Editorial Alaire

Carmen Pla escribió:

Soy la ribera inquieta que atropella
el vaho del sueño,
siendo hierba y arbusto.

- No es la luz - un despertar necio
sin pretender saber
que me ha mirado, que me sonríe
y me dibuja piruetas.

Y mis latidos han hecho sangre, mecha,
de algún tiempo que vivió alumbrando
dejando una estela,
un fuego sin llamas,
despertando ganas lentas.

Mujer de luna, tú.
Definitiva y categórica.
Tu sonrisa no es la mía
y mis palabras hondas
¿ a quién decírselas?.

Carmen Pla escribió:Puedo imaginar muchas cosas
y rodear la posibilidad
de invadir mis recuerdos.
Lanzarme al mundo alto y pequeño
frente a la inmensidad.
Con las manos fuertes,
con la fuerza suficiente para sostener
un camino, suponiendo - que yo camino -.

Soy la ribera inquieta que atropella
el vaho del sueño,
siendo hierba y arbusto.
Y no es el futuro lo que quiero adivinar
ni las líneas que hago
en este mismo lugar.

Ha soplado demasiado el viento
y el deshielo del camino llano
ha bajado hacia la mar en tropel.
- No es la luz - un despertar necio
sin pretender saber
que me ha mirado, que me sonríe
y me dibuja piruetas.

¿No comprendes espejo, que no quiero
ser yo?.
No quiero llenarme de marcas negras
ni de kilos de pensamientos turbios.
Que las sombras son cangilones de noria
de palabras llenas de barro y lluvia.
Y mis latidos han hecho sangre, mecha,
de algún tiempo que vivió alumbrando
dejando una estela,
un fuego sin llamas,
despertando ganas lentas.

¡¡¡Qué se mueran los cielos!!!
Que así es el amor, a primera vista
sin segunda.

Mujer de luna, tú.
Definitiva y categórica.
Tu sonrisa no es la mía
y mis palabras hondas
¿ a quién decírselas?.

Carmen Pla escribió:Puedo imaginar muchas cosas
y rodear la posibilidad
de invadir mis recuerdos.
Lanzarme al mundo alto y pequeño
frente a la inmensidad.
Con las manos fuertes,
con la fuerza suficiente para sostener
un camino, suponiendo - que yo camino -.

Soy la ribera inquieta que atropella
el vaho del sueño,
siendo hierba y arbusto.
Y no es el futuro lo que quiero adivinar
ni las líneas que hago
en este mismo lugar.

Ha soplado demasiado el viento
y el deshielo del camino llano
ha bajado hacia la mar en tropel.
- No es la luz - un despertar necio
sin pretender saber
que me ha mirado, que me sonríe
y me dibuja piruetas.

¿No comprendes espejo, que no quiero
ser yo?.
No quiero llenarme de marcas negras
ni de kilos de pensamientos turbios.
Que las sombras son cangilones de noria
de palabras llenas de barro y lluvia.
Y mis latidos han hecho sangre, mecha,
de algún tiempo que vivió alumbrando
dejando una estela,
un fuego sin llamas,
despertando ganas lentas.

¡¡¡Qué se mueran los cielos!!!
Que así es el amor, a primera vista
sin segunda.

Mujer de luna, tú.
Definitiva y categórica.
Tu sonrisa no es la mía
y mis palabras hondas
¿ a quién decírselas?.

carmen Parra escribió:Me encantó el poema Carmen, dejas imágenes preciosas en el ...mujer de la ribera inquieta, estos que recojo, me han gustado mucho

//Que las sombras son cangilones de noria
de palabras llenas de barro y lluvia.//

Un abrazo
Carmen