¿quien querrias ser de poder ser otro persona?
Publicado: Mié, 09 Jul 2008 13:33
Me preguntas ¿que pasa?.
Vuelvo mi vista en ambas direcciones
y descubro que pasar, no pasa nada,
pero te tranquilizo aclarándote que si pasara
le saludaría y punto.
Entonces te pregunto ¿que tal?
Respondes que bien, sin añadir más.
Echo mis cuentas y calculo que es la mitad de camino
entre el natural optimismo y el lacónico escepticismo
del desden de dos locos ociosos en febril inactividad,
justificadora de la incapacidad de mover un solo dedo para asustar
las moscas que hacen rebaño sobre el plato,
pasando la mañana, vestidos solo con el pijama,
instalados en el estrecho corredor de la cordura
sujetos por clavo ardiendo del nihilismo,
balanceando sobre una silla nuestros cuerpos
con imprudente riesgo y con los pies sobre la mesa.
-¿Quien querrías ser de poder ser otra persona?
El eco de tu pregunta atraviesa mis oídos
como el escalofrío de oír contra mi sien
el mecanismo del percutor de un arma
cuya mirada cabe entre mis dos ojos
estremeciendo de golpe mi indefenso costado
y adueñándose de mí pecho,
provoca que me pesen los brazos
bajo un extraño dolor
y mis piernas no respondan.
-¿Quien querrías ser de poder ser otra persona?
repites con insistencia infantil
Aparto el cigarro
de la comisura de mis labios,
escupo al suelo,
te devuelvo la pregunta.
- Hubo un gallo
que paso la mitad de su mísera vida entre rejas
aguardando en el corredor de la muerte;
la noche antes a que lo ejecutaran
pidió como ultima cena
cinco docenas de ostras
y una botella de Veuve de Clitquo;
nunca llego a subir al cadalso,
lo mato una reacción alérgica...
-¿y que?- me espetas
Pego otra calada
y mientras el humo gris que exhalo
estalla en tu rostro
y como una neblina azul
recorre tus negros cabellos,
te respondo:
- me gustaría ser el diablo…..
Noto como ahora eres tú
él que se siente incomodo.
…..me pido ser tú y que tú seas yo,
que me llames por tu nombre;
solo así llegare a viejo;
para ser sabio,
para jubilarte siendo tu sustituto,
comprobaras
que me sobran motivos.
- Llegara un día en que tu lengua sea tu perdición …
pones precio a mi insolencia
Por primera vez soy capaz de sostener tu mirada
triturada como la de una serpiente
para responderte esbozando una sonrisa….
-mejor condenarse
que perder el alma, querido Mefisto….
Vuelvo mi vista en ambas direcciones
y descubro que pasar, no pasa nada,
pero te tranquilizo aclarándote que si pasara
le saludaría y punto.
Entonces te pregunto ¿que tal?
Respondes que bien, sin añadir más.
Echo mis cuentas y calculo que es la mitad de camino
entre el natural optimismo y el lacónico escepticismo
del desden de dos locos ociosos en febril inactividad,
justificadora de la incapacidad de mover un solo dedo para asustar
las moscas que hacen rebaño sobre el plato,
pasando la mañana, vestidos solo con el pijama,
instalados en el estrecho corredor de la cordura
sujetos por clavo ardiendo del nihilismo,
balanceando sobre una silla nuestros cuerpos
con imprudente riesgo y con los pies sobre la mesa.
-¿Quien querrías ser de poder ser otra persona?
El eco de tu pregunta atraviesa mis oídos
como el escalofrío de oír contra mi sien
el mecanismo del percutor de un arma
cuya mirada cabe entre mis dos ojos
estremeciendo de golpe mi indefenso costado
y adueñándose de mí pecho,
provoca que me pesen los brazos
bajo un extraño dolor
y mis piernas no respondan.
-¿Quien querrías ser de poder ser otra persona?
repites con insistencia infantil
Aparto el cigarro
de la comisura de mis labios,
escupo al suelo,
te devuelvo la pregunta.
- Hubo un gallo
que paso la mitad de su mísera vida entre rejas
aguardando en el corredor de la muerte;
la noche antes a que lo ejecutaran
pidió como ultima cena
cinco docenas de ostras
y una botella de Veuve de Clitquo;
nunca llego a subir al cadalso,
lo mato una reacción alérgica...
-¿y que?- me espetas
Pego otra calada
y mientras el humo gris que exhalo
estalla en tu rostro
y como una neblina azul
recorre tus negros cabellos,
te respondo:
- me gustaría ser el diablo…..
Noto como ahora eres tú
él que se siente incomodo.
…..me pido ser tú y que tú seas yo,
que me llames por tu nombre;
solo así llegare a viejo;
para ser sabio,
para jubilarte siendo tu sustituto,
comprobaras
que me sobran motivos.
- Llegara un día en que tu lengua sea tu perdición …
pones precio a mi insolencia
Por primera vez soy capaz de sostener tu mirada
triturada como la de una serpiente
para responderte esbozando una sonrisa….
-mejor condenarse
que perder el alma, querido Mefisto….