El barco pirata
Publicado: Dom, 15 Jul 2018 4:01
El barco pirata
A Pablo Neruda.
Era una lejana penumbra en el horizonte, el barco pirata, salió de un puerto en España, y se dirigió a una costa siniestra, los caníbales tiraban ramas y fuego.
El marino, el que llevaba la tripulación, ordenó matar a varios peces, y luego decapitar los rostros de los aborígenes de esa zona.
Los días pasaban, el barco avanzaba hasta África, y las tribus guerreras se esparcían.
Las ocultas leyendas dicen… y afirman los libros de esa época, que caminando iban las mujeres y con las manos sin dedos, los rostros de los niños estaban arañados y que unos seres malignos penetraban la selva oscura.
Luego de años, una persona camina por el lugar y encuentra un hueso con una cadena de oro,
Allá en la historia, en la insípida selva de una isla desconocida aparece una inscripción diciendo:
MUERTE A LOS PIRATAS.
Hoy estoy escribiendo una novela fantástica y luego de este relato, vivencio cada día en Londres, en este castillo antiguo con una iglesia, los sacerdotes también tenemos al diablo en el cuerpo, allá en los límites de la imaginación, aparece un laberinto y lleno de cuerpos colgados, en medio de una selva aborigen.
A Pablo Neruda.
Era una lejana penumbra en el horizonte, el barco pirata, salió de un puerto en España, y se dirigió a una costa siniestra, los caníbales tiraban ramas y fuego.
El marino, el que llevaba la tripulación, ordenó matar a varios peces, y luego decapitar los rostros de los aborígenes de esa zona.
Los días pasaban, el barco avanzaba hasta África, y las tribus guerreras se esparcían.
Las ocultas leyendas dicen… y afirman los libros de esa época, que caminando iban las mujeres y con las manos sin dedos, los rostros de los niños estaban arañados y que unos seres malignos penetraban la selva oscura.
Luego de años, una persona camina por el lugar y encuentra un hueso con una cadena de oro,
Allá en la historia, en la insípida selva de una isla desconocida aparece una inscripción diciendo:
MUERTE A LOS PIRATAS.
Hoy estoy escribiendo una novela fantástica y luego de este relato, vivencio cada día en Londres, en este castillo antiguo con una iglesia, los sacerdotes también tenemos al diablo en el cuerpo, allá en los límites de la imaginación, aparece un laberinto y lleno de cuerpos colgados, en medio de una selva aborigen.