Editorial Alaire

Transito, me envuelvo en el aire, vibro,
entro en el café de las 10,
humea con la escasa hoguera que me recorre.
Mis células reciben un calor que reconforta.
¡Qué sencillo un periódico para acceder al mundo!

Recorro la calle, me atrae una vidriera,
la ruta que me lleva con mi sol interior
como una comunión de belleza
y ánimo. Entro, sólo una dependienta
se une al aura que me envuelve.
¡Qué giro de luz
cuando nos acercamos al nivel vibratorio
del nuestro!
Me siento tranquila, no hay disimulo,
sólo comunión de miradas que se placen
en el lenguaje y la hermosura.

Salgo con un paquete mientras el recorrido
inunda de endorfinas la ausencia de vuestros besos.

Camino a ritmo del ánimo,
todavía me pierdo como una paloma sin vuelo
en la vida que avanza fuera de mí.

Tu poesía tiene algo especial una sensibilidad que traspasa.
Gracias y un abrazo fuerte.

Silvia Savall escribió:Tu poesía tiene algo especial una sensibilidad que traspasa.
Gracias y un abrazo fuerte.

Gracias, querida amiga, me alegra que hayas dejado tu palabra .
Besos
Pilar

Me ha encantado la estrofa de cierre.
Ella sola constituye un poema.
Te mando un abrazo fuerte, con mis mejores deseos y bendiciones!

Ha sido todo un placer transitar por ese día cualquiera que nos propones.Lo dicho, me ha encantado.

Besos.

Ese día cualquiera deja de serlo en tus versos, precioso Pilar
Un abrazo amiga.
Carmen

Un experiencia que bien vale un poema. Y es que de las cosas cotidianas la poesía hace bien su papel, tanto como tu poema, Pilar.
Me ha gustado mucho.
Besos

Dulce sensibilidad que cautiva querida amiga...
Un gusto leerte...te abrazo con todo mi cariño...
Nancy

Belleza y sensibilidad en ese "Día cualquiera", Pilar:

Es un poema muy Zen.

Me ha encantado
Un beso
Ana

Me siento identificada con ese día cualquiera en el que vas a tu aire y todo a tu alrededor te hace sentir feliz, un gusto leerte como siempre querida Pilar, mi abrazo fuerte.

Cecilia

Ricardo López Castro escribió:Me ha encantado la estrofa de cierre.
Ella sola constituye un poema.
Te mando un abrazo fuerte, con mis mejores deseos y bendiciones!

Gracias, Ricardo, por venir y dejar tus amables palabras.
Besos
Pilar

Bien descrito ese transitar cotidiano. El remate del poema me ha encantado. Un beso.

Una maravilla, Pilariña Demuestra que cualquier momento del estar vivo puede exprimirse en poesía. En todo momento sentimos, y todo él es grandeza; relacionar, nombrar lo que se ve con la conmoción que nos impone su presencia. Sólo el poeta tiene la magia de transmitirlo y para hacerlo sentir en el lector. Ese es el momento de la belleza.

Estamos ante un poema de gran altura. Lo digo de verdad.

Un biquiño.

Muy bueno Pilar. Una recreación del ambiente genial. Uno puede hasta oler el café y sentirse reconfortado.
No pude encajar, dada mi natural ineptitud para entender algunas cosas, en el contexto del resto del poema, el verso en el que haces referencias a "vuestros besos".
Bueno, yo te mando uno a ti.

[quote="Pilar Morte"]Transito, me envuelvo en el aire, vibro,
entro en el café de las 10,
humea con la escasa hoguera que me recorre.
Mis células reciben un calor que reconforta.
¡Qué sencillo un periódico para acceder al mundo!

Recorro la calle, me atrae una vidriera,
la ruta que me lleva con mi sol interior
como una comunión de belleza
y ánimo. Entro, sólo una dependienta
se une al aura que me envuelve.
¡Qué giro de luz
cuando nos acercamos al nivel vibratorio
del nuestro!
Me siento tranquila, no hay disimulo,
sólo comunión de miradas que se placen
en el lenguaje y la hermosura.

Salgo con un paquete mientras el recorrido
inunda de endorfinas la ausencia de vuestros besos.

Camino a ritmo del ánimo,
todavía me pierdo como una paloma sin vuelo
en la vida que avanza fuera de mí.


Tu andar cotidiano tiene una sensibilidad creciente, hasta ese final del poema, cuyos versos encierran todo un sentimiento, un culto cautivo de tus facultades de soñar y de analizar, conformando las sensaciones de la realidad. Un poema excelente que marca parte de tu visión de la vida.

Desde la soledad de mi isla, vaya un gran abrazo.

José Manuel F. Febles