Editorial Alaire

Me iré
con el silencio atado a un deseo,
la ruina hiriendo la distancia,
huido el sol que un día fue
y hoy es blanco de la niebla.

Os dejaré llevando el dolor en los huesos,
las vísceras huecas de sustento;
quizás sin el prodigio perseguido.

Así, como colgada de un acantilado
sin más cobijo que las gaviotas
picoteando el cráneo.

Pero no doy por acabada la palabra
que resucita los espejos,
y estrena cuaderno donde el color oscuro
no emborrone el último verso.

Hay tiempo de soltar los pájaros,
ellos distinguen las malas hierbas
y saben orientarse en lo invisible.

Yo seguiré ajustando los tejados
aunque se agrieten las manos
y lloren las lágrimas.

Me iré sin mirar al lado vencido,
esperando el milagro de los muertos,
el regreso del tiempo.

Un poema esperanzador y lleno de vida.
Preciosos versos que invitan a resurgir.
Un placer de lectura, Pilar.
Un fuerte abrazo

Cuando hay alguien que se va y no se queja siempre anuncia lo que deja, que siempre es vacío que de menos echa lo que había.
Bien resuelto el tema, amiga, ya que el silencio queda con la mirada triste cuando el que se va ni siente ni padece.

Un abrazo

Pilar Morte escribió:Me iré
con el silencio atado a un deseo,
la ruina hiriendo la distancia,
huido el sol que un día fue
y hoy es blanco de la niebla.

Os dejaré llevando el dolor en los huesos,
las vísceras huecas de sustento;
quizás sin el prodigio perseguido.

Así, como colgada de un acantilado
sin más cobijo que las gaviotas
picoteando el cráneo.

Pero no doy por acabada la palabra
que resucita los espejos,
y estrena cuaderno donde el color oscuro
no emborrone el último verso.

Hay tiempo de soltar los pájaros
para que dejen el campo sin malas hierbas.

Seguiré construyendo tejados
aunque se agrieten las manos
y lloren el destino.

Me iré sin mirar al lado vencido,
esperando el milagro de los muertos
que resucitan juntos sin engaño.

Un poema que clama y reafirma su esperanza. Bellas reflexiones, Pilar. ERA

Un poema muy firme y evocador. Llevas muchos caminos a cuesta esta obra iluminada, querida Pilar.

Felicitaciones sinceras y un beso grande.

Me gusta eso de seguir construyendo tejados...la imagen de la esperanza de los muertos, es un poema que culmina con la esperanza, te felicito
Un abrazo
Carmen

[quote="Pilar Morte"]Me iré
con el silencio atado a un deseo,
la ruina hiriendo la distancia,
huido el sol que un día fue
y hoy es blanco de la niebla.

Os dejaré llevando el dolor en los huesos,
las vísceras huecas de sustento;
quizás sin el prodigio perseguido.

Así, como colgada de un acantilado
sin más cobijo que las gaviotas
picoteando el cráneo.

Pero no doy por acabada la palabra
que resucita los espejos,
y estrena cuaderno donde el color oscuro
no emborrone el último verso.

Hay tiempo de soltar los pájaros
para que dejen el campo sin malas hierbas.

Seguiré construyendo tejados
aunque se agrieten las manos
y lloren el destino.

Me iré sin mirar al lado vencido,
esperando el milagro de los muertos,
el regreso del tiempo.

Muy buen poema, Pilar. Siempre un lujo leerte.

Un abrazo.

Carmen Pla escribió:Un poema esperanzador y lleno de vida.
Preciosos versos que invitan a resurgir.
Un placer de lectura, Pilar.
Un fuerte abrazo

De eso se trata, de resurgir. Gracias por estar
Abrazos
Pilar

Buen poema, Pilar, profundo, íntimo y esperanzador. Mi felicitación y un beso.

Qué belleza. Qué bien has plasmado en versos tu profundo sentimiento. Grande este poema.
Un abrazo, querida amiga.
J. Manuel

Guillermo Cuesta escribió:Cuando hay alguien que se va y no se queja siempre anuncia lo que deja, que siempre es vacío que de menos echa lo que había.
Bien resuelto el tema, amiga, ya que el silencio queda con la mirada triste cuando el que se va ni siente ni padece.

Un abrazo

Gracias, amigo, por estar cerca de estos versos
Abrazos
Pilar

Muy bello, amiga
un abrazo

Poema de despedida que nos anuncia, no obstante, toda la compañía de una vida generosamente entregada. Un placer, amiga Pilar. Abrazo y salud.