Editorial Alaire

No quisiera ser yo el azote del soneto. Tampoco ser el mequino y vanidoso. Buena defensa has encontrado en nuestra lengua, esta que
sabe resolver lo que te inspira tan clásica y refinadamente.

Yo creo que estás a cero augurios `y retenes por miedo a ser castigado por tu carajeada.
Como yo ya me curé de espantos y otras desgracias te aplaudo sigilosamente aunque no por miedo, sino por respeto.

Un abrazo

Un soneto con una fuerza expresiva impresionante,
Me ha sorprendido y me ha gustado mucho, sinceramente.
Su efecto y estilo académico invita a reflexionar
Y por eso es tan necesario este tipo de poemas.


Enhorabuena, Oscar
Un abrazo con mi respeto

Rafael

Terrible diatriba encerrada en un soneto cómodo de lectura, rebosante de esplendor poético y perfecto como toda tu obra.
Un abrazo cordial y admirativo.
Jerónimo

Hermoso e interesante trabajo de Óscar.

Guillermo Cuesta escribió:No quisiera ser yo el azote del soneto. Tampoco ser el mezquino y vanidoso. Buena defensa has encontrado en nuestra lengua, esta que sabe resolver lo que te inspira tan clásica y refinadamente.

Yo creo que estás a cero augurios `y retenes por miedo a ser castigado por tu carajeada.
Como yo ya me curé de espantos y otras desgracias te aplaudo sigilosamente aunque no por miedo, sino por respeto.

Un abrazo

Gracias, Guillermo. Tu comentario me hace sentir bien. Celebro que te haya llegado el poema.

Un abrazo grande.
Óscar

Muy buen soneto, un tanto ácido el lenguaje elegido, pero eso no le quita de sus méritos. Un soneto como una sombra que no se sabe si es de uno o ha se ha escapado de algún libro de filosofía. Mis abrazos sinceros, Óscar.

Tremendo tu soneto compañero.
Admiro como escribes.
Un abrazo grande.