Te sueño para que existas
Publicado: Jue, 29 Mar 2018 0:17
TE SUEÑO PARA QUE EXISTAS
Te escribo, porque es otra forma de inventarte, de saberte …
de llegar a ti dibujando palabras en el aire, me quedé sin voz,
sin verbo para hablarte, por eso te escribo imaginándote …
en ese guiño de promesas, en ese silencio que nace cuando
las cigarras cantan en la noche húmeda y temblorosa,
por eso callas, para no despertar mi sueño.
Te escribo para que existas, en mi forja de alfabetos, para
hablarte del deseo, para desearte con las palabras, gozarte
en la distancia en esa imaginación incandescente. Cada día
agitas … el pañuelo blanco de mi vida.
Podría quizá acariciarte, ¡frágil¡, rozarte con las yemas pulidas
de mis dedos, el infinito es … desvelar la niña que dentro llevas y
llegar a ti, sin prisa, sin que apenas lo notes y sentirte temblar
como una hoja entre mis manos o al menos déjame dormir bajo
tus párpados entre tus hectáreas de fantasía y poder sentir tus
silencios, llenarme de tu desnudez para vestirme por dentro.
( Me duele tanto ese silencio, cuando callas. )
Soy, lo que apenas me dejas ser, llovizna lamiendo tus huellas,
el aire que arrastra tus aromas, esa lágrima de edad perdida
humedeciendo tu piel, ese silencio,
que vino de lejos …
Te escribo, porque es otra forma de inventarte, de saberte …
de llegar a ti dibujando palabras en el aire, me quedé sin voz,
sin verbo para hablarte, por eso te escribo imaginándote …
en ese guiño de promesas, en ese silencio que nace cuando
las cigarras cantan en la noche húmeda y temblorosa,
por eso callas, para no despertar mi sueño.
Te escribo para que existas, en mi forja de alfabetos, para
hablarte del deseo, para desearte con las palabras, gozarte
en la distancia en esa imaginación incandescente. Cada día
agitas … el pañuelo blanco de mi vida.
Podría quizá acariciarte, ¡frágil¡, rozarte con las yemas pulidas
de mis dedos, el infinito es … desvelar la niña que dentro llevas y
llegar a ti, sin prisa, sin que apenas lo notes y sentirte temblar
como una hoja entre mis manos o al menos déjame dormir bajo
tus párpados entre tus hectáreas de fantasía y poder sentir tus
silencios, llenarme de tu desnudez para vestirme por dentro.
( Me duele tanto ese silencio, cuando callas. )
Soy, lo que apenas me dejas ser, llovizna lamiendo tus huellas,
el aire que arrastra tus aromas, esa lágrima de edad perdida
humedeciendo tu piel, ese silencio,
que vino de lejos …