Editorial Alaire

Mujer de trencitas

A Rafel Calle

Porque
Eras como un frio hilo de la escuela.

Porque tu fe errada en las matemáticas, te bendecían.

El lobo solitario salió aquella tarde,
Aquella donde fuiste mujer.

Luego amante, bendecías mis días con tus besos

Luego la nada,
Luego la soledad,
Y el campo con sus horizontes y sus girasoles.

Luego, el sur, las cuchillas
El oscuro lamento de los ciegos,

Luego la guerra, luego los ojos amantes,
Luego la soledad del poeta,
El jugo mezclado con el alcohol.

Pero soy poeta inocente
Y a pesar de la ruina del infierno
A pesar de los rumiantes celulares,
Quiero ser una persona
Más allá de las alteraciones.

Te quiero, verdadera,
Con esas trencitas hermosas
Niña, niña mía, para siempre mía.
Quiero amarte,
Pero tu rostro verdadero
Es aquel junto al jardín

Ya no tengo tres años
Pero la lágrima se cae en mi vaso
Y brindo por esa inocencia.

Veo que he caído en paracaídas a este hermoso lugar! Qué chévere este poema. Nada más que estoy seguro que vaso es con "v" corta. un errorsito tipográfico que estoy seguro corregirá para que su poema sea perfecto. Espero no haberle ofendido, y vea que reconozco a este poema por ser bello y original.

Me ha gustado mucho el poema, Javier. Le encuentro, en su desarrollo, una frescura y una naturalidad encomiable y también se adorna de bellas metáforas. Un placer.
Mi enhorabuena.

Un abrazo.

javierdicenzo80 escribió:Mujer de trencitas

A Rafel Calle

Porque
Eras como un frio hilo de la escuela.

Porque tu fe errada en las matemáticas, te bendecían.

El lobo solitario salió aquella tarde,
Aquella donde fuiste mujer.

Luego amante, bendecías mis días con tus besos

Luego la nada,
Luego la soledad,
Y el campo con sus horizontes y sus girasoles.

Luego, el sur, las cuchillas
El oscuro lamento de los ciegos,

Luego la guerra, luego los ojos amantes,
Luego la soledad del poeta,
El jugo mezclado con el alcohol.

Pero soy poeta inocente
Y a pesar de la ruina del infierno
A pesar de los rumiantes celulares,
Quiero ser una persona
Más allá de las alteraciones.

Te quiero, verdadera,
Con esas trencitas hermosas
Niña, niña mía, para siempre mía.
Quiero amarte,
Pero tu rostro verdadero
Es aquel junto al jardín

Ya no tengo tres años
Pero la lágrima se cae en mi vaso
Y brindo por esa inocencia.

Alzo la pequeña copa de mi vida y brindo por este bello poema. Salud! ERA

Este poema transmite emoción, frescura y belleza.
Uno de tus poemas que más me ha gustado
Abrazos
Pilar

Paco gracias por tu paso por mi obra.

Ramòn gracias por tu concepto.

aristi gracias por tu comentario.

pilar gracias por tu paso por mi obra.

javierdicenzo80 escribió:Mujer de trencitas

A Rafel Calle

Porque
Eras como un frio hilo de la escuela.

Porque tu fe errada en las matemáticas, te bendecían.

El lobo solitario salió aquella tarde,
Aquella donde fuiste mujer.

Luego amante, bendecías mis días con tus besos

Luego la nada,
Luego la soledad,
Y el campo con sus horizontes y sus girasoles.

Luego, el sur, las cuchillas
El oscuro lamento de los ciegos,

Luego la guerra, luego los ojos amantes,
Luego la soledad del poeta,
El jugo mezclado con el alcohol.

Pero soy poeta inocente
Y a pesar de la ruina del infierno
A pesar de los rumiantes celulares,
Quiero ser una persona
Más allá de las alteraciones.

Te quiero, verdadera,
Con esas trencitas hermosas
Niña, niña mía, para siempre mía.
Quiero amarte,
Pero tu rostro verdadero
Es aquel junto al jardín

Ya no tengo tres años
Pero la lágrima se cae en mi vaso
Y brindo por esa inocencia.

Preciosa inocencia.

Un abrazo.

Alejandro gracias por pasar por mi obra.

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