Besarlos a todos
Publicado: Jue, 28 Jun 2018 10:44
No se si les ha pasado a ustedes,
pero, a veces, yo quisiera besarlos a todos,
a todos, si,
incluso a esos altos estirados que tienen el bigotito afilado
y que muchas veces me repugna solo el mirarlos,
pero cuando soy tan feliz
como los hijos del viento
entonces,
yo quisiera besarlos a todos,
incluso a esos mendigos
que van sin destino
vagando por las calles
con una botella de vino asida
de su mugriento brazo;
o a esos presos desdentados
que un día cometieron
una locura, y después se arrepintieron,
también a ellos, sí,
porque mi alegría es universal
y no se fija en nada
o se fija en todo,
es una alegría carente de vanidad,
de peso,
de edad,
de belleza,
de fortuna.
Mi alegría también quiere besar,
a los que tienen los ojos caídos
por la desesperanza,
a los que nada tienen
ni siquiera un fuego en las noches de invierno,
ni siquiera la mirada de un perro manso y fiel.
Porque así es mi mirada,
amiga de los pobres,
aliada de desvalidos,
y hoy es un día de esos,
que mi alegría quiere besarlos a ustedes,
sin excepción,
sin distinción,
solo por el hecho de ser ustedes,
solo porque cada día, como yo,
ustedes también se fijan en la luna,
y estoy seguro,
que se ponen románticos,
o tristes,
o cierran la ventana
y se echan a dormir.
¡Que fácil es la felicidad
y cuánto la echamos de menos!,
y, sin embargo,
¡ah ignorantes, que cerca la tenemos!, siempre esta ahí
acechándonos con su cálida mirada:
sí, amigos,
hoy quiero besarlos a todos,
besarlos y después,
darles las buenas noches.
pero, a veces, yo quisiera besarlos a todos,
a todos, si,
incluso a esos altos estirados que tienen el bigotito afilado
y que muchas veces me repugna solo el mirarlos,
pero cuando soy tan feliz
como los hijos del viento
entonces,
yo quisiera besarlos a todos,
incluso a esos mendigos
que van sin destino
vagando por las calles
con una botella de vino asida
de su mugriento brazo;
o a esos presos desdentados
que un día cometieron
una locura, y después se arrepintieron,
también a ellos, sí,
porque mi alegría es universal
y no se fija en nada
o se fija en todo,
es una alegría carente de vanidad,
de peso,
de edad,
de belleza,
de fortuna.
Mi alegría también quiere besar,
a los que tienen los ojos caídos
por la desesperanza,
a los que nada tienen
ni siquiera un fuego en las noches de invierno,
ni siquiera la mirada de un perro manso y fiel.
Porque así es mi mirada,
amiga de los pobres,
aliada de desvalidos,
y hoy es un día de esos,
que mi alegría quiere besarlos a ustedes,
sin excepción,
sin distinción,
solo por el hecho de ser ustedes,
solo porque cada día, como yo,
ustedes también se fijan en la luna,
y estoy seguro,
que se ponen románticos,
o tristes,
o cierran la ventana
y se echan a dormir.
¡Que fácil es la felicidad
y cuánto la echamos de menos!,
y, sin embargo,
¡ah ignorantes, que cerca la tenemos!, siempre esta ahí
acechándonos con su cálida mirada:
sí, amigos,
hoy quiero besarlos a todos,
besarlos y después,
darles las buenas noches.