Editorial Alaire

pio espejo escribió:Siento hoy mis manos muy frías
—novicias en el seno de su claustro—
en la calor del nido de mi pecho,
acurrucadas juntas, ofreciéndose mimos,
protegidas del viento que sacude
estos días siempre tempestuosos.

Así se van haciendo una en ese abrigo,
—cosmogonía de moléculas que atraen
al universo único que mora en cada dedo—
y se van difuminando si más crecen.

Ya son sólo el contorno de unas manos,
la línea azul de un algoritmo abstracto,
la forma confusa que no podemos distinguir
si no se cierran los ojos e imaginan.

Pilar Morte escribió:Has utilizado muy bien las manos para llevarnos al sentido de lo desconocido. Me gustó leerte
Abrazos
Pilar

pio espejo escribió:Siento hoy mis manos muy frías
—novicias en el seno de su claustro—
en la calor del nido de mi pecho,
acurrucadas juntas, ofreciéndose mimos,
protegidas del viento que sacude
estos días siempre tempestuosos.

Así se van haciendo una en ese abrigo,
—cosmogonía de moléculas que atraen
al universo único que mora en cada dedo—
y se van difuminando si más crecen.

Ya son sólo el contorno de unas manos,
la línea azul de un algoritmo abstracto,
la forma confusa que no podemos distinguir
si no se cierran los ojos e imaginan.



Pio Espejo

Considero el simbolismo de las manos nuestra capacidad de acción. Es un poema logrado y perspicaz que hila un manto o un pañuelo y se devela en ese acto de cubrir todo cuanto es capaz de hacer las manos. Cubre y descubre con arte esos universos, esas caricias que no son aquello que no se ve a simple vista. Sugiere dos dimensiones: la obvia materia, y la energía y visión interna que posee el ser humano. Ver, y tocar, sentir, es entonces algo que nace de adentro y que supera el deterioro de la materia. Las manos también a mí me fascinan. Te felicito, Pio por un hermoso poema! ERA