Editorial Alaire

Siempre queda un pedazo de mí en la habitación.
La última palabra que dije, mi aliento, la mirada
de las cosas, la luz perdida. Hay un rostro que olvidé
en el espejo, un pasillo que aún recuerda mis pasos,
la llamada de un teléfono que no repite los sonidos
de la noche. Otras voces se superponen a la mía
como escritura en las paredes o eco en los cristales.
No vivo solo, existe un mundo en los cuadros
que es un ayer perdido. Cada vez que cierro
una puerta los ángeles callan, las sombras ríen.

Sentimos que seguimos rozando aquello que nos hizo vivir. Un poema precioso, cálido y con versos que atrapan.
Me gustó mucho
Abrazos
Pilar

Pilar Morte escribió:Sentimos que seguimos rozando aquello que nos hizo vivir. Un poema precioso, cálido y con versos que atrapan.
Me gustó mucho
Abrazos
Pilar

Gracias, Pilar. Abrazos,

Seguro que no vivimos solos, los cuadros y los espejos guardan vivencias y recuerdos
acercándolos con total nitidez
Un hermoso poema Ramón
Un abrazo
Carmen

carmen Parra escribió:Seguro que no vivimos solos, los cuadros y los espejos guardan vivencias y recuerdos
acercándolos con total nitidez
Un hermoso poema Ramón
Un abrazo
Carmen

Gracias, Carmen, por comentar. Un abrazo.

Un poema hermoso que describe con gran sensibilidad esa nostalgia de los lugares vividos.
Me encantó amigo, fuerte abrazo

Huelen, huelen otra vez tus hermosas imágenes a través de la palabra.
Un abrazo

Misterioso y estremecedor. Las presencias y ausencias quedan entre las paredes, fantasmas de nosotros mismos capturados en un momento del pasado y de otros que se fueron y que son retenidos por la nostalgia. Hermoso el texto, veo renovación; al final de las calles alucinantes de tu ciudad, encuentras lugares secretos que motivan nuestra imaginación.
Saludos, Ramón

Me ha encantado este poema donde la vida se prolonga más allá de la presencia humana. Creo que estos pensamientos son fuertes acicates para la imaginación, para la percepción de mundos de ensoñación. Es una forma muy avanzada de poetizar. Mis aplausos.

Un abrazo, compañero.
Óscar

Sencillamente precioso, claro, armonioso... Tu poema me ha encantado amigo. Tu habitación -los cuadros, el espejo... no te hablan, eres tú con tu nostalgia, quien habla por ellos. Recibe, con mi reconocimiento por tan bello trabajo, un afectuoso abrazo.

Ramón Carballal escribió:Siempre queda un pedazo de mí en la habitación.
La última palabra que dije, mi aliento, la mirada
de las cosas, la luz perdida. Hay un rostro que olvidé
en el espejo, un pasillo que aún recuerda mis pasos,
la llamada de un teléfono que no repite los sonidos
de la noche. Otras voces se superponen a la mía
como escritura en las paredes o eco en los cristales.
No vivo solo, existe un mundo en los cuadros
que es un ayer perdido. Cada vez que cierro
una puerta los ángeles callan, las sombras ríen.

Tu madurez poetica see have evidente, Ramon. Veo un lenguaje menos rebuscado, igual en calidad surrealista
Un poema que fluye de la roca fuerte, segura de la creatividad
Te felicito! ERA

Ventura Morón escribió:Un poema hermoso que describe con gran sensibilidad esa nostalgia de los lugares vividos.
Me encantó amigo, fuerte abrazo

Gracias, Ventura, por tu amable comentario. Un abrazo.

Armilo Brotón escribió:Huelen, huelen otra vez tus hermosas imágenes a través de la palabra.
Un abrazo

Gracias, Armilo, por leerme y comentar. Un abrazo.

Marimar González escribió:Misterioso y estremecedor. Las presencias y ausencias quedan entre las paredes, fantasmas de nosotros mismos capturados en un momento del pasado y de otros que se fueron y que son retenidos por la nostalgia. Hermoso el texto, veo renovación; al final de las calles alucinantes de tu ciudad, encuentras lugares secretos que motivan nuestra imaginación.
Saludos, Ramón

Te agradezco el comentario, Marimar. Un abrazo.

Óscar Distéfano escribió:Me ha encantado este poema donde la vida se prolonga más allá de la presencia humana. Creo que estos pensamientos son fuertes acicates para la imaginación, para la percepción de mundos de ensoñación. Es una forma muy avanzada de poetizar. Mis aplausos.

Un abrazo, compañero.
Óscar

Gracias, Óscar. Me alegra que te haya gustado el poema. Un abrazo.