Editorial Alaire

No quiero ser dolor, ni suceder
donde el verbo termina.

No me prometas pájaros, no quiero
volar lejos del tiempo que reúne
sobre el papel arrugas invisibles.

Para alisar con letras el pasado
finjo las sílabas de un rostro nuevo.

Y ahora tengo la edad de las palabras,
el tacto de un reloj que no numera
las horas del silencio.


http://ciudadescomoislas2.blogspot.com/

¡Cachis¡ Puff, se me acaba de ocurrir algo, poquín más fuerte para decir : ), pero no lo haré. Apetece no decir nada, quedarse en el silencio de esas horas que el reloj no numera. Qué bonito.

Impresionante final, Carmen. Aplausos, né.

Blanca

carmen iglesia escribió:No quiero ser dolor, ni suceder
donde el verbo termina.

No me prometas pájaros, no quiero
volar lejos del tiempo que reúne
sobre el papel arrugas invisibles.

Para alisar con letras el pasado
finjo las sílabas de un rostro nuevo.

Y ahora tengo la edad de las palabras,
el tacto de un reloj que no numera
las horas del silencio.

Las edades no las marca el reloj. La palabra marca otro ritmo. Me gustó el poema
Un abrazo
Pilar

No quiero ser dolor, ni suceder
donde el verbo termina.

No me prometas pájaros, no quiero
volar lejos del tiempo que reúne
sobre el papel arrugas invisibles.

Para alisar con letras el pasado
finjo las sílabas de un rostro nuevo.

Y ahora tengo la edad de las palabras,
el tacto de un reloj que no numera
las horas del silencio.

Me llevo tu poema completito, de pirncipio a fin es excelente, me ha gustado mucho.

Un abrazo para ti.

Blanca Sandino escribió:¡Cachis¡ Puff, se me acaba de ocurrir algo, poquín más fuerte para decir : ), pero no lo haré. Apetece no decir nada, quedarse en el silencio de esas horas que el reloj no numera. Qué bonito.

Impresionante final, Carmen. Aplausos, né.

Blanca

carmen iglesia escribió:No quiero ser dolor, ni suceder
donde el verbo termina.

No me prometas pájaros, no quiero
volar lejos del tiempo que reúne
sobre el papel arrugas invisibles.

Para alisar con letras el pasado
finjo las sílabas de un rostro nuevo.

Y ahora tengo la edad de las palabras,
el tacto de un reloj que no numera
las horas del silencio.

Blanca, tus comentarios son un soplo de aire fresco, créeme...

Gracias muchas y besotes grandes desde el mar,

Carmen

No quiero ser dolor, ni suceder
donde el verbo termina.

No me prometas pájaros, no quiero
volar lejos del tiempo que reúne
sobre el papel arrugas invisibles.

Para alisar con letras el pasado
finjo las sílabas de un rostro nuevo.

Y ahora tengo la edad de las palabras,
el tacto de un reloj que no numera
las horas del silencio.

...................................................
Hermoso poema, amiga Carmen, con esa pulcritud tan característica de tu poesía.
El primer encabalgamiento ( ni suceder...) es el que más me gusta.
La cadena fonológica (eo) me parece otro asunto reseñable.
En fin, ha sido un placer leerte.
Te mando un cordial abrazo.

Pilar Morte escribió:Las edades no las marca el reloj. La palabra marca otro ritmo. Me gustó el poema
Un abrazo
Pilar

Gracias a las palabras, eso sí, podemos recuperar cualquiera de nuestras edades, incluso las que están por llegar...

Muchas gracias por venir, PIlar.

Un beso,

Carmen

.

Los/as poetas tenemos mucha suerte.
La palabra nos va salvando,
la palabra nos irá salvando.

Besotes, gran dama. (hace tiempo no platicamos jeje)

.

Noemi Sánchez escribió:

No quiero ser dolor, ni suceder
donde el verbo termina.

No me prometas pájaros, no quiero
volar lejos del tiempo que reúne
sobre el papel arrugas invisibles.

Para alisar con letras el pasado
finjo las sílabas de un rostro nuevo.

Y ahora tengo la edad de las palabras,
el tacto de un reloj que no numera
las horas del silencio.

Me llevo tu poema completito, de pirncipio a fin es excelente, me ha gustado mucho.

Un abrazo para ti.

Noemi, me encanta encontrarte...

Te mando un beso grande,

Carmen

Rafel Calle escribió:No quiero ser dolor, ni suceder
donde el verbo termina.

No me prometas pájaros, no quiero
volar lejos del tiempo que reúne
sobre el papel arrugas invisibles.

Para alisar con letras el pasado
finjo las sílabas de un rostro nuevo.

Y ahora tengo la edad de las palabras,
el tacto de un reloj que no numera
las horas del silencio.

...................................................
Hermoso poema, amiga Carmen, con esa pulcritud tan característica de tu poesía.
El primer encabalgamiento ( ni suceder...) es el que más me gusta.
La cadena fonológica (eo) me parece otro asunto reseñable.
En fin, ha sido un placer leerte.
Te mando un cordial abrazo.

Me alegra que te haya gustado, Rafel, tus apuntes son siempre muy interesantes y los agradezco mucho.

Un abrazo,

Carmen

Víctor Vergara Valencia escribió:.

Los/as poetas tenemos mucha suerte.
La palabra nos va salvando,
la palabra nos irá salvando.

Besotes, gran dama. (hace tiempo no platicamos jeje)

.

Yo no me considero poeta, Víctor... considero sólo que estoy loquita de amor por la palabra... jejeje... Considero también que tengo una gran intuición a la hora de leer pero si te digo la verdad, aunque leo muchísima poesía, en lo único que me considero "algo experta" es en prosa... Para que veas... llegué a la poesía (consciente totalmente de mis limitaciones que son miles, millones, innumerables) porque no tengo la disciplina suficiente para escribir grandes novelones, que es lo que me encantaría...

Así que de acuerdo en que la palabra nos salva... eso síp...

Besotes. Y hablamos cuando vos queráis.

Carmen

Es buenísimo este poema. Tocas y abrazas con tus versos lo imposible.

Esto me dejó boquiabierto:

....ni suceder
donde el verbo termina.

Bicos querida amiga.

"No me prometas pájaros", qué buen verso, entre varios que se vislumbran dentro de este poema. Siento que de alguna forma has encontrado en la condensación de lo que escribes un arma poderosa que logra decir mucho o todo en pocas palabras. Un gusto leerte, Carmen.

Un abrazo.


Martín Desormeaux.-

Ese "y ahora tengo la edad de las palabras" me gusta mucho, quizá a todo poeta apasionado le suceda eso, que ya no puede vivir sino dentro de los libros o él mismo no es más que un saco de letras.

Abrazo.

Hasta pronto.

La edad de las palabras, me ha gustado mucho esa frase... excelente poema el tuyo Carmen.

El primer parrafo es un inicio perfecto.

Saludos

Bismark