Sensaciones equívocas (El día en que decidí que me buscasen)
Publicado: Jue, 16 Ago 2018 15:42
Un poema en una servilleta.
Me miras con ojos concupiscentes.
Antes de llegar al fondo de mí.
Justo antes.
Te he penetrado, pero no de la manera que yo pretendía -eso sucede con todos mis poemas-.
La verdad es que sigo buscando a la mujer perfecta.
¿Qué importa que yo sea perfecto, Dios, o una sarta de mentiras?
Sé lo que quiero.
Mis letras saben lo que quiero.
La búsqueda me mantiene vivo.
Mi poesía es yo, y yo soy mi poesía.
Que digo que soy Dios, pues me lo creo.
Que digo que no quiero nada de nadie ni de nada, pues es cierto.
Pero la búsqueda debe tener un entramado resistente.
Esto es, nadie me busca.
Ésa quizá sea la base de mi autenticidad poética.
Me miras con ojos concupiscentes.
Antes de llegar al fondo de mí.
Justo antes.
Te he penetrado, pero no de la manera que yo pretendía -eso sucede con todos mis poemas-.
La verdad es que sigo buscando a la mujer perfecta.
¿Qué importa que yo sea perfecto, Dios, o una sarta de mentiras?
Sé lo que quiero.
Mis letras saben lo que quiero.
La búsqueda me mantiene vivo.
Mi poesía es yo, y yo soy mi poesía.
Que digo que soy Dios, pues me lo creo.
Que digo que no quiero nada de nadie ni de nada, pues es cierto.
Pero la búsqueda debe tener un entramado resistente.
Esto es, nadie me busca.
Ésa quizá sea la base de mi autenticidad poética.