Editorial Alaire

No sé dónde dejé olvidados los lazos
con que anudaba mi trenza.

Dónde los caracoles que,
al escampo de la lluvia,
se fundían en la hierba espesa y fresca,
asomando tibiamente,
resbalándose en su baba.

Dónde colgué las olas que me ahogaban sin remedio,
el nogal,
que de soberbio daba las nueces podridas,
el almendro,
los cantos de los gañanes,
los olivos aturdidos chasqueándose sus ramas
al monótono claqueo de las varas,
llorando lágrimas verdes,
regando el seco terruño con su sonrisa de aceite.

Y a destiempo,
o quizá en un pliegue de mi alma perfumada de romero,
entre cuentos…, hadas…, elfos,

duerme la niña el recuerdo con la bruja del cerezo.




( No sé dónde, no sé… tú , mar, lo sabes?)

Muy bonito y musical, Concha, y el cierre para enmarcar.

Un abrazo mesetero.


Víctor

El pliegue de tu falda se perfuma de romero por si los caracoles dan la baba y el último remedio si la gota
está presente. Lo gota es de agua. Tu poema en el claqueo de las varas llora en verde y mientras los elfos
cuentan cuentos a las hadas.
Una cereza y un beso caminan hacia Alicante

Leer tus poemas marineros, intento decir, o aclarar, con el aire de tu mar enclavado en una poesía única, es una maravilla. Los ruidos de la varas secas, de los olivos y, posiblemente de tú Mediterráneo, no logran alterar tu modo de sentir, como quien resalta y subyuga, enteramente, pesando en el espíritu y en el cuerpo. Se siente la ilusión de un alma, un lugar de ser. Te felicito por tus dulces palabras, por tu mirar los recuerdos que el tiempo te trae.
Vaya para ti, mi querida Doña Concepción,Un inmenso Abrazo desde mi Atlántico mar, en mi isla.

José Manuel F. Febles.

Víctor F. Mallada escribió:Muy bonito y musical, Concha, y el cierre para enmarcar.

Un abrazo mesetero.


Víctor

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De la meseta, al mediterráneo Victor, tiempo sin "verte", gracias por tus palabras.
Abrazos marinos.

Concha Vidal escribió:No sé dónde, dejé olvidados los lazos
con que anudaba mi trenza.

Dónde los caracoles que,
al escampo de la lluvia, se fundían en la hierba
espesa … fresca,
asomando tibiamente..
resbalándose en su baba.

Dónde colgué las olas que me ahogaban sin remedio,
el nogal,
que de soberbio daba las nueces podridas,
el almendro,
los cantos de los gañanes,
los olivos aturdidos chasqueándose sus ramas
al monónoto claqueo de las varas
llorando lágrimas verdes,
regando el seco terruño con su sonrisa de aceite.

Y a destiempo,
o quizá en un pliegue de mi alma perfumada de romero,
entre cuentos … hadas… elfos

duerme la niña el recuerdo con la bruja del cerezo.




( No sé dónde, no sé… tú , mar, lo sabes?)

Me maravillas Concha. Qué delicadeza, qué detalles firmes, cuánta poesía se baña desnuda en tu poesía. Me alegra leerte. ERA

Bello cuento, Concha
un placer leerte

Guillermo Cuesta escribió:El pliegue de tu falda se perfuma de romero por si los caracoles dan la baba y el último remedio si la gota
está presente. Lo gota es de agua. Tu poema en el claqueo de las varas llora en verde y mientras los elfos
cuentan cuentos a las hadas.
Una cereza y un beso caminan hacia Alicante

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Es bonito lo de que mi poema es el claqueo de las varas, pero no quiero que llore,sólo que sonría.
Abrazos mediterráneos y no sabes cómo agradezco tu siempre presencia.

Me atrapa la sensibilidad y tu mirada poetica. Un disfrute deslizarme por tus versos.
Abrazos
Pilar

El lenguaje que usas Concha me parece bellísimo. Las palabras van dibujando el paisaje y haciéndolo palpable, pero es como si le salieran unas manos al alma y pudieran llegar a esos recuerdos.
Creo que en esa manera tan tuya de escribir, este poema representa un ejemplo maravilloso de hasta que punto está depurada y es hermosa tu forma de transmitir.
Enhorabuena querida Concha, y aunque los caracoles y el agua salada no se junten, estos abrazos marinos por supuesto, van para ti y para tus recuerdos

Tienes la gracia y la soltura de hacer bellas imágenes poéticas.
Hay en el poema tu encanto personal.
Petons, Concha

Está claro dónde está eso que buscas. Solo hay que mirarse en los ojos de tu poesía para encontrarlo. Y son tan nítidos y hermosos...
Un abrazo.
Pepa

Sin duda la magia de tus versos es muy personal y atrapa, es que me quedo encantada siempre que te leo, gracias por el momento querida Concha, mi abrazo enorme Poeta.

Cecilia

José Manuel F. Febles escribió:Leer tus poemas marineros, intento decir, o aclarar, con el aire de tu mar enclavado en una poesía única, es una maravilla. Los ruidos de la varas secas, de los olivos y, posiblemente de tú Mediterráneo, no logran alterar tu modo de sentir, como quien resalta y subyuga, enteramente, pesando en el espíritu y en el cuerpo. Se siente la ilusión de un alma, un lugar de ser. Te felicito por tus dulces palabras, por tu mirar los recuerdos que el tiempo te trae.
Vaya para ti, mi querida Doña Concepción,Un inmenso Abrazo desde mi Atlántico mar, en mi isla.

José Manuel F. Febles.

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Querido Don José Manuel, no sabes cómo agradezco siempre tu palabra, la reconozco en su altura y valía.
Has sabido "calar" el fondo del poema.

Abrazos y gracias. Este mediterráneo, hoy tan frío, te manda todos los mejores deseos del mundo.

E. R. Aristy escribió:

Concha Vidal escribió:No sé dónde, dejé olvidados los lazos
con que anudaba mi trenza.

Dónde los caracoles que,
al escampo de la lluvia, se fundían en la hierba
espesa … fresca,
asomando tibiamente..
resbalándose en su baba.

Dónde colgué las olas que me ahogaban sin remedio,
el nogal,
que de soberbio daba las nueces podridas,
el almendro,
los cantos de los gañanes,
los olivos aturdidos chasqueándose sus ramas
al monónoto claqueo de las varas
llorando lágrimas verdes,
regando el seco terruño con su sonrisa de aceite.

Y a destiempo,
o quizá en un pliegue de mi alma perfumada de romero,
entre cuentos … hadas… elfos

duerme la niña el recuerdo con la bruja del cerezo.




( No sé dónde, no sé… tú , mar, lo sabes?)

Me maravillas Concha. Qué delicadeza, qué detalles firmes, cuánta poesía se baña desnuda en tu poesía. Me alegra leerte. ERA

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Hay que bañarse desnuda, creo, para que el agua penetre, limpie, purifique, a veces los bañadores tapan los verdaderos sentimientos.
Era, muchas gracias por tu acertado comentario.
Abrazos mediterráneos.