Editorial Alaire

Puso flores en toda la casa. Abrió todas las ventanas. El aire fresco y las hermosas flores,
perfumaron las estancias. Esperó a su amado sentada en el jardín. Allí permaneció,
horas, meses, años... hasta convertirse en helada piedra.

Begoña Egüen escribió:Puso flores en toda la casa. Abrió todas las ventanas. El aire fresco y las hermosas flores,
perfumaron las estancias. Esperó a su amado sentada en el jardín. Allí permaneció,
horas, meses, años... hasta convertirse en helada piedra.

Me encantan estos breves tuyos Begoña. Cuánto puede pesar la espera. La piedra inamovible, permanece, en una esperanza igual de inamovible, a pesar del frío, del tiempo.
Las sensaciones de frescor y aroma, adormecen esa tristeza que se intuye a penas, sentada en el jardín parece permanecer en una dicha contenida, sostenida por la ilusión.
Un placer venir siempre a tus cosas y tu sensibilidad querida amiga.
Beso grande

Ventura Morón escribió:

Begoña Egüen escribió:Puso flores en toda la casa. Abrió todas las ventanas. El aire fresco y las hermosas flores,
perfumaron las estancias. Esperó a su amado sentada en el jardín. Allí permaneció,
horas, meses, años... hasta convertirse en helada piedra.

Me encantan estos breves tuyos Begoña. Cuánto puede pesar la espera. La piedra inamovible, permanece, en una esperanza igual de inamovible, a pesar del frío, del tiempo.
Las sensaciones de frescor y aroma, adormecen esa tristeza que se intuye a penas, sentada en el jardín parece permanecer en una dicha contenida, sostenida por la ilusión.
Un placer venir siempre a tus cosas y tu sensibilidad querida amiga.
Beso grande

Muchísimas gracias, estimado amigo, Ventura, por loar así, tan generosamente, mi escrito.
Un abrazo.
BEGOÑA.