Editorial Alaire

Carmen Pla escribió:Tan adentro siento las cosas
que todo es incomprensible.

Siento el crujir de los impulsos
de una nueva vida, que no espera.

Necesito la cumbre y el reposo,
el hielo zarandeado por las corrientes
y mis sueños en trance de querer fundirme
para comprender, no siendo.

Un deseo que atardece mis sienes
y me despide enamorada cada día;
oscureciendo el juego que deja la tarde
tan natural, tan clara,
tan llena de ti para resistir
una retahíla de desencantos.

Los sentimientos corren todavía
sobre un ligero gusto,
porque a pesar de todo, y a él le debo,
alguna satisfacción de que aún me falte el aire.

Rosa Martín escribió:

Carmen Pla escribió:Tan adentro siento las cosas
que todo es incomprensible.

Siento el crujir de los impulsos
de una nueva vida, que no espera.

Necesito la cumbre y el reposo,
el hielo zarandeado por las corrientes
y mis sueños en trance de querer fundirme
para comprender, no siendo.

Un deseo que atardece mis sienes
y me despide enamorada cada día;
oscureciendo el juego que deja la tarde
tan natural, tan clara,
tan llena de ti para resistir
una retahíla de desencantos.

Los sentimientos corren todavía
sobre un ligero gusto,
porque a pesar de todo, y a él le debo,
alguna satisfacción de que aún me falte el aire.

Todo el poema es para llevar, Carmen,
la última estrofa es una delicia.
Un placer de lectura, compañera,un abrazo.

Carmen Pla escribió:Tan adentro queda
mi pasar esquivo,
que todo es incomprensible.

Siento el crujir de los impulsos
de una nueva vida, que no espera.

Necesito la cumbre y el reposo,
el hielo zarandeado por las corrientes,
y mis sueños en trance de querer fundirme
para comprender, no siendo.

Un deseo que ronda mis sienes
y me despide enamorada cada día;
oscureciendo el juego que deja la tarde
tan natural, tan clara,
tan llena para resistir
otra retahíla de desencantos.

Los sentimientos corren todavía
sobre un ligero gusto,
porque a pesar de todo, me debo,
alguna satisfacción de que aún me falte el aire.

Cecilia Martos escribió:

Carmen Pla escribió:Tan adentro queda
mi pasar esquivo,
que todo es incomprensible.

Siento el crujir de los impulsos
de una nueva vida, que no espera.

Necesito la cumbre y el reposo,
el hielo zarandeado por las corrientes,
y mis sueños en trance de querer fundirme
para comprender, no siendo.

Un deseo que ronda mis sienes
y me despide enamorada cada día;
oscureciendo el juego que deja la tarde
tan natural, tan clara,
tan llena para resistir
otra retahíla de desencantos.

Los sentimientos corren todavía
sobre un ligero gusto,
porque a pesar de todo, me debo,
alguna satisfacción de que aún me falte el aire.

Belleza y sensibilidad entre tus versos que llegan profundamente al alma del lector, a mi me emocionan, un poema precioso mi querida amiga, te dejo mi abrazo enorme.

Cecilia

Ramón Carballal escribió:Buen poema, Carmen. Una vez más he disfrutado con tus versos. Un abrazo.

Ana Muela Sopeña escribió:Belleza...

Un beso grande
Enhorabuena
Ana

Carmen Pla escribió:Tan adentro queda
mi pasar esquivo,
que todo es incomprensible.

Siento el crujir de los impulsos
de una nueva vida, que no espera.

Necesito la cumbre y el reposo,
el hielo zarandeado por las corrientes,
y mis sueños en trance de querer fundirme
para comprender, no siendo.

Un deseo que ronda mis sienes
y me despide enamorada cada día;
oscureciendo el juego que deja la tarde
tan natural, tan clara,
tan llena para resistir
otra retahíla de desencantos.

Los sentimientos corren todavía
sobre un ligero gusto,
porque a pesar de todo, me debo,
alguna satisfacción de que aún me falte el aire.