Editorial Alaire

Como póstuma oración de atardeceres,
pasa la noche en soledad de vieja alcoba.
Un perro sin nombre
ladra notas de melancolía
en una calle que se pierde en otra calle.
Siempre puedes ver el alma de los perros
en sus pupilas encendidas por la lluvia.
Esta es noche de adiós y bienvenida,
de fiebres pálidas y naufragios en aguas benditas.
La última página de septiembre
alumbrará el primer cielo de abril.
Hay una ciudad que se hunde
en la quietud de habitaciones vacías,
anclada al fulgor de otras madrugadas,
memoria de arrasadas luces,
que vive de la sed y del olvido.
Sé que ya no soy el mismo,
que me ciega la costumbre de mirar a los abismos,
que, a veces, me quedo en la piel de las palabras
y que desaparezco en las huellas de la orilla.

Qué logrado este poema; las imágenes llegan y tocan muy profundamente. Mención de honor para ese gran final. Ser, es un verbo que salta a su aire y a la vez fija sus ojos en un punto trascendental.

Abrazo y mis felicitaciones sinceras, querido amigo.

La soledad, el tiempo y nuestros límites que nos dejan en la orilla de la vida, tal vez sin saber de qué se trata.
Profundo y bello, Ramón.

Ramón Castro Méndez escribió:Como póstuma oración de atardeceres,
pasa la noche en soledad de vieja alcoba.
Un perro sin nombre
ladra notas de melancolía
en una calle que se pierde en otra calle.
Siempre puedes ver el alma de los perros
en sus pupilas encendidas por la lluvia.
Esta es noche de adiós y bienvenida,
de fiebres pálidas y naufragios en aguas benditas.
La última página de septiembre
alumbrará el primer cielo de abril.
Hay una ciudad que se hunde
en la quietud de habitaciones vacías,
anclada al fulgor de otras madrugadas,
memoria de arrasadas luces,
que vive de la sed y del olvido.
Sé que ya no soy el mismo,
que me ciega la costumbre de mirar a los abismos,
que, a veces, me quedo en la piel de las palabras
y que desaparezco en las huellas de la orilla.

Me ha gustado mucho el lenguaje sublime de tu bello poema, Ramon. ERA

Un profundo poema escrito con belleza e inteligencia. Un placer leerte
Abrazos
Pilar

Buen poema. Lo he disfrutado. Un abrazo.

Hallie Hernández Alfaro escribió:Qué logrado este poema; las imágenes llegan y tocan muy profundamente. Mención de honor para ese gran final. Ser, es un verbo que salta a su aire y a la vez fija sus ojos en un punto trascendental.

Abrazo y mis felicitaciones sinceras, querido amigo.

Muy agradecido por tu paso y por tus siempre generosos y atentos comentarios, amiga Hallie.

Abrazo.

Marimar González escribió:La soledad, el tiempo y nuestros límites que nos dejan en la orilla de la vida, tal vez sin saber de qué se trata.
Profundo y bello, Ramón.

Muchas gracias, Marimar, por leerme y dejarme tus amables impresiones.

Abrazos.

E. R. Aristy escribió:

Ramón Castro Méndez escribió:Como póstuma oración de atardeceres,
pasa la noche en soledad de vieja alcoba.
Un perro sin nombre
ladra notas de melancolía
en una calle que se pierde en otra calle.
Siempre puedes ver el alma de los perros
en sus pupilas encendidas por la lluvia.
Esta es noche de adiós y bienvenida,
de fiebres pálidas y naufragios en aguas benditas.
La última página de septiembre
alumbrará el primer cielo de abril.
Hay una ciudad que se hunde
en la quietud de habitaciones vacías,
anclada al fulgor de otras madrugadas,
memoria de arrasadas luces,
que vive de la sed y del olvido.
Sé que ya no soy el mismo,
que me ciega la costumbre de mirar a los abismos,
que, a veces, me quedo en la piel de las palabras
y que desaparezco en las huellas de la orilla.

Me ha gustado mucho el lenguaje sublime de tu bello poema, Ramon. ERA

Muchas gracias, ERA, por pasarte por mis letras y obsequiarme con tu gentil comentario.

Abrazos.

Estupendo poema, en el que la metáfora brilla en cada verso decorando las imágenes hermosas que tan bien pìntas, poeta.
Para muestra, un botón:

"memoria de arrasadas luces,
que vive de la sed y del olvido"

Un a brazo

Pilar Morte escribió:Un profundo poema escrito con belleza e inteligencia. Un placer leerte
Abrazos
Pilar

Muy agradecido, Pilar, por tu paso y apreciado comentario.

Abrazos.

Ramón Carballal escribió:Buen poema. Lo he disfrutado. Un abrazo.

Muchas gracias, Ramón, por dejarte caer por mis letras y ofrecerme tu atento comentario.

Un abrazo.

Ramón Castro Méndez escribió:Como póstuma oración de atardeceres,
pasa la noche en soledad de vieja alcoba.
Un perro sin nombre
ladra notas de melancolía
en una calle que se pierde en otra calle.
Siempre puedes ver el alma de los perros
en sus pupilas encendidas por la lluvia.
Esta es noche de adiós y bienvenida,
de fiebres pálidas y naufragios en aguas benditas.
La última página de septiembre
alumbrará el primer cielo de abril.
Hay una ciudad que se hunde
en la quietud de habitaciones vacías,
anclada al fulgor de otras madrugadas,
memoria de arrasadas luces,
que vive de la sed y del olvido.
Sé que ya no soy el mismo,
que me ciega la costumbre de mirar a los abismos,
que, a veces, me quedo en la piel de las palabras
y que desaparezco en las huellas de la orilla.

Bien ordenados, bien escritos.

Un magnífico poema.

Un abrazo.

Ramón Castro Méndez escribió:Como póstuma oración de atardeceres,
pasa la noche en soledad de vieja alcoba.
Un perro sin nombre
ladra notas de melancolía
en una calle que se pierde en otra calle.
Siempre puedes ver el alma de los perros
en sus pupilas encendidas por la lluvia.
Esta es noche de adiós y bienvenida,
de fiebres pálidas y naufragios en aguas benditas.
La última página de septiembre
alumbrará el primer cielo de abril.
Hay una ciudad que se hunde
en la quietud de habitaciones vacías,
anclada al fulgor de otras madrugadas,
memoria de arrasadas luces,
que vive de la sed y del olvido.
Sé que ya no soy el mismo,
que me ciega la costumbre de mirar a los abismos,
que, a veces, me quedo en la piel de las palabras
y que desaparezco en las huellas de la orilla.

Me encantó, Ramón, con cierto parecido a mi "los perros no hablan", encuentro riqueza en tus letras. Mi enhorabuena! Un abrazo

Guillermo Cuesta escribió:Estupendo poema, en el que la metáfora brilla en cada verso decorando las imágenes hermosas que tan bien pìntas, poeta.
Para muestra, un botón:

"memoria de arrasadas luces,
que vive de la sed y del olvido"

Un a brazo

Muchas gracias, Guillermo, por tu paso y generoso comentario.

Un abrazo.