevas
y acoge la mendicidad
que humedece las aceras.

Ya no deseo mirarme como si fuera las cenizas de una estrella.

Es buenísimo Pilar. La tercera estrofa es magistral.

Soy de esas que lee varias veces seguidas cuando algo me gusta mucho. Va la tercera y cuando acabe de escribir esto seguiré leyendo, con detenimiento, para degustarlo como merece.

Un saludo.

Te agradezco la generosidad con la que tratas estos sencillos versos.
Abrazos
Pilar

Original poema, Pilar, que me ha gustado mucho. He encontrado en él versos de verdadero mérito.

Un abrazo.

Un poema muy bueno, querida Pilar. Hace saltar con resortes emocionales la paz de los sillones.

Felicitaciones sinceras y un abrazo de los grandes.

Armilo Brotón escribió:Muy hermoso y valiente este trabajo Pilar. Bien trabados los versos desde el inicio y plagado de aciertos literarios.
Un abrazo

Gracias, querido amigo, por tus generosas palabras.
Besos
Pilar

Lunamar Solano escribió:Belleza y sensibilidad que desnuda el sentir del alma... siempre grato leerte querida amiga...
Te abrazo con todo mi cariño...
Nancy

Gracias, Lunamar, por leer estos versos y dejar tu amable palabra.
Besos
Pilar

Querida Pilar-Ave:
Tu ascenso es digno de admiración. No dejes de batir tus alas que has de subir más alto aún, si fuese posible.
Besos.
Jerónimo