Editorial Alaire

I

La nostalgia traspasa
el muelle sumergido en la luz tenue
y la melancolía de los barcos.

II

Edificios de sombra en la distancia
reflejan las estrellas
en la iridiscencia de los sueños.

III

Un banco solitario me recuerda
la invisibilidad de la mirada.

IV

Silencio sepulcral bajo las nubes
divisando la luna traicionera.

V

La mujer de la niebla
abraza quietamente
el brillo de la herida.

VI

El hombre de la bruma
casi no se distingue
de las siluetas de los árboles.

VII

Hay un gato maullando en una esquina.
Espera en su refugio,
en este otoño frío del exilio.

VIII

A lo lejos se escuchan los motores
de los coches que pueblan utopías.

IX

El instinto del agua es como lluvia
que penetra despacio
en la sangre adherida a los relámpagos.

X

Humedad de la noche
mientras una pareja
se va difuminando poco a poco
y se adentra en el mundo de la nada.

XI

Música de Satie
sobre un puente que adora su destino
en la madrugada del amor.

XII

El misterio vacía
su atmósfera de búhos,
al tiempo que la escarcha
desafía al temblor del infinito.


Ana Muela Sopeña

[quote="Ana Muela Sopeña"]

Todos me gustan Ana, es un disfrute leerte compañera.
Un beso enorme.

Un excelente poema. Decir que lo he disfrutado es algo común en este espacio, pero soy íntegro, querida compañera, y cuanto diga de tus versos se queda corto para expresar la emoción que me han producido. Eres una extraordinaria poeta que aplaudo y felicito.
Un cordial abrazo desde la soledad de mi isla. Feliz Navidad, felices fiestas.

José Manuel F. Febles

Ana Muela Sopeña escribió:I

La nostalgia traspasa
el muelle sumergido en la luz tenue
y la melancolía de los barcos.

II

Edificios de sombra en la distancia
reflejan las estrellas
en la iridiscencia de los sueños.

III

Un banco solitario me recuerda
la invisibilidad de la mirada.

IV

Silencio sepulcral bajo las nubes
divisando la luna traicionera.

V

La mujer de la niebla
abraza quietamente
el brillo de la herida.

VI

El hombre de la bruma
casi no se distingue
de las siluetas de los árboles.

VII

Hay un gato maullando en una esquina.
Espera en su refugio,
en este otoño frío del exilio.

VIII

A lo lejos se escuchan los motores
de los coches que pueblan utopías.

IX

El instinto del agua es como lluvia
que penetra despacio
en la sangre adherida a los relámpagos.

X

Humedad de la noche
mientras una pareja
se va difuminando poco a poco
y se adentra en el mundo de la nada.

XI

Música de Satie
sobre un puente que adora su destino
en la madrugada del amor.

XII

El misterio vacía
su atmósfera de búhos,
al tiempo que la escarcha
desafía al temblor del infinito.


Ana Muela Sopeña

No importa cómo se le llame a estas casi telegráficos versos. Firman una poesía original y de esplendorosas e inspiradas imágenes. Un deleite especial, Ana. Gracias por compartir. ERA

Muy hermoso, Ana.
Un abrazo

Todos muy hermosos y con luz. Me gustó leerte
Besos
Pilar

Gracias, Marisa:

Aprovecho para desearte una feliz navidad.

Un beso muy grande
Ana

Sugerente y bello poema nos dejas Ana. Me gustó y disfruté leyendo

saludos

rafael

José Manuel, gracias por tus efusivas palabras.

Un fuerte abrazo
y.feliz Navidad
Ana

Agradezco, Era, tus hermosas palabras sobre estos poemitas.

Besos, amiga
Ana

Muchas gracias, Xaime, es un placer tu visita.

Un beso enorme
Ana

Pilar:

Me alegra un montón que el poema te haya gustado.

Un beso
Ana