Editorial Alaire

Allí donde el arco iris de los sueños se apaga,
donde los parias construyen con su sangre
una muralla que les proteja del futuro,
donde el mar es una alfombra de mentiras
y se esconde detrás de columnas de humo
esa patria que exhiben los canallas,
yo te esperaré para cuando regreses
con un eslogan de paz esculpido en los labios.
Quiero que vengas con las promesas
de este dios que ya no ampara y en silencio
oculta la ley de sus cuchillos en mi voz.
Quiero una libertad audaz, en carne viva,
y la urgencia del pan abriendo sus jazmines
sobre la mesa de todos los hambrientos.
Y también las manos de un plenilunio nuevo
acariciando la piel que a la ausencia se adhiere
y va nutriendo el desamor de quienes
borrachos de soledad me colman de vacío.
Cundo te sienta llorar por mis heridas,
una a una recogeré tus lágrimas y vendrás
conmigo para que veas como esa chusma
armada con sus fusiles de infamia nos vigila
y con alevosía a la noche desahucia sus estrellas.

Hermosas imágenes para un poema de amor y encuentro. Me gustó leerte
Abrazos
Pilar

Me ha gustado mucho tu poema, Rafael, que se apoya en unas bellas imágenes y en atinadas metáforas.
Vaya mi aplauso.

Un abrazo.

Poema hermoso con imágenes y metáforas bellisimas, me ha gustado mucho poeta
Un abrazo
carmen

Hermoso y valiente cada verso de tu poema, amigo. No puede una dejar de leer hasta ese vigoroso final que nos regalas.

Un gustazo aplaudir tus letras.

Salud y felicidad.


PS: en los versos de cierre falta una a en Cuando

Rafael Valdemar escribió:Allí donde el arco iris de los sueños se apaga,
donde los parias construyen con su sangre
una muralla que les proteja del futuro,
donde el mar es una alfombra de mentiras
y se esconde detrás de columnas de humo
esa patria que exhiben los canallas,
yo te esperaré para cuando regreses
con un eslogan de paz esculpido en los labios.
Quiero que vengas con las promesas
de este dios que ya no ampara y en silencio
oculta la ley de sus cuchillos en mi voz.
Quiero una libertad audaz, en carne viva,
y la urgencia del pan abriendo sus jazmines
sobre la mesa de todos los hambrientos.
Y también las manos de un plenilunio nuevo
acariciando la piel que a la ausencia se adhiere
y va nutriendo el desamor de quienes
borrachos de soledad me colman de vacío.
Cundo te sienta llorar por mis heridas,
una a una recogeré tus lágrimas y vendrás
conmigo para que veas como esa chusma
armada con sus fusiles de infamia nos vigila
y con alevosía a la noche desahucia sus estrellas.

Hermoso poema, Rafael. Un abrazo. ERA

Un poema de sublime emoción lírica para disfrutar a manos llenas.

Todo un placer de lectura, amigo Rafael.

Un abrazo.

Pilar gracias por pasarte por mis versos y dejar tus palabras

saludos

rafael

Pilar gracias por pasarte por mis versos y dejar tus palabras

saludos

rafael

Muy emotivo, Rafael.
Un placer leerte.
Abrazo

Qué bien demuestras que la paz cuando espera vence y que la esperanza la paz encuentra siempre.

M e encantó el poema.

ramón gracias por pasarte por el poema y dejar tus palabras

saludos

rafael

Carmen gracias por pasarte por el poema y dejar tus palabras

saludos

rafael

Hallie gracias por pasarte por el poema y dejar tus palabras

saludos

rafael

Roxie gracias por pasarte por el poema y dejar tus palabras

saludos
rafael