Editorial Alaire

De estas calles que ahondan el poniente,
una habrá (no sé cuál) que he recorrido
ya por última vez... J.L. Borges


Y NO ESTARÉ AQUÍ

De todas las palabras
que saldrán de mi boca,
una, que ahora ignoro,
será la última.
Pero hubo otra,
ambigua, principal,
y ya olvidada,
que fue el origen
de todas mis palabras.

De todas esas huellas
que dejarán mis pies
sobre la tierra,
solo una, no sé dónde,
será la última.
La de ese paso,
por el último tramo
del último camino.
De todos ellos, hubo uno,
dubitativo, trascendente,
perdido ya en el tiempo,
que fue el inicio
de todos mis destinos.

De todas esas cosas que mis ojos
verán en esta vida,
una, que desconozco,
será la última.
Pero hubo otra, primera,
materna y extraviada, fuente
de todo lo que quise.

De todos los sonidos
que escuche estando vivo,
uno, que no imagino, será el último
(luego, se hará el silencio).
Pero hubo otro que vino de la nada.
Un latido, una diástole, el principio
de todos los sonidos…

Mi vida es una incógnita
allá por lo olvidado.
Y mi final será un sumario
de cosas que hoy ignoro.

De todas las verdades
que el hombre me ha vendido,
una, será Verdad.
Será la última.
Será la única.

Entonces,
comprenderé lo que es mundo,
me habrá alcanzado el tiempo…
y no estaré aquí.


--oOo--

Me ha gustado mucho este poema de despedida. Hay una exquisita sensibilidad en su sencillez. Ha sido todo un placer de lectura.
Te felicito por tan inspiradas y bellas letras.

Un abrazo.

jose manuel saiz escribió:VIENTO DE COLA


De todas las palabras
que saldrán de mi boca,
solo una -no sé cuál- será la última.
Pero hubo otra,
ambigua, principal (ya olvidada),
que fue primera –origen
de todas mis palabras-.

De las huellas que dejarán
mis pies sobre la tierra,
solo una -no sé cuál- será la impronta
del que será
mi último paso,
por el último tramo
del último camino.
De todos ellos, hubo uno
-glorioso, trascendente-
perdido ya en el tiempo,
que fue el inicio
de todos los caminos.

De todas esas cosas que mis ojos
verán en esta vida,
solo una -no sé cuál-
será la última.
Pero hubo otra, primera,
materna y extraviada –fuente
de todo lo que quise-.

De los sonidos
que el viento arrastre
a mis oídos,
solo uno -no sé cuál-
será el último (luego,
me haré silencio, luego
me haré de aire).
Pero hubo otro
que vino de la nada.
Un latido, una diástole, el principio
de todos los sonidos…

Mi vida es una incógnita
allá por lo olvidado.
Y mi final será un sumario
de cosas últimas
que desconozco.

Ahora sopla un viento
de cola hacia el ocaso
(me dejaré llevar
por no sé qué verdad).


--oOo--

Enmarcas muy bien ese viento de cola, que he disfrutado.
Un abrazo,
Simon

jose manuel saiz escribió:
VIENTO DE COLA




Mi vida es una incógnita
allá por lo olvidado.
Y mi final será un sumario
de cosas últimas
que desconozco.

Ahora sopla un viento
de cola hacia el ocaso
(me dejaré llevar
por no sé qué verdad).


--oOo--

Precios poema en tu línea, amigo Jose Manuel.
Recordamos primeras cosas, o lo intentamos al menos, pero intentar adivinar cómo serán las últimas es una tarea infructuosa. Quizá es mejor no pensarlo porque, sean como sean, llegarán y si nos damos cuenta de ello, creo que será terrible.

Un placer leerte, compañero.
Abrazo fuerte.

jose manuel saiz escribió:VIENTO DE COLA


De todas las palabras
que saldrán de mi boca,
solo una -no sé cuál- será la última.
Pero hubo otra,
ambigua, principal (ya olvidada),
que fue primera –origen
de todas mis palabras-.

De las huellas que dejarán
mis pies sobre la tierra,
solo una -no sé cuál- será la impronta
del que será
mi último paso,
por el último tramo
del último camino.
De todos ellos, hubo uno
-glorioso, trascendente-
perdido ya en el tiempo,
que fue el inicio
de todos los caminos.

De todas esas cosas que mis ojos
verán en esta vida,
solo una -no sé cuál-
será la última.
Pero hubo otra, primera,
materna y extraviada –fuente
de todo lo que quise-.

De los sonidos
que el viento arrastre
a mis oídos,
solo uno -no sé cuál-
será el último (luego,
me haré silencio, luego
me haré de aire).
Pero hubo otro
que vino de la nada.
Un latido, una diástole, el principio
de todos los sonidos…

Mi vida es una incógnita
allá por lo olvidado.
Y mi final será un sumario
de cosas que hoy ignoro.

Ahora sopla un viento
de cola hacia el ocaso
(me dejaré llevar
por no sé qué verdad).


--oOo--

Admiro tu destreza y sencillez al escribir.
Te felicito compañero.
Un abrazo grande.

Sos grande José. ¿Qué más podría decirte?
Sabés cuánto te admiro. Gracias!

Ramón Castro Méndez escribió:Me ha gustado mucho este poema de despedida. Hay una exquisita sensibilidad en su sencillez. Ha sido todo un placer de lectura.
Te felicito por tan inspiradas y bellas letras.

Un abrazo.

Muchas gracias Ramón por tu comentario.
Un abrazo, amigo.
J. Manuel

José Manuel,

un placer, como siempre, pasarse por tus letras, amigo. Me gustan mucho, ya lo sabes.

Un abrazo.

Como siempre, una mirada hermosa y un sentimiento humano impregnan tus versos. Me gustó leerte. Siento tus ausencias.
Besos
Pilar

Simon Abadia escribió:

jose manuel saiz escribió:VIENTO DE COLA


De todas las palabras
que saldrán de mi boca,
solo una -no sé cuál- será la última.
Pero hubo otra,
ambigua, principal (ya olvidada),
que fue primera –origen
de todas mis palabras-.

De las huellas que dejarán
mis pies sobre la tierra,
solo una -no sé cuál- será la impronta
del que será
mi último paso,
por el último tramo
del último camino.
De todos ellos, hubo uno
-glorioso, trascendente-
perdido ya en el tiempo,
que fue el inicio
de todos los caminos.

De todas esas cosas que mis ojos
verán en esta vida,
solo una -no sé cuál-
será la última.
Pero hubo otra, primera,
materna y extraviada –fuente
de todo lo que quise-.

De los sonidos
que el viento arrastre
a mis oídos,
solo uno -no sé cuál-
será el último (luego,
me haré silencio, luego
me haré de aire).
Pero hubo otro
que vino de la nada.
Un latido, una diástole, el principio
de todos los sonidos…

Mi vida es una incógnita
allá por lo olvidado.
Y mi final será un sumario
de cosas últimas
que desconozco.

Ahora sopla un viento
de cola hacia el ocaso
(me dejaré llevar
por no sé qué verdad).


--oOo--

Enmarcas muy bien ese viento de cola, que he disfrutado.
Un abrazo,
Simon

Muchas gracias Simón, un fuerte abrazo para ti.
J. manuel

Me ha gustado este poema. En un recorrido por los sentidos y los raciocinios que nos conforman mientras somos hasta que no somos. Gracias por compartirlo.

Saludos

Àlex

Tu vida y la mía y la de todos será una incognita que llega en el momento más inoportuno a no ser
que un buen poeta sepa y pueda y logre poner la última palabra en el lugar oportuno para que el
aire empuje con los escondidos secretos de los orígenes más originales y traspuestos en verso
con ate y mención de la más limpia, sensata y buena.

Un abrazo

jose manuel saiz escribió:VIENTO DE COLA


De todas las palabras
que saldrán de mi boca,
solo una -no sé cuál- será la última.
Pero hubo otra,
ambigua, principal (ya olvidada),
que fue primera –origen
de todas mis palabras-.

De las huellas que dejarán
mis pies sobre la tierra,
solo una -no sé cuál- será la impronta
de mi último paso,
por el último tramo
del último camino.
De todos ellos, hubo uno
-glorioso, trascendente-
perdido ya en el tiempo,
que fue el inicio
de todos mis destinos.

De todas esas cosas que mis ojos
verán en esta vida,
solo una -no sé cuál-
será la última.
Pero hubo otra, primera,
materna y extraviada –fuente
de todo lo que quise-.

De los sonidos
que el viento arrastre
a mis oídos,
solo uno -no sé cuál-
será el último (luego,
me haré silencio).
Pero hubo otro
que vino de la nada.
Un latido, una diástole, el principio
de todos los sonidos…

Mi vida es una incógnita
allá por lo olvidado.
Y mi final será un sumario
de cosas que hoy ignoro.
Ahora sopla un viento
de cola hacia el ocaso.
De todas las verdades
que el mundo me ha vendido, una
será la última,
la única… Y yo sé cuál.


--oOo--

Hola José Manuel, parece que te estas yendo cuando apenas estoy llegando.
Parece que hay mucho viento y te están impulsando.
Siempre que puedo te leo y tus letras son muy buenas, un abrazo querido amigo.

Marisa Peral escribió:

jose manuel saiz escribió:
VIENTO DE COLA




Mi vida es una incógnita
allá por lo olvidado.
Y mi final será un sumario
de cosas últimas
que desconozco.

Ahora sopla un viento
de cola hacia el ocaso
(me dejaré llevar
por no sé qué verdad).


--oOo--

Precios poema en tu línea, amigo Jose Manuel.
Recordamos primeras cosas, o lo intentamos al menos, pero intentar adivinar cómo serán las últimas es una tarea infructuosa. Quizá es mejor no pensarlo porque, sean como sean, llegarán y si nos damos cuenta de ello, creo que será terrible.

Un placer leerte, compañero.
Abrazo fuerte.

Muchas gracias Marisa.
Un fuerte abrazo
J. Manuel

Silvia Savall escribió:

jose manuel saiz escribió:VIENTO DE COLA


De todas las palabras
que saldrán de mi boca,
solo una -no sé cuál- será la última.
Pero hubo otra,
ambigua, principal (ya olvidada),
que fue primera –origen
de todas mis palabras-.

De las huellas que dejarán
mis pies sobre la tierra,
solo una -no sé cuál- será la impronta
del que será
mi último paso,
por el último tramo
del último camino.
De todos ellos, hubo uno
-glorioso, trascendente-
perdido ya en el tiempo,
que fue el inicio
de todos los caminos.

De todas esas cosas que mis ojos
verán en esta vida,
solo una -no sé cuál-
será la última.
Pero hubo otra, primera,
materna y extraviada –fuente
de todo lo que quise-.

De los sonidos
que el viento arrastre
a mis oídos,
solo uno -no sé cuál-
será el último (luego,
me haré silencio, luego
me haré de aire).
Pero hubo otro
que vino de la nada.
Un latido, una diástole, el principio
de todos los sonidos…

Mi vida es una incógnita
allá por lo olvidado.
Y mi final será un sumario
de cosas que hoy ignoro.

Ahora sopla un viento
de cola hacia el ocaso
(me dejaré llevar
por no sé qué verdad).


--oOo--

Admiro tu destreza y sencillez al escribir.
Te felicito compañero.
Un abrazo grande.

Muchas gracias Silvia, yo también te admiro.
un abrazo
J. manuel