
EL ÚLTIMO INACABADO
no sé si vivo en un show o en un reality
son devaneos desgarradores devastadores del que no quiere perder su identidad
la cordura atada a sus alentadoras ideas delirantes
no quiero no
me niego a hundir mi cara en ninguna estrategia
autodidacta
qué se puede ganar cuando la mente es un bebedero de patos
si el diablo me torció la sonrisa desde crío
y se me lapida por amar al prójimo más que a mí mismo
podría pensar que hay cámaras en mi casa
mientras el mundo se vuelve loco pierdo el equilibrio por los pasillos
empastillado
podría pensar perfectamente que me implantaron un microchip en el cerebro
cuando mi poética el misterio de mi poética es desacreditado
como un hito fantasma
aunque sea poesía en vena
no quiero no por nada del mundo cambiar
esto es lo que la realidad su realidad me transmite
y la otra realidad la realidad que irradio
tengo un punto de vista definido solo eso
mientras tanto seguiré repartiendo el periódico por la calle
y entre estas cuatro paredes seguiré rondando a dios hasta traspasar el espejo